¡Hey, Sehun! [Oh Sehun]

Veinte.

Editado.

Luego de que Baek se fuera, me di cuenta de que solo faltaban dos horas y luego debía ir a ver a Sehun.

La noche había pasado bien, lo único raro fue que tuve que poner seguro a la puerta principal, para que Baekhyun no fuera en busca de JungSeok. No quería que ese pequeño muera.

(...)

Me senté en la banca del parque, mirando fijamente al carrito de helados y esperando a Sehun.

Maldito carrito de helados, es muy tentador.

Al mirar hacia mi derecha, vi a Sehun caminando hacia mí. Me puse de pie para saludarlo.

—Hola, HeeSook. —dijo, y me abrazó, cosa que me pareció extraña.

Él no era de demostrar afecto.

—¿Como estás, Sehun? —correspondí a su abrazo. Nunca había notado lo cálido que mi amigo era.

—Siendo sincero, nervioso. —se separó de mí, jugando con sus manos.

Fruncí el seño, no veía la razón para que él esté nervioso.

—No preguntes —se apresuró a decir —. Te lo explicaré, pero primero vamos al carrito de helados, no creas que no te he visto mirándolo con ganas.

Sonreí instantáneamente. Los nervios de Sehun me importaron menos cuando mencionó al carrito de helados.

—¡Vamos! —exclamé y tomé su brazo para caminar apresuradamente hasta el carrito, casi arrastrándolo.

Una vez que conseguido mi helado, sugerí a Sehun ir a una banca un tanto alejada, para poder hablar en paz. A él le pareció bien.

—¿Y bien? —pregunté —. Escúpelo.

—Está bien —lo noté extraño, comenzó a jugar con sus manos otra vez y a mirar hacia abajo —. HeeSook, ¿tú sabes que fuiste mi primera amiga, verdad? —me miró a los ojos y asentí —. Bueno, es algo que en verdad aprecio, y creo que ya lo he dicho. Fuiste la única que supo entenderme y escucharme, sin contar a Baek y Chanyeol. Creo que no tienes idea de lo mucho que significas para mí y desde el primer momento tuviste esa cosa que siempre me agradó. Creo que tu simpatía, o tal vez tu inocencia, aunque al principio te veías un poco estúpida. En fin, aprendí a tener una amiga y me acostumbré a tenerte a mi lado todos los días. Hasta me ayudaste a hacer más amigos, como ya dije, Baekhyun y Chanyeol. Pero, con el tiempo, me he dado cuenta de que te quiero más de lo que debería. Estoy seguro de que no te imaginas lo mucho que me costó aceptarlo, y lo mucho que me cuesta decírtelo, enserio no quiero arruinar nuestra magnífica amistad. Eres mi mejor amiga, HeeSook, pero me gustas.

Abrí mis ojos más de lo que los había abierto en toda mi vida, mientras mi amigo se cubría la cara y se inclinaba hacia adelante por la vergüenza.

En cuestión de dos segundos, me di cuenta de que sentía lo mismo. Las veces que casi lo beso, mis mejillas sonrojadas por el tacto, su abrazo que tanto me agradó, el beso que me había dado al estar “dormida”... ¡había sido tan estúpida!.

No me había dado cuenta.

Me regañé a mí misma, para luego sonrojarme y mirar a Sehun. Lo único que veía era su espalda, ya que estaba inclinado hacía delante.

Lo abracé, o abracé su espalda.

Mi amigo, si es que así le puedo decir, se levantó rápidamente para mirarme a los ojos. Parecía un niño pequeño, tal y como JungSeok, esperando por una respuesta.

No hice más que enredar mis brazos en su cuello, y caer encima de él, para formar un abrazo.

—Tú también me gustas. —susurré en su oído.

Sentí sus brazos apretar aún más mi cintura, ambos reímos.

(…)

Llegué a casa… definitivamente mi día había sido peculiar. Pero en buen sentido.

No sé como habían quedado las cosas con Sehun, puesto que no hablamos realmente sobre qué éramos. Si amigos, novios, etc. Simplemente me la pasé riendo y él igual, muy agradable a decir verdad.

Ahora que sabía que alguien me gustaba las cosas se sentían diferentes. Tampoco era como si nada fuera a ser igual, pero algo había cambiado. Y más sabiendo que yo le gustaba a Sehun.

Chanyeol y Baekhyun van a saltar de alegría... y mejor ni mencionar a mi padre. También ya podía ver a Baek gritándome un gran: «¡Te lo dije!».

Que mi orgullo descance en paz.

Bueno, no, estoy exagerando.

—Hasta que llegas —dijo mi padre, cuando entré en la sala —. No sé en qué tardaste tanto, ni preguntaré, pero tengo buenas noticias.

—¿Buenas noticias? —pregunté, caminando hacia él —. Dime.

—Tu madre está cansada… ¡así que hoy pediremos pizza! —mi papá hizo un pequeño baile de celebración, mientras cantaba —. No sabes lo mucho que extraño la pizza. Sé que tú madre está a dieta, pero parece que nos quiere poner a dieta a nosotros.

Si había algo que mi papá amara, y me arriesgo a decir que lo amaba más que a su propia vida, era la pizza. Y las camisas a cuadros, pero principalmente la pizza. Así que comer pizza era un gran momento para él. O, como él lo llama, era el «momento de gloria».

Ahora que mamá había decidido comer sano, mi padre tenía sus momentos de gloria una vez cada dos meses.

(…)

Caminé a la escuela. Por suerte era jueves y ya mañana sería el último día de la semana.

—¡Kim Hee Sook, jovencita, ven aquí! —gritó Baek, desesperado, detrás mío.

—Hola, Baekkie —saludé —. ¿Qué ocurre?

—¿Cómo que qué ocurre? —soltó, exagerando — ¿acaso no pensabas decírmelo?

¿¡Se enteró de lo de Sehun!?

Espero que no, estaría frita.

¿Cómo diablos se habría enterado? Tal vez Sehun le había dicho. Oh, Dios, no.

—¿Sabes qué? No hables —aplastó mis labios con su dedo —. Te lo perdonaré ésta vez, pero la próxima vez que haya descuento en el centro comercial y no me avises ni me llames para ir a comprar, olvídate de mi y nuestra amistad. Estás avisada, Sookie.

Suspiré. Falsa alarma.

✏✏✏

JUGOSO Y POMPOZO PA' TODO EL BODY.

Hasta yo fangirlee con este capítulo.

Capítulo dedicado a LucianaGianelaSegovi... que io c que esperabas ezto.

Y bueno, espero que les haya gustado, voten y comenten y blablabla.

Y me despido porque Wattpad anda renegado y gay, y se me traba.

¡Adiós!

-FxckingTae (aka. Lola)