Beautiful Mistake

Capitulo 18

MARATÓN DE NAVIDAD 2/4

Capitulo 18: Lo Siento

El ambiente se queda en silencio. Mark no dice nada después de mi confesión, me gustaría saber que pasa ahora por su cabeza. Nunca me ha preguntado antes por el padre de mi hija y yo tampoco tenía mucha intención de contarselo por ahora.

-¿Por eso te has puesto así con él? Mira yo no se que problemas tendreis pero creo que ponerte a gritarle no va a solucionar nada -me dice el rubio en un tono más calmado.

-Lo se, y lo siento, mis nervios me pasan malas jugadas. Si no llegas a estar ahí antes, me podría haber metido en graves problemas por pegar a un profesor. Y ahora... -Agacho la cabeza -De verdad que lo siento por la que he montado en el restaurante, yo no quería que esto pasara. Se que deberías despedirme después de esto, aunque si lo hicieras yo... Lottie...

Algunas lágrimas se me escapan sin poder evitarlo. La tensión de todo el día se me acumula, y de alguna manera necesita ser liberada. Siento los brazos de Mark rodearme y estrecharme contra su pecho. Yo me abrazo a él fuertemente mientras no puedo evitar llorar como una niña pequeña, esto me supera.

-Ya, tranquila -me susurra -Todos tenemos días malos.

-Y otros pagan las consecuencias -contesto arrepentida.

-Mira Kath, llevas muchos años trabajando aquí y nunca te he podido poner ni una sola pega, siempre has estado puntual y te has esforzado al máximo para que todo saliera perfecto. Es la primera vez que tengo que reprocharte algo y claro que no voy a despedirte.

Yo me separo un poco de él y le miro a los ojos, simplemente sostenemos nuestras miradas en silencio.

-¿De verdad? -Digo hablando casi en un susurro.

-Sería idiota si te despidiera. Además de perder a la mejor camarera, perdería la la oportunidad de verte todos los días y de que me alegres el día con una sola sonrisa, de pasar tiempo con la preciosa hija que tienes, de poder echarte piropos para que tú me des calabazas -confiesa sonriéndome -perdería demasiado.

Yo me quedo callada sin saber que decir, ¿Mark se me está declarando, o esto es un sueño? Siempre he sabido que yo le gustaba pero realmente no me esperaba esto. Es diferente a todos los chicos que he conocido, él siempre me trata genial y se preocupa por mí y por Lottie. Siempre está ahí cuando le necesito y tiene las palabras adecuadas para hacerme sentir bien.

Se acerca a mí poco a poco hasta chocar nuestras frentes. Cierro los ojos oliendo su colonia, huele tan bien... Siento su respiración en mi cara, mezclándose con la mía. Sus manos rodean mi cintura pegándome más a él. Nada me importa en ese momento, paso mis manos por detrás de su cuello y acaricio su pelo lentamente. Abro mis ojos para encontrarme con los suyos, su mirada tiene un brillo especial.

Muerdo mis labios nerviosa. Cada vez estamos mas cerca, nuestras narices se rozan. En un segundo acabo con la distancia que separa nuestros labios fundiéndonos en un beso de película. Mark sonríe mientras su boca se mueve a la vez que la mía. Pagaría lo que fuera por que este momento no acabara nunca.

Su lengua pasa por mis labios pidiendo acceso a mi boca, yo se lo doy profundizando el beso. Nuestras lenguas se entrelazan comenzando una lucha entre ellas. Por desgracia nuestros pulmones empiezan a pedir aire y tenemos que separararnos. Nos quedamos pegados recuperando la respiración.

-Creo que... Lottie nos estará esperando -digo mirándole.

-Sí -contesta con una sonrisa -No hagamos esperar a la princesa.

Yo le sonrío de vuelta y beso su mejilla.

-Gracias.

Después entro de nuevo al restaurante. Lottie sigue sentada en el taburete balanceando sus pies ya que no llegan al suelo. Me acerco a ella y me agacho un poco para que me mire.

-¿Estas enfadada conmigo? -pregunto y ella me mira asintiendo -Lo siento cariño, no volverá a pasar.

-¿Por qué te has peleado con mi profe?

Yo me callo tras su pregunta, ella es muy pequeña para entenderlo.

-Son cosas de mayores cielo, pero ya esta arreglado, ¿vale? No más discursiones.

Ella me mira dudosa, creo que se está pensando si perdonarme o no, a Lottie le afectan mucho estas cosas.

-Bueno... Te perdono.

Yo sonrío abrazándola y acaricio su pelo peinándolo.

-Gracias peque.