VIVIR LA VIDA

Capítulo 17: "Venciendo la enfermedad"

(Últimos capítulos)

Ya habían pasado 2 meses desde que Gokú fue llevado al hospital y empezó a recibir el tratamiento, en ese tiempo habían sucedido muchas cosas, pero lo más importante era la notoria evolución del joven de cabello alborotado que ya podía hablar y había recuperado el movimiento de la parte superior de su cuerpo. Pero todo no era alegría para él hace algunos día Vegueta viéndolo más recuperado le había comentado algo que lo llenaba de tristeza y rabia. Su amada Milk había desaparecido el mismo día que él fue trasladado al hospital y a Vegueta ya no le permitían la entrada a la casa de sus padrinos pues estos ya conocían la relación de Milk con Gokú y suponían que él los había ayudado para que ellos dos prosigan con ese romance, el joven cabello de flama tuvo que volver a su departamento, donde sus padrinos le hicieron llegar sus pertenecías.

Para Milk esos primeros meses lejos de su amado fue un infierno lo único que la mantenía con vida era el pequeño fruto de su amor que llevaba dentro de su diminuta barriga que ya empezaba a notarse. La jovencita todos los días buscaba la oportunidad de escaparse de aquel horrible cuarto, pero todos sus intentos fracasaban, haciendo que ella vaya perdiendo las esperanzas de algún día volver a estar junto a su amado.

Hospital:

Un joven de cabello alborotado se encontraba en una cama de hospital con la mirada perdida cuando vio la puerta de su habitación abrirse.

¿Qué novedades?, decía Gokú esperanzado al ver entrar al joven cabello de flama a su habitación.

Ninguna Kakaroto, lo único que sé es que en la casa no está, ¿no comprendo dónde la tendrán escondida?, decía con molestia Vegueta.

¿Y de lo otro?, dijo Gokú manteniendo la calma.

De eso si tengo buenas noticias, ya que ya eres mayor de edad tu padre ya no puede seguir manejando lo tuyo, más tarde vendrá un abogado para que te lo explique mejor y ahora nadie malgaste tu dinero, dijo Vegueta.

¡Gracias Vegueta¡ pero ¡por favor continua buscando a Milk¡ decía Gokú en tono de súplica.

Lo estamos haciendo, no solo yo sino todos los que la apreciamos dijo Vegueta.

Bar:

Come, ya no te hagas la exquisita, por el chiquillo ese tienes que alimentarte bien, decía una mujer dejando una pequeña fuente sobre una mesa.

Señora ¡por favor¡ ayúdeme a escapar de aquí, decía una ojerosa pelinegra tomando la mano de la mujer entre las suyas.

No puedo niña, ya sabes cómo es la patrona, dijo la mujer saliendo rápidamente de la habitación y cerrándola con llave.

Que haremos mi amor, yo no quiero que te alejen de mi lado, yo no quiero eso, decía la pelinegra sollozando mientras colocaba sus manos en su vientre.

Semanas después:

Es increíble tu evolución, decía un médico viendo como Gokú se ponía de pie con ayuda de unas muletas.

Si ha vencido la enfermedad, dijo otro médico sonriendo.

Si sigues así creo que en un mes más estarás completamente sano, dijo otro médico.

Casa de Gokú:

¿Qué significa eso?, decía furioso Bardock.

Qué usted debe regresarle lo más pronto posible todo su dinero y propiedades a mi defendido ya que al ser mayor de edad él ahora puede hacer uso de ello sin necesidad de que usted lo haga por él, dijo el abogado.