Cap.11 Nuestro lugar secreto

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No podía dejar de ver a Nathaniel quien se veía asombrado por ver ese precioso lugar, esperaba de alguna manera que me dijera algo pero en vez de eso sacó una libreta y un lápiz, me miró y comenzó a dibujar, y sorprendentemente a los 10 minutos ya me había dibujado en tan bello paisaje y me regaló el dibujo.

- ¿Para mi? - pregunté ya que solo me estaba extendiendo el dibujo

- Claro que sí, e-es para ti - dijo algo sonrojado

Que tierno, se sonrojó por darme un dibujo.

<<Narra Nathaniel>>
Era demasiado hermoso ese paisaje, nunca había visto un lugar parecido, ¿a caso era el paraíso y Félix un ángel? Mi primer instinto fue dibujar a mi querido amigo, pero trazo tras trazo, entre más lo veía, más apuesto se volvía... oh no... solo me daban pensamientos así cuando estaba enamorado de Marinette... tengo miedo ahora de enamorarme de Félix, no es porque sea un mal chico ni nada de eso pero... no lo sé, simplemente tengo miedo de enamorarme y que nuestra amistad se arruine, era imposible que Félix pudiera sentir lo mismo por mí... él se enamoraría de alguna princesa o alguien de su mismo nivel, pero estoy acostumbrado a hacerme a un lado para dejar que las personas que me gusten sean felices conmigo o sin mí.

Después de que lo dibujé nos sentamos bajo un árbol a platicar sobre cualquier cosa, sobre lo que nos parecía bello, sobre las artes, ciencias y deportes, naturaleza, etc; y antes de darme cuenta, ya iba a tomar su mano... para evitar esto me levante y me quité la camisa, mis botas y calcetas, quedé solo en pantalones.

- ¡N-Nathaniel! ¿Que e-estas haciendo? - preguntó Félix algo ¿asustado? O aturdido, no sé exactamente cómo describir su sentimiento en ese momento, pero su cara estaba roja

- Vamos a nadar, ¿sí? El agua del lago se ve muy bien y hace un clima perfecto - dije acercándome un poco más al lago y mi amigo príncipe suspiro

- Ah, era eso, bien, nademos entonces, tienes razón, el clima es perfecto para nadar - Félix también hizo lo mismo que yo, y ambos corrimos al lago y nos lanzamos

Ambos estuvimos jugueteando en el agua, hicimos nuestras pequeñas competencias de velocidad en natación, él ganó todas las carreras ya que mi condición no es muy buena, y antes de darme cuenta ya iba a anochecer... no quería despertar, no quería irme, no quería dejar ir este día en el que Félix por primera vez podía ser libre... Mi voluntad era más fuerte, sentía como me iba pero luego de luchar unos minutos sentí que de nuevo podía estar en Daetria unas horas más, además, recordé que iba a ser sábado en el mundo real, lo que significaba que podía dormir más y estar un rato más con Félix.

- Nathaniel... ¿está bien que hagas eso? - preguntó Félix preocupado al verme algo fatigado

- Sí, estoy bien... solo que... ah nada, cosas de magos - respondí tratando de recuperarme

- Bien, si tú lo dices, pero por favor dime si te sientes mal, odiaría que algo te pasara por mi culpa, además lo digo porque es la primera vez que va a anochecer y tú sigues aquí, ah, no lo digo porque no me guste tenerte aquí, lo digo porque no es normal -

- Sí, muchas gracias por preocuparte Félix, pero ya estoy mejor - sentía que mi energía en Daetria era la misma que hace rato

Ya estaban por salir todas las estrellas, así que nos pusimos nuestras ropas y ya era hora de regresar al castillo, todo parecía que iba bien, hasta que llegamos y bajamos del caballo, me iba sintiendo mareado y me ayudó a tratar de llegar a mi habitación, en cuanto entramos ahí caí desmayado.

Cuando desperté estaba en mi habitación, pero la del mundo real, no estaba en Daetria, que desgracia, yo quería pasar más tiempo con Félix pero mi cuerpo ya no quería seguir durmiendo, y ahí a mi lado estaba Vinx.

- Niño, estabas en Daetria otra vez, ¿verdad? - dijo Vinx

- Sí, estaba con Félix, fuimos a un asombroso lugar -

- Dime una cosa, ¿te enamoraste ya de Félix? -

- N-no ¿que te hace pensar eso? - me puse un poco nervioso - además, yo no le diría enamoramiento, a-a penas me está gustando un poco -

- Me acabas de confesar lo que sientes por Félix -

- ¿A-ah sí? -

- Sea como sea, no debes, nada bueno va a salir de eso -

- ¿A qué te refieres? Que alguien guste de alguien más jamás ha matado a nadie -

- ¿Nunca leíste Romeo y Julieta niño? Aunque ese no es el punto, no te puedes enamorar de Félix, te vas a hacer daño y corres el riesgo de que no puedas volver a Daetria nunca -

- ¿De que estás hablando? Vinx, no entiendo y me estás asustando... -

- Simplemente no te hagas ilusiones con Félix, mantén tu distancia, ahora necesito que me lleves con Adrien, tengo que hablar con Plagg -

Me levante y desayuné, después de eso tomé una ducha y me vestí para ir a ver a Adrien.

<<Narra Vinx>>
El chico en serio parecía motivado a ir con Adrien, pero creo que más era por el parecido impresionante entre Félix y Adrien, aún así me sirvió de algo, por suerte no estaba el padre de Adrien y la asistente llamada Nathalie lo dejo pasar sin mucho problema y la copia de Félix y Nathaniel se encerraron en su habitación y gracias a la altura que tenía esa habitación, volé hasta lo más alto en una esquina junto con Plagg, necesitaba contarle la situación de Nathaniel y que con urgencia necesitábamos a Tikki.

Magic and CatsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora