Dear, Angel [BORRADOR]

Capítulo Cuatro

Una semana, había pasado una semana desde que Patch y yo hablamos, una semana desde el incidente en el bar. Cada noche reviso mi teléfono, con la esperanza de recibir un mensaje de él, pero nada, ni un estúpido mensaje, y ya me estaba estresando, estaba enojada y harta, no iba a esperar más.

Pero aquí estaba, en la cafetería esperando a que digan al nuevo jefe, y a escondidas revisando mi teléfono.

—Primero que todo, quiero decirles que si me dieron el trabajo—todos lo aplaudimos y le felicitamos—Gracias, segundo. Ya tengo a la persona que será su nuevo/a jefe/a, quiero decir que fue una decisión muy dura y que estuve pensando mucho y ya llegue a la conclusión. Quiero que pase adelante Vee Sky—todos aplaudimos y yo sonriéndole le digo que vaya. Vee aun sorprendida llega donde Hank y lo abraza. Le dice un par de cosas y en minutos la nombra como jefa de la cafetería.

En ese momento, Vee indica que abran la cafetería, haríamos la fiesta de despedida para Hank el viernes.

Preparo un café para el cliente. Vee se acerca a mí y me abraza.

— ¡Siempre quise ser dueña de este lugar!

—Estoy muy orgullosa de ti, Vee—y lo estaba, ella había trabajado duro, para conseguir este puesto.

Cuando el café está listo, salgo de la barra y me dirijo donde la señora que lo pidió, me da un pequeño "gracias" y lo toma. Camino de nuevo a mi puesto, pero choco con algo... más bien con alguien, pierdo el equilibrio y espero a que tope el suelo. Dos fuertes manos agarran mis muñecas para prevenir que mi trasero bese el suelo. Miro el rostro y me encuentro suspirando silenciosamente cuando se trata de Patch. Este me da una sonrisa.

Con el orgullo que tengo, me zafo de su agarre y me aclaro la garganta.

—Hola Patch.

Este alza una ceja y me mira de pies a cabeza. ¿Qué tengo?

—Nora...

—¿Vas a querer algo? —sostengo mi libreta contra mi pecho.

—¿Estás bien? —pregunta de repente. Arrugo el entrecejo y asiento.

—¿Por que no lo estaría? —cuestiono confundida.

—Por lo que paso la otra noche, supuse que aún estabas algo sorprendida.

—Estuve sorprendida, de ti. Como golpeabas a Elliot y le decías cosas hirientes. Entonces si, estuve sorprendida —finalizo. Patch asiente mientras pasa una mano por su barbilla.

—¿Quien más sabe sobre la noche anterior?

—Nadie.

Vuelve a asentir y supuse que nuestra conversación se había acabado. Patch se sienta en una de las mesas. Le digo a otra persona que lo atienda.

Mi celular suena y lo saco de mi bolsillo.

Papá

Pongo rechazar y apago de nuevo y lo vuelvo a dejar en el bolsillo. Regreso a ver a Patch y éste me miraba, sintiéndome como si me analizarán, dejo las tazas sucias en el lavabo, sintiéndome intimidada. 

Paso una mano por mi cabello y regreso a ver al frente. Suspire cuando ya no lo vi, había demasiada presión.  Vee se acerca con una sonrisa.

—Todas vamos a traer algo para la fiesta. ¿Podras traernos esos delicioso pastelillos de chocolate que sueles hacer? — dice ella con la mirada suplicante.

—Supongo que puedo hacer una docena ¿Verdad? —Vee asiente. Mientras me abraza, está muy emocionada sobre ser la nueva jefa.

Al final del día. Recibimos nuestro último pago con Hank. Dejo el uniforme colgado y verifico que no haya luces prendidas. Salgo del lugar y al regresar a ver, Patch me agarra del suavemente del brazo. Lo miro entre asustada y confundida. ¿Que ésta haciendo?