One Shots ⇝ Marvel ✔

Pietro Maximoff

Era una tarde realmente aburrida y no había nada interesante qué hacer.

Andrea estaba en el sillón mirando una película de terror. Abrazaba con fuerza el cojín pues moría de miedo.

Soltó un terrible grito cuando alguien la tomó de los hombros. Cerró los ojos con fuerza y comenzó a golpear a dicha persona con el cojín.

Cuando se esfumó un poco el miedo abrió los ojos y de encontró con un Pietro riendo a carcajadas.

—Eres un imbécil, casi me matas del susto.

—Debiste haber visto tu cara— dijo el rubio sin dejar de reír.

Andrea lo miró mal, le arrojó el cojín a la cara y regresó al sillón para terminar de ver su película. Pietro también tomó asiento en el sillón y miró el resto de la película con la chica.

Al siguiente día Andre estaba en el comedor tomando su desayuno cuando Bucky apareció más que molesto.

—El idiota de tu novio no deja de molestarme— le dijo a la chica.

—Pietro no es mi novio, iughh.

—Nunca mencioné su nombre.

Andrea se sonrojo.

—Bueno, no es como que alguien más se la pase molestando a los demás.

—Es verdad— el moreno tomó asiento y miro fijamente la mesa— tengo una idea para hacerlo enfadar, pero necesito de tu ayuda.

—Claro, si con eso le damos una buena lección haré lo que sea.

Los dos chicos se sonrieron. A Andrea le gustaba mucho Pietro y siempre se la pasaban haciéndose bromas. No perdería ninguna oportunidad para hacerlo enfadar.

—Salgamos a cenar esta noche, usa un lindo vestido.

—Seguro.

—A las ocho.

El soldado se puso de pie y se fue en busca de Tony para que le consiguiera una reservación en un buen restaurante.

A las 7:30, Andrea ya estaba lista. Usaba un lindo vestido rojo que se acomodaba a su silueta.

Salió de su habitación y se dirigió a la sala principal, donde la mayoría de los vengadores estaban reunidos mirando la televisión.

Todos la elogiaron cuando la vieron.

—¿A dónde crees que vas vestida así?— preguntó Pietro con notable molestia.

—Iré a cenar— dijo como si nada.

—Conmigo— esta vez habló Bucky.

Usaba un lindo traje, se miraba bastante bien. 

El moreno tomó a su pareja de los hombros y la guió al ascensor.

—Nos vemos más tarde, chicos— se despidió Andrea.

Pietro los miró con el seño fruncido y antes de que las puertas del elevador cerraran, vio como Bucky ponía su mano en la mejilla de la chica.

A él le gustaba Andrea, no sabía cómo decirle y por eso siempre la molestaba. Intentaba llamar su atención de todas las formas posibles.

El rubio se puso de pie, sin decir nada se dirigió al ascensor. No iba a permitir de ninguna manera que Bucky besara a Andrea.

Aunque, no tenía ni idea de a dónde pudieron haber ido. Su celular timbro, lo miró por un momento. Era un mensaje de Tony que decía una dirección.

Rápidamente se dirigió allá. No le fue complicado entrar y vigilar a sus amigos, ambos se divertían mucho y ella no dejaba de reír ante los comentarios que hacía el azabache.

Se resignó, ella era feliz con Bucky y jamás haría algo para lastimarla. Aún podía jugarle algunas bromas y tratarla como a una buena amiga.

Regresó a la torre y se encerró en su habitación. Estaba triste, realmente lo estaba, había perdido su oportunidad con la chica que tanto le gustaba.

A las 10 de la noche escuchó las risas de la nueva pareja. Ambos caminaban por el pasillo.

Rápidamente se puso de pie y se asomó, se recargo en el marco de la puerta y se cruzó de brazos.

—¿Tan temprano?, creí que pasarían al hotel.

—No es necesario, mi habitación es más cómoda— dijo el moreno.

Pietro evitaba enfadarse, después de todo él comenzó.

—Bien, pasen una grata noche— entró a su habitación y cerró la puerta con fuerza. Seguramente todos lo escucharon.

Se quitó la playera y la arrojó lejos. Se tomó la cabeza con ambas manos y caminó por la pequeña habitación.

Llamaron a la puerta, no quería ver a nadie.

—Pietro, soy Andrea... abre por favor.

Miró fijamente la puerta y la abrió.

—Creí que estarías con tu amigo el robot.

Andrea sonrió de lado.

—¿A caso estás celoso?

—Por supuesto que no.

—¿Me dejas pasar?

Pietro se hizo a un lado y la dejó entrar. Andrea se sorprendió por el gran orden que tenía el chico, todo estaba en su lugar.

—¿Y bien?

—¿Estas molesto porque salí con Bucky?

Pietro miró fijamente a su contraria.

—Sí y mucho.

Andrea no comprendía la razón de su molestia. Estaba un poco feliz de aquello, pero no quería ilusionarse.

—No deberías.

Pietro se puso de pie y se acercó hasta quedar frente a ella.

—Es que no lo entiendes— dijo en un murmullo— Me gustas, Andrea y mucho.

Ella no tenía ni idea de qué decir.

Tomó la iniciativa y lo besó. El rubio pasó sus manos por la cintura de la chica y la apegó más a su desnudo torso.

Se separaron.    

—También me gustas, Pietro.

Se sonrieron antes de volverse a besar.

—Te dije que funcionaría— gritaron desde afuera— No olviden usar protección, no quiero ser tío aún.

La pareja rió.

Pasaron una buena noche, los dos se querían y para ellos eso era lo único que importaba.

He vuelto... disfruten. Les recomiendo pasarse por InfernoEditorial
100% confiables y con trabajos de calidad