Al separar sus labios, se dedicamos una sonrisa, poco después Itachi le tomó la mano derecha y siguieron su camino, entré los árboles y la penumbra, únicamente disfrutando de su compañía mutua y del fresco roce del viento contra sus mejillas.
~:..Esperó que Sasuke no nos siga..--Pensó la Pelirrosa un poco angustiada.
Itachi notó la tensión de Sakura así que la regresó a ver..--Tranquila..--Susurró, a la vez que le rodeaba los hombros con uno de sus brazos, Sakura lo miró a la vez que le dedicaba una pequeña sonrisa, Itachi le devolvió una sonrisa de lado y siguieron avanzando por el bosque. Cerca de media noche llegaron a su escondite, entramos y recorrieron los pasillos. Fueron por algo de comer, y fueron hasta el lugar donde tendrían que separarse para entrar sus respectivas habitaciones. Unieron sus labios en un cálido beso que les robo el aliento en cuestión de minutos, se dedicaron una última sonrisa y cada uno entró a su habitación.
{...}
Sakura se dio una rápida ducha y se cambió su ropa, llena de sangre y tierra. Finalmente se acostó en el suave futon y poco después se quedó dormida, aún con la calidez de Itachi presente en sus recuerdos.
El pelinegro por su lado, se encontraba acostado con su mirada fija en el rocoso techo, sus pensamientos giraban en torno a Sakura y a lo ocurrido hace algunas horas, y así fue hasta que se quedó dormido.
[...]
Varias horas antes..
En Konoha...
---¿¡Cómo puede ser posible que la hayan dejado escapar.!?---Exclamó mientras lanzaba sus puños contra el escritorio de madera, el cual se sacudió y cayeron algunos papeles al piso.
---Haruno ha recibido ayuda...---Explicó uno de los hombres.
---¡Eso es obvio!, ella estaba muy herida y no podía escapar!---Exclamó furioso.---Esto no se quedará así...---Frunció el ceño.---Busquenla y no regresen hasta que la traigan con ustedes..---
---¡Si!---Dijeron el grupo de anbu's que se encontraban ante él, seguido se retiraron.
--Son unos inútiles..---Mascullo mientras llevaba sus manos a sus cienes.~;Han arruinado mi plan...--Pensó con sus ojos cerrados.
[..]En otro lugar, una pelinegra se encontraba sentada en su cama, con una taza de chocolate entré sus manos, mientras miraba por la ventana.
~:No recuerdo lo que sucedió...-Pensó a la vez que su ceño se fruncia, llevó la taza a sus labios y bebió un par de sorbos, la alejó de sus labios al momento que oyó que la puerta principal se abría. Dejó la taza en su mesita de noche y corrió hacía la entrada.
--¡Naruto-Kun!--Exclamó al momento que se lanzaba a sus brazos.
El rubio la recibió entré sus brazos.--Tranquila Hinata-Chan, le harás daño al bebé...--Dijo mientras le acariciaba el cabello.
--Lo siento, e..es sólo que estoy feliz de que hayas regresado...--Murmuró mientras sus mejillas se tornaban rojizas.
Naruto la separó un poco de él y le dio un casto beso en los labios.--Yo también estoy feliz..--Hinata le sonrió, le tomó la mano y caminaron hasta la sala.
--¿Cómo te fue?--Cuestionó luego de sentarse en uno de los sillones.
--Bien, Sai y yo completamos la misión..--Le acarició la mejilla derecha con su mano izquierda.--¿Y tú cómo has estado?--
--Bi..bien..--Respondió un poco apenada por el contacto en su mejilla.
Naruto asintió y se arrimo al espaldar del sillón.--Sabes, hay algo que no te he contado...--
