-Creo que estoy enamorada de ti Lauren- la escuche decir antes de dormirme.
Cuando desperté la mañana siguiente Camila no se encontraba a mi lado, estaba por entrar en pánico nuevamente pero vi que había dejado una nota sobre su almohada
Amor, te veías tan hermosa durmiendo que no te quise despertar, tuve una urgencia con la empresa pero en cuanto la solucione volveré. Ya te estoy extrañando..
Camila
Dios! estoy tan jodida, creo que yo también me enamore de ella pero esto esta tan mal, anoche no pensé en las consecuencias que podrían venir después de lo que sucedió, solamente me deje llevar, ahora no se que hacer!
Con las pocas fuerzas que me dejo Camila ayer a la noche me fui a dar un baño, no me di cuenta cuan fuerte fue una vez que me mire al espejo y vi todas las marcas que había dejado en mi. La voy a matar!
Después de lo que parecieron 3 horas dentro de la bañera decidí salir y pedir el desayuno al cuarto, no podía dejar que nadie viera el estado en el cual me había dejado nada mas ni nada menos que la esposa de mi jefe, demonios en que problema me eh metido!
Decidí tomar el desayuno en bata ya que con cada movimiento que hacia me dolía alguna parte de mi cuerpo, maldita Cabello.
Cuando llego el chico con el desayuno no sabia si mirar mis piernas o las marcas de mi cuello, yo solo le sonreí amablemente y le di las gracias.
Estaba realmente hambrienta, pero al querer dar el primer bocado escucho como alguien entra a la suite y se dirige rápidamente a la habitación.
-¿Le abriste la puerta a ese niño vestida de esa forma?- Me dijo Camila mientras entraba rápidamente con una cara de pocos amigos, sentí los celos a km de distancia así que decidí jugar un rato.
-Así es, es un muy lindo muchacho y muy educado- le respondí mientras me levantaba y me dirigía a ella. -Creo que le di mi numero- le susurre al oído y sentí como su cuerpo lentamente respondía a mi.
-Con que le diste tu numero?, Lauren... No sabes a que estas jugando- me hablo mientras se ponía a mis espaldas y corría a un lado mis cabellos mojados.
-Por las dudas noto tus marcas en el cuello?- susurro mientras desnudaba lentamente parte de mi hombro, dejándolo al descubierto y totalmente a su alcance.
Por un momento creí que la tenia pero ella mueve todo en mi.
-Las noto, por eso huyo de la persona que las pudo haber causado..- le conteste con lo poco de razonamiento que me quedaba, esta mujer me volvía loca.
-Me parece muy inteligente de su parte..- me dijo mientras besaba toda la extensión de mi hombro y cuello y dirigía su mano dentro de mi bata, cuando toco y sintió cuan humedad estaba, se alejo dejándome frustrada como es usual en ella.
Noto como la mire y me sonrío seductora..
-Vamos a dejar esto para mas tarde, ya que se que te duele todo el cuerpo tanto como a mi- respondió con una sonrisa hermosa y no pude evitar sonreír con su respuesta, aun sin intentarlo era la persona mas encantadora y dulce que jamas conocí.
-Esta bien, acepto esa respuesta porque realmente no puedo ni caminar!- Le respondí y escuche su hermosa risa en respuesta. Nada podía estar mal, esto no podría estar mal.
-Vamos a tener que solucionar eso porque hoy vamos a salir a pasear, tus padres ya me comentaron que conoces todo el mundo pero que nunca viajaste acompañada, así que hoy vas a conocer la ciudad del amor con quien te dice puede ser tu futuro amor..- la mire y no pude derretirme mas con lo que me dijo, pero había algo que estaba molestándome y ello lo noto, antes de que pueda formular la pregunta..
-¿Que pasa con tu matrimonio Camila? Yo no puedo dejar de lado eso por mas que esto sea hermoso y que sienta todo esto por ti, no puedo dejar de pensar que del otro lado de este mundo nuestro esta otro en el cual estas casada con el mejor amigo de mi padre.- Camila espero a que terminara de hablar y me tomo de la mano acercándome a la cama para tomar asiento.
-Bebe, te lo voy a contar todo, pero no es el momento y menos si estas vestida así cuando lo único que quiero es arrancarte esa ropa y hacerte mía las veces que pueda. Hoy a la noche, vamos a cenar y te prometo que sabrás todo de mi, sin mentiras ni engaños, te quiero Lauren y quiero estar contigo, solo quiero que confíes y esperes hasta hoy a la noche, puede ser?- Me miro con esos ojos y me derretí, no había forma de negarle nada a esta mujer, menos cuando me dijo que me quería y que quería estar conmigo. note como estaba poniéndose pálida al ver que tardaba en responder así que tranquilamente la tome de la mano y le dije
-Tu puedes contarme cuando estés lista de poder hacerlo, yo no te voy a obligar camz y también creo que te quiero..-
Su sonrisa encantadora apareció de repente - Como que crees? eso no es justo Jauregui..- ahí estaba, nuevamente el uso de mi apellido de la forma mas sexy del mundo.
-No creo que sea bueno que me llames así cuando estoy tan expuesta, creo que podría saltarte encima ahora mismo, pero necesito cambiarme.. Me esperas?- le respondí mientras a duras penas me alejaba de ella en busca de mi ropa en el placard, cuando estaba por entrar al baño siento como me toma de la mano y me pega contra su cuerpo haciendo que la distancia no exista entre las dos. -Puedes cambiarte aquí, prometo no espiar- lo dice con los dedos cruzados y una sonrisa que podría alegrarme la vida mientras se aleja y vuelve a su lugar. -Creí que no ibas a poder controlarte al verme desnuda frente a ti, pero si insistes..- dije mientras lentamente desataba la bata y me la quitaba tan lento que parecía ser una tortura cuando vi los ojos de Camila y como sus nudillos estaban blancos de tanto presionar las sabanas de nuestra cama.. Me coloqué una ropa interior muy provocadora, unos jeans negros rasgados, una remera que dejaba a la vista mi abdomen, unas zapatillas y mis inseparables chaqueta bomber de color negra.
Al terminar levanto la vista y Camila estaba con una sonrisa orgullosa.
-Había olvidado que bien te ves con ropa también, aunque me gustas desnuda, es increíble lo bien que te queda eso que llevas.
No pude evitar sonrojarme con su cumplido, siempre me toma de sorpresa y me encanta.
-Tu también estas hermosa, es increíble que cada vestido que lleves me inciten a cometer crímenes, aunque esos jeans, dios que hermoso trasero..- le conteste mientras me acercaba y le estampaba un beso mientras tomaba de su trasero y lo apretaba. Me aleje un poco para verla a los ojos y me perdí, estoy muy enamorada.
-Aunque me podría pasar la vida viendo tus ojos hermosos, tenemos lugares que visitar.- me dice alejándose un poco de mi para tomar su bolso y las llaves de la suite. Es increíble la forma en la que me pierdo en cada movimiento que hace.
Caigo en la realidad cuando la veo parada en la puerta tendiéndome la mano, invitándome a que me pierda con ella.
Y sin dudas que lo voy a hacer..