De La Tortura Al Amor

CAPITULO 20

-¿Qué pasa Isabella?- pregunta James al momento de llegar conmigo, no puedo hablar el nudo en mi garganta me lo impide- Mírame Isabella dime que sucede- no lo quiero mirar a los ojos porque me pondría a llorar en ese instante

-Quiero irme- le digo y ruego porque me haga caso y no pregunte mas- Por favor me siento mal

-Me dirás que paso- No respondo- está bien vámonos, solo le aviso a Joseph

James entra al bar de nuevo yo lo espero afuera no quiero entrar, miro a un punto fijo y pienso en lo que paso adentro, odio no tener la valentía para enfrentar las cosas, de reojo veo la silueta de una sombra volteo pensando que es James pero no lo es, Jasón se acerca a mí, mis nervios aumentan.

-Más te vale que no menciones nada al respecto- me dice de una manera escalofriante- Porque será tu palabra contra la mía-intenta acariciar mi mejilla pero logro evitarlo, se ríe y se va, no soporto esta situación no se a que quiere llegar con esto o tal vez si, mis lagrimas han logrado salir no puedo evitar no llorar, alguien me toma del brazo por lo cual me asusto y me zafo lo más rápido que puedo-No- digo antes de voltear y ver a James extrañado

-Vámonos Isabella- me dice y nos encaminamos al coche.

-No dirás nada- me pregunta de nuevo

-No por ahora- no quiero hablar ni explicar nada ahora, el camino hacia la casa es en silencio y ninguno de los dos habla.

****

Me encuentro en el baño desmaquillándome ya con la pijama puesta para dormir, hubiera preferido a ver disfrutado de la noche, hace mucho que no lo hago.

Salgo del baño dispuesta a dormirme, James no está en la habitación supongo que está abajo.

****

Despierto por el sonido de alguien tocando la puerta del cuarto, estoy boca abajo no me puedo mover y me estoy desesperando, James está arriba de mi literalmente, pesa demasiado no puedo moverlo, su torso está arriba de mi espalda y sus piernas enrolladas con las mías, se le ha olvidado que no duerme solo.

-James-susurro y pues claro no me oye-James, despierta- vuelven a tocar la puerta.

-El desayuno estará en 20 minutos, la señora Helena quiere que todos bajen a desayunar-dice Matilde ya que no contestamos o más bien no contesto yo.

-James- hablo más fuerte

-Mmm- es lo único que pronuncia

-Hay que levantarnos, tu abuela quiere que todos desayunemos juntos

-Aja, levántate tu primero- me dice

-Pues si no me estuvieras aplastando me hubiera levantado desde hace rato

-Ya esta- se mueve dejándome por fin libre, me tengo que dar una ducha rápida, así que agarro la primera ropa que veo para ponerme

-Ya levántate James

***

Bajamos hacia el comedor donde ya casi están todos, solo faltan Joseph y Jasón supongo que llegaron tarde ya que ellos se quedaron aun en el bar, después de la noche desagradable que yo pase. A los 10 minutos ya con todos en la mesa, Matilde y otro joven empiezan a servir el desayuno, empezamos a comer hasta que habla la señora Helena.

-¿Cómo les fue anoche?- pregunta mirándonos

-Muy bien abuela, fantástico- Jasón responde y voltea a verme, continua-Aunque Bella y James no pueden decir lo mismo ya que se regresaron muy temprano y no dijeron la razón- es un maldito él sabe perfectamente la razón y todavía tiene el descaro de sonreírme, la señora Helena nos voltea a ver.

-¿Cuál ha sido la razón?- estoy a punto de responder pero James se adelanta

-Isabella se sintió mal y por eso nos regresamos para que descansara

-¿Ya te sientes mejor querida? Puedo hablarle al doctor para que venga a checarte- me dice amablemente

-No, gracias señora Helena, ya me siento mejor, solo necesitaba dormir ya que no he dormido bien- miento ya que esa no fue la razón, a lo cual ella solo asiente

-Quería recordarles que el abogado vendrá a la 1:00 de la tarde, así que los quiero aquí a todos a esa hora puntuales por favor

-Claro mamá aquí estaremos-contesta el padre de James

Son las 12:00 del mediodía muy temprano para mi, así que salgo al jardín asegurándome que Tyson no esté cerca no quiero llevarme un susto de nuevo, traigo conmigo mi libro Hush Hush que estoy leyendo para continuar la lectura me siento en un sillón y comienzo a leer. Estoy tan concentrada que ni cuenta me doy en qué momento Joseph se sentó a mi lado, volteo a verlo.

-Hola- me dice

-Hola Joseph

-Quería hablar contigo

-Sí, dime

-¿Qué paso anoche porque saliste así del bar?- me temía esa pregunta pero sé que puedo confiar en Joseph- Y no me digas que te sentías mal porque no te creo- lo miro y me armo de valor para decirle, desvió mi mirada

-Se que se oira infantil pero no sé como explicártelo, Jasón me estaba molestando- le digo es algo estúpido

-¿Como que molestándote? - me mira confundido

-M-me estaba... tocando por debajo de la mesa- digo aunque me cuesta decirlo lo ultimo lo digo rápido

-¿Qué?- me mira asombrado

-Sí, me estaba tocando mis piernas, me agobie tanto por no saber qué hacer así que lo único que se me ocurrió fue golpearlo para poder librarme.

-Y ¿Por qué no dijiste nada? Pudimos a ver aclarado las cosas ahí mismo, a verlo puesto en su lugar.

-Primero no quería armar escándalo en el lugar, segundo me amenazó que sería mi palabra contra la suya, puede que ustedes no me crean, pues para ustedes soy la esposa de James pero desconocen muchas cosas de mí, en cambio Jasón es su primo lo conocen de toda la vida.

-Por eso mismo porque lo conocemos sabemos de lo que puede ser capaz, Isabella no estás sola, sé que mi hermano no es el mejor esposo y menos en las circunstancias que se casaron pero es su deber protegerte y sobre todo me tienes a mi- me dice, se que está molesto pero agradezco mucho el hecho que me crea.

-Gracias Joseph

-No debes callarte este tipo de cosas, ahorita es esto al rato quien sabe Bella, prométeme que me dirás, cuando pase una situación como estas no debes quedarte callada- las palabras de Joseph me hacen pensar mucho es cierto no sabemos hasta qué grado pueda llegar Jasón.- Promételo Bella- me repite ya que me quedo callada

-Lo prometo, gracias Joseph- me termino limpiando unas lagrimas que se resbalan por mis mejillas y no me había dado cuenta

-Joseph- dice James detrás de mi- Ya llego el abogado hay que entrar

-Si ya voy

-Vamos Isabella tu también vienes - me dice James, y porque tendría que entrar yo a la leída de testamento no soy de la familia bueno "si", pero no es como si me haya dejado algo a mí, no lo conocí.

-¿Porque yo?- pregunto

-Tienes que estar presente, así lo determino mi abuelo según el abogado

-Bueno entremos- Joseph

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Joseph en multimedia

Gracias por leer

N*