Y aquí estábamos otra vez peleando sólo porque si, ni siquiera recuerdo como comenzó pero ya era la quinta vez en tres días.
-Sabes que... Hasta aquí termina lo nuestro.
-¡Bien! Me alegra ya no tener que soportarte- le grité aún más enojada.
Las cosas a nuestro alrededor comenzaron a flotar y temblar. Mi mutación era que podía mover las cosas con la mente, pero aún no lo puedo controlar bien y ahora se salió un poco de control.
-Pues yo nunca te amé, sólo estuve contigo por lástima- estábamos ambos rojos de la furia.
Esas palabras me dolieron hasta el alma, todo lo que estaba flotando regresó al suelo de golpe.
Y yo caí de rodillas, comencé a llorar y no me importó nada más.
-Largo todos de aquí- una voz prominente sonó en toda la habitación.
Se escucharon pasos alejarse de la sala, supongo que había hecho un alboroto y no me di cuenta que habían bastantes personas.
Mi mirada estaba clavada en el suelo, no podía siquiera pensar en algo, todo dentro de mi se hizo trizas.
El silencio se hizo presente, y enseguida unos brazos me rodearon, era cálido y reconfortante.
-No te merece ese idiota- me dijo al oído-Si yo estuviera en su lugar, jamás te dejaría derramar una sola lágrima de tristeza- me apego aún más a su pecho.
No tenía palabras, eso me tomó completamente por sorpresa.
-Gracias Erik- me separé un poco de él para mirarlo a los ojos.
Puso sus manos en mis mejillas y me sonrió, con sus pulgares limpió mis lágrimas y me dio un beso en la frente.
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-Me gustas (T/N), desde que nos conocimos por primera vez y cuando me enteré que eras novia de ese tipo... algo dentro de mi se rompió.
- Erik... yo... no se qué decir, estoy un poco confundida y... ¿podrías darme un poco de tiempo?
-Todo el que necesites... estaré esperando por ti- volvió a depositar un beso en mi frente.
Él se puso de pie y me tendió la mano para ayudarme. Erik estaba por marcharse pero lo tomé de la mano y volteó enseguida y antes de que dijese algo me abalnce a él dándole un fuerte abrazo de oso.
-Muchas gracias Erik... por todo...
Acarició mi mejilla con delicadeza.
-Lo hago por que de verdad me gustas y siento algo por ti.
-Adiós.
-Nos vemos pronto.
Él se fue de la habitación y yo me quedé con una pequeña sonrisa.
