Juntos hasta el fin (Kendall Schmidt, Logan Henderson & tú)

Cap.10

-¿Le dijiste a Samantha que no se acercara a mí?-Preguntó Kendall casi encima mío.

-No te conviene.-Le avisé.

-Oh, claro, Logan, ahora tú me vas a decir quién me conviene y quién no.

-Oye, te estoy salvando de una... esa chica se puso a pelearse con (Tn)______ e incluso conmigo.

-No.-Afirmó de la nada.

-¿No qué?-Pregunté confundido.

-No me iré de su lado cuando lo está pasando mal por culpa de tú y tus malditas "Discusiones".-Un "pero..." salió se mi boca, pero al parecer, Kendall tenía más ganas de hablar que yo.- No Logan, no hay peros... siempre es lo mismo... y si no te agrada Samantha, te apartas de ella... ¡Y ya! Los tres felices. Por qué no sales de mi vida...-Dijo ya iéndose por los pasillos del instituto. Tenía que entrar a la clase.

-Porque... Porque eres mi amigo... Y por más que te enfades conmigo... No podré evitar preocuparme por ti, igual que tú te preocupas... O te preocupabas... por mí.-Se paró en seco. Esas palabras habían salido de lo más profundo de mi corazón, y si no las aceptaba... me rendiría.

-L-Logan... -Se dio media vuelta.

-Y sí, es cierto, -Mis ojos se cristalizaron- Es cierto que me cuesta acostubrarme a los estudios, que me cuesta acostumbrarme a la perfección... pero simplemente no llego. No llego tan arriba.-Sorbé la nariz- Y nadie... nadie puede llegar ahí... excepto tú. Q-Quieres que yo saque las mejores notas, quieres... quieres que yo te alcanze... Pero no puedo. No puedo, Kendall.

-No... No quiero que llegues a sacar las mejores notas... no. Quiero que te esfuerces, quiero que te acostumbres... -Se acercó- Pero no quiero que me saques de clases para decirme tonterías.-Se puso serio.

-No te saco de clases para decirte tonterías.-Le afirmé.

-Oye...-Suspiró- No lleguemos a pelear... no lleguemos a pelear por una tontería... no lleguemos a pelear por los estudios... -Negó la cabeza- Al fin y al cabo... tú tienes razón, tu puedes hacer lo que te dé la gana con tu vida... y yo no puedo impedírtelo.

-No lo haces. No me lo impides. Y... podría esforzarme... podría esfor...

-No lo digas.-Me dio un golpe con la palma de la mano al hombro- No hace falta.

-Gracias tío.-Me dispuse a decir para luego abalanzarme sobre él con un enorma abrazo, un enorma abrazo que olvidara todo lo sucedido entre nosotros. Todo estaba solucionado.

 Narra (Tn):

Viernes, ¡Por fin! Esta semana había sido la peor de mi vida. Al menos sabía que apenas quedaban tres meses para ir a la universidad... y cambiar de aires. 

Todos estaban quietos, todos. El profesor escribía en el gran pizarrón, y todos los alumnos intentaban copiar rápidamente lo escrito. Dos golpes en la puerta, hicieron voltear a mirar a toda la clase.

-Otra vez más tarde, Henderson.-Le dijo al chico moreno.

-Yo... ¿Puedo pasar?-El profesor asintió molesto y dejó pasar a Logan.

-Ah... con que ahora también sigue su juego, señor Schmidt.- El rubio asomó la cabeza por la puerta.-Pasen, pasen, pero no quiero volver a verles tarde por mi clase.-Los dos asintieron vergonzosos y se sentaron en sus respectivos puestos. El profesor tenía mucha paciencia, había que reconocerlo.- Bien, pues para el mes que viene, quiero que me traigan todos un trabajo de qué hacer con el reciclaje.-Nos hablaba en tercera persona. Se pudo oír un "No..." de fondo que todos emitían- Y quien no lo entregue, tendrá suspendida la asignatura.-Ahora si que estaba asustada- Serán grupos de tres, yo mismo los haré.-Lo que faltaba.

El profesor sacó una lista de estudiantes y empezó a decir nombres. Hasta que llegó al mío.

-Señorita Kennedy... usted irá con Henderson y con Parker.-Afirmó.

-Parker está enferma, tiene fiebre. -Afirmó Kendall y parecía ser verdad, no estaba en clase.

-Bueno... pues no me queda más remedio que ponerle a usted con ellos, Schmidt.-Bufó el profesor y siguió anotando al pizarrón.

...

-¿Cuándo quedamos?-Se respaldó Logan en la taquilla de mi lado.

-Cuando los cerdos vuelen, Henderson.-Le afirmé.

-Tenemos que hacer un trabajo. ¿Por qué eres tan borde?-Ni yo lo sabía.

-Kendall también participa.-Quería no estar sola... a saber lo que haría ese rebelde motero.

-Lo sé, pero te lo pregunté a ti, no a él. -Se pasó la mano por su cabello- Tú me dices y yo le cuento.-Quedé callada- Bien, pues entonces quedamos el sábado, o sea, mañana.-Me explicó.

-Tengo que cuidar de mi hermana.-Me inventé una excusa. 

-No pasa nada, tráela. Kendall también tiene una hermana, seguro que se llevan bien.-Mierda.

-¿Iremos a casa de Kendall?-Cerré mi taquilla.

-Sí. -Me miró a los ojos. Dios... q-que mirada tan profunda- Si quieres paso por ti y...

-No.-Le interrumpí.-Dime la dirección, sé ir solita.

-Está bien.-Me dio un papel con una dirección.-Te esperamos a las seis.-Fue caminando.- ¡Y no te olvides de traer a tu hermana!-Me exclamó desde la otra punta del pasillo.