Grace y su vida universitaria

CAPÍTULO 2. SU CALOR

07/09/2016 8:45 p.m.

A la hora de la comida Tammy propuso ir a un bar esta noche para conocernos mejor, todos dijimos que sí, incluso Gabe, y me alegra porque así podré preguntarle por su comportamiento.

Llevo toda la tarde sintiéndome una tonta, no es mi culpa estar un poco cortada... Es normal el primer día ¿no?

He de quitarme sus palabras de la cabeza, vamos a pasarlo bien esta noche.

Todos estamos preparándonos para salir. Yo he decidido ponerme un mono corto rojo, para no complicarme demasiado.

Solo me he puesto máscara de pestañas y he dejado mi pelo liso suelto, lista.

Al salir de la habitación veo solo a Neil sentado en el sofá, me siento a su lado y le sonrío.

— Estás muy guapa, Grace —dice quitando la vista de su móvil.

— Gracias, tú también.

Al momento salen Tammy y April. Me levanto y las miro. Van impresionantes con sus faldas fluidas y peinados de hora y media.

— Vaya, creía que era algo informal —digo mirando mi vestimenta— Vais muy guapas.

— ¡Y lo es! —dice tocando su peinado— Vamos igual de arregladas que tú —obviamente lo dice para que no me sienta mal, pero de ninguna manera me hubiese vestido así para tomar algo.

— Bueno ¿nos vamos? —dice Gabe con la misma expresión seria de siempre apareciendo por el pasillo con una americana negra que parece vaya a explotar.

No lo he visto mucho más que a la hora de la comida, ni me había fijado en lo fuerte que estaba.

Al momento se mueven todos hacia la puerta.

Caminamos pocos minutos hasta llegar a un bar pequeño que pasa desapercibido, al entrar es un lugar acogedor con ambiente tranquilo, parece ser que los dueños conocen a Tammy y nos indican ir hacia la terraza.

Es increíble, hay sofás en todo el espacio, flores y luces adornando las pareces.

Nos sentamos en uno de los sofás, nos toman nota y comenzamos a hablar de la universidad, los que ya han comenzado cuentan su experiencia académica, hablan de profesores y nos dan consejos, sin duda son muy simpáticos, reimos con los comentarios de Neil y Tammy y sus peleas de compañeros de piso.

Sin darnos cuenta ya llevamos tres copas y estamos discutiendo sobre música.

Veo como una pareja cogida de la mano se acercan a la mesa. La chica que al parecer conoce a mis compañeros de piso se asombra al verlos. Seguido comienza a preguntar April sobre datos que desconozco. Supongo que son amigos de la universidad, o algo parecido.

— Lena está fuera con los chicos ¡venid, no se creerán que estáis aquí! —dice él señalando la parte interna del bar.

Tammy, April y Neil se levantan para salir.

Supongo que he de seguirles para conocerles.

De repente una mano coge mi brazo con fuerza.

Miro hacia atrás y veo a Gabe mirándome con su ya usual cara inexpresiva, su fuerza hace que no pueda resistirme y caer en el sofá a su lado.

— ¿¡Qué haces!? —digo soltando su mano de mi brazo, una vez sentada a su lado.

— ¿A caso conoces a esa gente? —me dice bebiendo un trago de su copa con aspecto indiferente. No lo voy a negar, me hace sentir estúpida por seguir a gente que ni conozco pero...

— No. —digo cortante.

— Yo tampoco —me mira a los ojos.

Tengo la oportunidad que buscaba para hablar con él y preguntarle sobre su comentario esta tarde.

— Oye —anuncio con confianza— esta tarde cuando llegaste te comportaste como un imbécil ¿qué querías decir con espectáculo? No me conoces ¡Ni siquiera te presentaste! Me hiciste sentir ridícula, no sabes lo mal que me sentó, sobretodo por no saber a qué te referías porque... —tomo aire, comienzo a sentir calor en mis mejillas, el alcohol hace efecto lentamente sobre mis palabras y mi cuerpo— Porque tú no sabes lo que he pasado hoy, yo... —callo antes de comenzar a pensar en eso.

— Lo siento. -noto su mano sobre mi pierna.

— ¿Qué?

— Lo siento, fui un maleducado, un idiota, lo que quieras... Es que ver algo relacionado con el amor me da rabia ¿Sabes? —respira y se acerca a mi.

— ¿Porqué?

— Hoy me he enterado de algo relacionado con eso y... —se encoge de hombros— No sé, estaba cabreado, tú no tienes la culpa de que te guste Neil y... —le corto.

— A mi no me gusta Neil, ni siquiera le conozco.

— ¿No? Es lo que parecía.

— No, yo... Estaba muy agobiada y no sabía que iban a haber más personas en el apartamento y estaba en shock.

—Ah, bueno. Puede que hubiese sido mejor intentar saberlo antes de hacer comentarios como ese...

— Estaría bien —digo poniendo los ojos en blanco.

— También estaría bien que aprendieras a guardar la baba cuando ves a Neil... —dice riendo.

— ¿De qué vas? ¡Eres un capullo! -no me aguanto a darle un toque en el hombro.

— No te enfades... —dice acercándose— Era una broma.

— Ya, claro —digo cortante mientras me mira. Sus ojos azules se quedan parados con los míos, siento el calor que produce su mano aún en mi muslo y su respiración tan cerca...

— Créeme —dice susurrando. Parecía que pasaban horas y a la vez el tiempo se paraba en ese momento, el alcohol hacia subir la temperatura de mi cuerpo, el calor que producía su mano en mi muslo se igualaba con el resto de mi cuerpo. Casi a centímetros, Gabe sube su mano izquierda y acaricia mi pelo. Me he quedado petrificada.

— Tengo ganas de besarte —¡Grace no! ¿¡Qué haces!? ¡Cállate!

— Hazlo —dice con su nariz a centímetros de la mía.

— Yo... No quería... —antes de poder excusar mis palabras sus labios chocan con los míos, siento su mano subiendo de mi muslo a mi cadera y me abraza fuerte hacia él. No puedo evitar seguir besando sus labios suaves y acariciar su pelo, mis dedos se deslizan bailando por su cuerpo. Hace calor. Necesitamos respirar... Siento que he corrido kilómetros cuando nuestros labios se alejan. Cogemos aire y nos miramos, veo como sonríe pícaramente y me muerdo el labio.

No puedo creer lo que acaba de pasar.