Grace y su vida universitaria

CAPÍTULO 3. NO ESTOY PREPARADO

08/09/2016 04:12 a.m.

Llevo toda la noche despierta pensando en lo que ha pasado. Los efectos del alcohol se han ido y ahora solo quedan pensamientos lúcidos como: ¿¡Qué cojones has hecho, Grace!?
Después del beso vinieron los demás y April nos dijo que se encontraba mal, así que todos cogimos nuestras cosas y fuimos a casa. Ni una palabra entre él y yo, ni siquiera parecía afectado, ni siquiera parecía tener ningún tipo de pensamiento en ese momento, caminaba mirando hacia delante con cara inexpresiva ¿Se arrepentiría de besarme? ¿Pensaría que no había sido nada importante? No sé que pensar, o sí, que el alcohol me sienta fatal.

7:45 a.m.

Me despierto para mi primera clase en la universidad, psicología ¡allá voy!.

No he dormido casi nada pero tengo energía suficiente para aguantar unas cuantas charlas sobre los estudios y ponernos las pilas. Voy al baño con miedo de encontrarme con alguien, sé que todos están despiertos, los despertadores llevan sonando un cuarto de hora.

Mientras me arreglo escucho a Tammy llamarnos a todos para desayunar, asi que trato de corregir las ojeras y salgo del baño intentando pensar en algo que no sea el tema de ayer noche.

Cuando salgo veo a April y Tammy hablando en la mesa. Les doy los buenos días y ellas me corresponden volviendo al tema anterior.

Sigo buscando algo para comer cuando una mano acaricia mi cintura. Es Neil sin camiseta, no puedo evitar pensar: omg.

— Buenos días —le digo sonriendo tratanto de no mirar hacía su torso.
— Buenos días ¿no sabes qué desayunar?
—Busco algo que no se tenga que comer en un bowl...
— ¿Cómo? —me pregunta extrañado.
Le señalo el armario abierto, los bowls estan demasiado altos para mi. Él se ríe y levanta el brazo para coger uno. Mis ojos quedan a la altura de su pecho.

Cuando me lo da no podemos aguantar la risa. Sin duda es un chico muy gracioso.
Nos sentamos en la mesa y comenzamos a desayunar. Me pregunto si Gabe vendrá a sentarse con nosotros.
Antes de preguntar el tema sale solo, al parecer se ha ido bien pronto.

— Llevaba la cartera así que supongo que irá del café a clase directamente -dice Tammy.
— Creía que comenzabáis a caerle bien-dice Neil riendo.

Así que ha huido ¿Como tengo que tomarme eso? Ya no sé qué esperar de este chico...
Sigo comiendo mis cereales cuando me doy cuenta de que Neil me está mirando fijamente.

— ¿Te gusta verme comer? —le digo riendo.
— Puede ¿Me permitirias comer contigo hoy?
— ¿Hoy? —digo sobresantada.
— Estudio en la facultad de al lado, y no has hecho amigos aún, lo decía por tu bien... —dice soltando una risa al suelo.
— Bueno, en ese caso me parece bien ¿Me esperas a la salida?
— Allí estaré —dice mientras desaparece por el pasillo.

13:30

Las charlas han estado bien, salgo de la facultad esperando ver a Neil donde nos hemos despedido esta mañana, pero no lo veo. Le envío un mensaje para que sepa que le estoy esperando.

Grace: Neil, ya he salido, te espero donde nos hemos despedido 😘

13:45

Chat con Neil: Ningún mensaje nuevo.

Un cuarto de hora esperando apoyada en la pared del edificio sin ningún mensaje o llamada. Será mejor que vaya a casa o me moriré de calor.

Comienzo a andar hacia casa cuando alguien aparece detrás mío y me coge de la cintura, alzándome .

Asustada, chillo preguntándome quién es. Por fin me suelta y le veo, es Neil.

— ¡Me has asustado! —digo golpeándole.
— Lo siento, creía que te merecías que alguien te llevara como una princesa hasta la cafetería —dice riendo.
— Eres idiota... —me quejo.
— Vamos anda, boba, me muero de hambre.

Comienza a andar llevándome por el brazo. Sin duda es el chico más amable que he conocido nunca.

Llegamos a la cafetería llena de alumnos hambrientos, la cola hacia la comida es larga pero Neil hace entretenida la espera: le gusta la misma música que a mi, hace bromas, me habla sobre la gente de la cafetería...

Parece que ha pasado un segundo cuando ya hemos acabado de comer, no puedo parar de reír con él, hasta que por el cristal, detrás de Neil, veo a Gabe siendo perseguido por una chica rubia que desconozco, cuando ella le alcanza él le chilla y continua andando. Un espectáculo en toda regla. No le digo nada a Neil y sigo escuchándole hablar sobre los conciertos a los que ha ido. No puedo evitar volver a mirar por la ventana, y veo a Gabe, me está mirando con cara seria, al momento se me corta la sonrisa que Neil me había provocado. Cuando Neil se da cuenta se gira, pero Gabe ya no está.

— ¿Qué pasa? —pregunta mirando detrás suyo.
— Nada, creía haber visto algo... ¿Asi que tu padre conocía al cantante? —le pregunto intentando seguir con el tema anterior.

¿Qué hacía Gabe mirándome? ¿Qué pasaba con esa chica? ¿Quién era? ¿Porqué ha desaparecido esta mañana? Mientras Neil hablaba, no podía dejar de pensar en la mirada de Gabe, serio mirándome fijamente y, al instante, yéndose.

15:30

Al llegar a casa, veo como Gabe sale a la terraza. Neil se despide entrando a su habitación y aprovecho para ir a hablar con Gabe.
Entro en la pequeña terraza y le veo sentado en el pequeño banco mirando la ciudad.

— Hola. —digo cortada.

No me contesta, solo me mira y vuelve su mirada hacia la ciudad. Siento que algo le pasa, se le ve triste, con ojeras pronunciadas. No puedo evitar sentarme a su lado. Nos quedamos callados durante unos minutos, hasta que se qué quería preguntarle.

— Gabe ¿Qué ha pasado? —digo mientras mi mano sobre la suya.
—Nada... —dice apartándose.

Eso me cabrea, ayer se acercaba a mi, me besó y hoy, cuando soy amable y trato de ayudarle, se aparta.

— Vamos Gabe, no te conozco mucho pero es obvio que algo te pasa...

Respira hondo y me mira.
— Ayer justo antes de llegar a casa mi exnovia me dijo que ha estado con otros hombres y que, tres meses después, se ha dado cuenta de que soy el hombre de su vida... —se ríe irónicamente— ¿Sabes? Yo no he podido levantar cabeza durante estos tres meses, han sido dos años de relación, Grace, dos, y nada más dejarme se lía con cuatro tíos, dos de ellos amigos míos... Y se da cuenta de que soy el hombre de su vida —se levanta y agarra la barandilla con fuerza— El hombre de su vida... —susurra con rabia pateando las cajas de la terraza.

Siento lo dolido que está, verle con tanta rabia me hace ver que tiene sentimientos, que no es tan frío como aparenta por fuera. Intento tranquilizarlo cogiéndole por los brazos. Él me sigue hasta sentarse de nuevo en el banco.

—¿Sabes? Le quería. —dice mirando al suelo.
— Se nota.
— Le quería y le hubiese perdonado todo, sé que hubiese ido al café y le hubiese besado...

No sé qué contestar.

— Pero no pude. Y ahora te he besado a ti. —dice aún mirando hacia el suelo.
— Pero... Eso no significa nada, si le quieres, tú...

Gabe levanta la cabeza y me mira a los ojos.

— No estoy preparado para enamorarme de nuevo.
— No lo hagas.
— No es tan fácil —vuelve a bajar la mirada— Te besé, y no fue igual.

¿Qué significa "no fue igual"?

— Creía que le quería, hasta que te besé. No estoy preparado para enamorarme de nuevo.

No me da tiempo a contestar cuando se levanta y desaparece.

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