¿Quién conoce realmente a Draco Malfoy?

cap. 33 El final de la guerra

DRACO P.V.O

Los minutos pasaban arrastrándose como caracoles. Aquella espera nos estaba matando a todos. Neville y su grupo por fín terminaron su macabra labor. Ochenta muertos. Ochenta y uno si contamos al profesor Snape, al que el Señor Tenebroso ha matado en la Casa de los Gritos. Weasley me lo contó hace unos minutos. Si esto acaba bien para nosotros, iremos a recogerlo y tendrá el entierro que se merece.( ¡Quién me iba a decir que una de las personas a las que más he odiado tenía tan buen fondo! Casi toda su vida adulta al servicio del ser que mató a la mujer que amaba y todo para proteger al hijo que ésta tuvo con otro hombre.) Y no sabemos cuántos desaparecidos.

-Odio las mazmorras -Blaise se sentó a mi lado. Tenía varios cortes en la cara. Los otros Slytherin permanecían abajo, vigilando a aquellos que no habían escapado a tiempo del castillo al empezar la hora de tregua. ¿Y quién mejor para custodiar a unos mortífagos que las serpientes? De todo el colegio, somos los únicos que dominamos las dos ramas de la magia: la blanca y la negra.

-Reconocelo, hechas de menos a tus fans -me dió un puñetazo flojo en el hombro.

-Si te soy sincero, sí. Es agradable caerle bien a alguien que no te pueda clavar un puñal por la espalda cuando menos te lo esperas. -Blaise cerró los ojos- ¿Qué crees que va a hacer Potter?

-Es San Potter. Él siempre hace lo correcto.

-Nunca te va a caer bien, ¿verdad?

-Quizá cuando los dos usemos dentadura postiza y audífono..... no. No lo creo. Odiarnos se ha convertido en nuestro pasatiempo preferido.

-A veces sois como un matrimonio -Blaise bostezó y se quedó dormido. Conjuré una almohada y se la coloqué detrás de la cabeza.

-Pobre, está agotado -Padma se sentó a nuestro lado. Me miró unos instantes. Tenía los ojos rojos e hinchados.- Parvati ha desaparecido. Sólo hemos encontrado ésto -me enseñó uno de los pañuelos que las gemelas siempre llevan encima. Estaba destrozado y lleno de sangre.

-Eso no quiere decir que haya muerto. -Se me da fatal consolar a la gente. La falta de costumbre, creo- Hay varias secciones del castillo que han quedado aisladas por los derrumbes. Tu hermana no es la única desaparecida.

-Está muerta, Malfoy -gruesos lagrimones le caían por la cara. ¡Cielos! ¿Y ahora que hago?- Lo noto. Llevo varias horas con un vacío aquí -señaló el pecho, sobre el corazón- que nunca antes había sentido. ¿Sabías que dicen que los gemelos que nacen en el mundo mágico tienen una consexión especial?

-Eso también lo dicen de los gemelos muggles, Padma -espero que no se me ponga mística porque salgo corriendo hacia el Bosque Prohibido a que me mate el Señor Tenebroso.

-Esto es distinto. Desde el momento en que nacemos, sabemos dónde está nuestro gemelo, lo que está haciendo, lo que siente, lo que le pasa.... 

-Menudo rollo. Así no teneis intimidad ni nada -¿Cómo harían para estar a solas con un chico y que la otra no se enterase de... todo?

-Sí. Pero te acostumbras. Pero yo ya no noto nada. Lo último fue miedo, terror, dolor y la nada. -se levantó despacio. Otra que estaba completamente agotada- Voy a ver a Lavender. Se despertó hace poco y no se acuerda de nada.

No contesté. Seguí mi vigilancia. Hermione estaba junto a Ginny, consolandola. Todos los Weasley estaban sentados juntos. En medio de aquel desolado lugar parecían una hoguera. Miré mi reloj. Faltaba menos de diez minutos para que se acabase la tregua. De repente, la voz de nuestro enemigo resonó otra vez en el comedor:

-¡Harry Potter ha muerto!

HERMIONE P.V.O

Nos quedamos todos helados. ¡No puede ser! Harry no puede estar muerto. Draco salió corriendo del Gran Comedor hacia los jardines. Poco a poco todos le siguieron. Nuestras caras sólo reflejaban incredulidad y miedo. Ante el castillo estaban todas las hordas de mortífgos y sus secuaces. En medio de todos ellos, Voldemort, Bellatrix, los padres de Draco y Hagrid. Y entre sus brazos, el cuerpo de Harry. Es verdad. Está muerto. Hagrid lloraba como un niño.