Capítulo #8 (Los terribles siete años de Julia)

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Esta bella niña era mi Julia la cual crecía muy rápido, pues la vida la había hecho fuerte para crecer y madurar más rápido de lo pensado, probablemente por haber pasado por lo que pasó conmigo siete años atrás

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Esta bella niña era mi Julia la cual crecía muy rápido, pues la vida la había hecho fuerte para crecer y madurar más rápido de lo pensado, probablemente por haber pasado por lo que pasó conmigo siete años atrás.

La sonrisa de Julia era reducida, pues sólo una vez perdida se reía al su madre NO permitirle reír, ya que Michelle odiaba que al reírse mi dulce bebé se pareciera tantísimo a mi, su verdadera madre la cual estaba "muerta y sepultada".

La enfermedad de la loca de Michelle era muy seria, pues se trataba de "Borderline", una enfermedad mental capaz de hacer que una persona caiga en sus propia mente caracterizándose por la inestabilidad de emociones diariamente aumentando con el estrés el cual vivía casi la mayoría de su tiempo.

Pero el corazón de Julia era más poderoso al vivir la vida como un regalo sonriendo a escondidas sin que su mamá se diera cuenta pues al ser pequeña no entendía nada, pero aún así ella amaba a su madre tal cual era.

Sin embargo, al cumplir los SIETE AÑOS de edad su enfermedad genética reapareció desatando el caos de las personas que si la querían como sus vecinos, los cuales la ayudaron toda su vida mientras crecía en un hospital desde ese terrible séptimo cumpleaños.

Lo que Julia tenía era "hemofilia", una enfermedad auto destructiva del cuerpo la cual se caracterizaba por el exceso de sangre si se llegaba a caer o a lastimar, la cual podía surgir la posibilidad de que muriera en cualquier momento, y todo volvió a aparecer en ese cumpleaños.

Julia jugaba como cualquier niña celebrando su cumpleaños apoyado por sus vecinos quienes deseaban que mi hija tuviera una fiesta inolvidable mientras su madre Michelle se la pasaba borracha dentro de su casa aprovechando la soledad que la acompañaba.

Mientras July jugaba felizmente en los columpios se cayó del más grande de los toboganes raspándose las rodillas y la carita sangrando como cualquier niña quejándose de dolor pero las cosas se pusieron graves cuando notaron que NO sanaba sus heridas a pesar de las muchas medidas de salud que le dieron y su sangre no paraba de salir poniéndose pálida sangrando mucho más que cualquier otro niño ordinario.

Mientras July jugaba felizmente en los columpios se cayó del más grande de los toboganes raspándose las rodillas y la carita sangrando como cualquier niña quejándose de dolor pero las cosas se pusieron graves cuando notaron que NO sanaba sus herid...

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Muy asustados todos corrieron por su ayuda llamando de emergencia a una ambulancia cercana la cual se pudiera llevar a la niña aunque no tuviera seguro médico por culpa de la negligencia de su madre la cual aún no sabía nada sobre su condición pero si lo hubiera sabido años atrás cuando se la llevó mi niña estaría en verdad muerta al verla como "un estorbo" y defectuosa.

La condición de mi Julia era grave pues la hemofilia que padecía la llevó al hospital desde entonces teniendo que cuidarse diario BAJO LOS CUIDADOS DE UNA VECINA DE NOMBRE "BIILLY" ya que el gobierno le había quitado a mi hija a la loca de Michelle por su inestabilidad e incapacidad para ser madre, al menos hasta los quince años de Julia cuando ambas volvieron a estar juntas desgraciadamente.

 --¿Doctor cómo está July? --preguntó la mujer de nombre Billy en verdad preocupada por mi hija.

--¿Ella es su hija? --preguntó el doctor con cara de asombro. --Es que la niña ha sido maltratada macabramente, mire sus moretones. --aseguró el mismo apuntando mientras la mujer hablaba.

--Ahhh, ¡Por fin dejará de sufrir tanto!, y no, no soy su mamá, somos vecinas pero yo la quiero como si lo fuera, de verdad, no tengo hijos, por eso la veo como a una. --aseguró la mujer respirando profundo bastante feliz.

--¿Y su madre biológica dónde está? --volvió a preguntar el doctor muy intrigado.

--Probablemente borracha por ahí en algún rincón pidiendo dinero para sus vicios. --recalcó la mujer muy decepcionada.

--Ya veo.... Mire, al ser usted la más cercana a ella le diré sobre su condición pues es MUY GRAVE, la niña padece HEMOFILIA desde que nació pero veo que su madre es muy negligente con ella, por lo que me encargaré que por unos años sea usted quien tenga su custodia, ¿Está de acuerdo? --preguntó el doctor seriamente acariciándome el cabello mientras dormía.

--¿Hemofilia dice?, ¡Ohhhhh!, de acuerdo, yo la cuidaré con mi vida entera, ella será muy feliz, acepto ser su tutora desde ahora. --afirmó la mujer de nombre Billy bastante segura de lo que hacía.

Evidentemente cuando Michelle se enteró de todo explotó de rabia y miedo pues muy dentro de ella sabía que la niña NO era su hija en verdad temiendo que se supiera la verdad estando lejos de ella, por lo que tomó la iniciativa de "cambiar" y dejar sus vicios con tal de tener a mi pobre Julia como suya para siempre obsesionándose con ella evitando a toda costa que la separan de ella aunque AMBAS estuvieran muy enfermas de verdad.

Evidentemente cuando Michelle se enteró de todo explotó de rabia y miedo pues muy dentro de ella sabía que la niña NO era su hija en verdad temiendo que se supiera la verdad estando lejos de ella, por lo que tomó la iniciativa de "cambiar" y dejar...

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Estrellas Fugaces©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora