Esta historia trata sobre un chico llamado Wilmer, que amaba ver a la gente y lo que hacían en su día a día.
Cada vez que se acercaba a alguien está persona salía corriendo de él sin explicación aparente.
Le extrañaba ya que olía su ropa, se bañaba todos los dias sin dejar ninguno a sueldo.
Miraba su cara en el espejo practicando caras a ver cuál resultaría mas amigable.
Seguía sin entender el por qué de esas reacciones.
–Sabes... Eres raro. No eres... Común.
–Soy Wilmer.
La chica le miró curiosa, sin saber el porqué le extrañaba tanto aquel chico.
–Yo Anne.
Le tendió la mano.
Sus manos no llegaron a tocarse.
Ya que la mano del chico paso la suya.
El la miro triste, sabiendo que haría. Lo asumió, asumió desde hace tiempo que era un ente.
Tan solo logró percibir entusiasmo por parte de la chica que se encontraba pasando la mano por la del chico soltando pequeños gritos de felicidad.
–¡¡Seamos amigos!!
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Mis Delirios Nocturnos
Short Story« La mente de una escritora es curiosa de por si. Pero más curiosa es cuando además de gustarle escribir historias, ama inventar muchas diferentes tanto de drama como de amor, de desamor o simples cuentos sin moraleja. » Historia con todos los der...