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CAPÍTULO o1

—Señores pasajeros, bienvenidos a Dallas.

Esa voz de mujer me despertó, ya que yo estaba dormida en mi asiento del avión.

«Bienvenidos a Dallas».

Dallas. No puedo creer que dejé mi antigua vida por venir a vivir a Dallas.

Miré por la ventanilla del avión y vi un gran letrero que decía «AEROPUERTO INTERNACIONAL DE DALLAS - FORT WORTH» .

Bajamos del avión y ya había un joven esperándonos en la sala del aeropuerto, con un letrero que decía «Familia Johnson». Mi madre tocó mi hombro y con su mano señaló hacia el joven.

—Buenos días —dijo mi madre al joven que nos esperaba.

—Buenos días... ¿Señora Johnson? —preguntó el joven no muy seguro.

—Sí, soy la señora Johnson, Claire Johnson y ella es mi hija Jane.

—¡Mucho gusto y bienvenidas a Dallas!

Dallas, Dallas, Dallas, parece que no se saben otra palabra más que Dallas.

Nos dirigimos a un auto que nos espera a fuera, donde ya estaba nuestro equipaje.

En el transcurso hacia nuestra nueva casa, sólo miraba por la ventanilla del auto, todo se miraba hermoso, de hecho todo era hermoso.

El auto se detuvo frente a una enorme casa color blanca, era hermosa, mucho mejor que mi casa anterior.

—Llegamos —dijo el chico.

—¡Aquí viviremos! —dije impresionada y voltee hacia mi madre.

—Si hija, aquí viviremos. ¿Te gusta? —sonrió.

—Es enorme y hermosa.

—Que bueno que te guste hija.

Bajamos del auto y entré corriendo a la casa, era enorme, los muebles eran hermosos, tenia cuatro habitaciones en la planta alta, en la planta baja tenia una enorme puerta de cristal que llevaba a el patio trasero, que era muy lindo.

La habitación que escogí para mí, era color azul cielo y tenia una enorme ventana hacia la calle. Me deje caer en mi cama y ahí me quede dormida.

Al día siguiente me desperté temprano, ya que tenia que presentarme en mi nueva escuela. Entré al baño y tomé una ducha, bajé a desayunar con mi madre y al terminar subimos al auto. Mientras llegábamos a mi nueva preparatoria platicaba con mi madre.

De repente mi madre detuvo el auto frente a un enorme edificio, el cual era mi nueva escuela. Me despedí de mi mamá y bajé del auto. Una señora que al parecer ya me estaba esperando, me saludó.

—Buenos días señorita Johnson —sonrió.

—Buenos días.

—Soy la maestra Jefferson y te guiare hasta la dirección, donde te espera el director.

Entramos al edificio, era hermoso y mucho mejor que mi antigua escuela. La señorita Jefferson me iba indicando cuales eran las aulas, pero la verdad no las grabé en mi memoria. De repente una señora hizo que la maestra se detuviera, al parecer era alguien importante ya que dijo que yo siguiera mi recorrido sola.

—Señorita Johnson, disculpe pero tendrá que seguir sola. Aquí tiene un mapa, siga derecho y llegara a la dirección —sonrió, yo asentí y tomé el mapa.

Me sentía muy rara, no le entendía al mapa y creía que nunca iba a llegar a la dirección. Algo sucedió cuando desvié la mirada al mapa, ya que choqué con alguien, lo cual hizo que todas mis cosas cayeran al suelo.

—Disculpa, no te vi —dijo el chico con el cual choqué. No podía creerlo, tenia unos hermosos ojos, unos hermosos ojos verde marrón.