Tenía en las manos un frasco de pastillas para dormir, aún estaba consciente de que Félix no volvería hasta dentro de dos noches más, el sol estaba saliendo y pronto sería domingo por la mañana, estaba nervioso y no sabía que hacer, estaba considerando todas las opciones posibles, pero no importa cuánto tiempo lo pensase, mi realidad era horrible, se que hay gente en peores situaciones pero yo siempre me he considerado una persona excesivamente débil emocionalmente... y me decidí a que Daetria era mucho mejor que París, tomé una botella de agua grande que tenía a lado de mi cama, tomé píldora por píldora hasta acabarme casi por completo el frasco, con el poco tiempo que me quedaba me puse el collar ya con cierta debilidad para finalmente ir a mi lugar favorito en todo el mundo que visitaba en sueños, Daetria.
- Nathaniel... ¿¡Qué haz hecho!?- exclamó Vinx viendo el frasco, yo ya me comenzaba a sentir cansado
- Iré a Daetria y viviré ahí, ¿no es genial? Puedes venir o quedarte ahí... yo no te esperaré - dije ya con aún más cansancio
Noté a duras penas como es que Vinx comenzaba a llorar pero no quería hacer nada por animarlo, después de todo, él quería irse, y yo también quería irme a Daetria permanentemente.
De nuevo, después de dormir, desperté en mi habitación de Daetria, me sentía un poco más pesado que de lo usual cuando estoy en Daetria, me recibió Bridgette.
- ¡Nathaniel! - exclamó mi amiga mientras corría a abrazarme, estaba llorando - ¡Que bueno que volviste! -
- ¿Q-que sucede? ¿Estás bien? - la tomé por los hombros
- E-es Félix, está desmayado... ayer mismo lo trajeron de regreso ésta misma mañana y tu no estabas para revisarlo... los médicos dicen que está enfermo -
La dejé sin decir nada y corrí a la habitación de Félix, al entrar lo vi acostado en su cama, su cara estaba roja, los médicos no me querían dejar pasar pero el señor Agreste me dio permiso de acercarme anunciando mi título, toqué su frente, estaba ardiendo pero al mismo tiempo estaba sudando frío, creo que los resfriados no son tan comunes en Daetria, de hecho, creo que era una nación muy sana, pero recordé que en estas épocas no hay tanta medicina, entonces no me quedó más remedio que inventarme algo, saqué mi libreta y lápiz que siempre tengo en mi túnica púrpura y primero escribí características de la medicina que necesitaba, mi madre antes de volverse una mujer ocupada solía enseñarme para que era cada medicina, entonces dibujé una pastilla sobre lo que había escrito esperando que mi idea funcionara, y apareció tal y como la dibujé, pero mi duda era si surtiría el mismo efecto que una pastilla normal.
- Necesito que despierte y un vaso con agua para él, por favor - dije con la pastilla en la mano
- Mago Nathaniel... ¿qué es eso que sostiene en su mano? - preguntó el rey
- Es un invento mío que espero que funcione, creo que ya se que tiene el príncipe y esto puede ayudarlo si es que mi magia me lo permite -
- Bien, entonces... sirviente, traiga el vaso con agua por favor - ordenó el rey
Una vez ya con el vaso con agua, desperté a Félix, quién me respondió débilmente y no tenía muy buen semblante, aún tenía fiebre y lo senté un poco.
- Félix, amigo mío, necesito que tragues esto - le di la pastilla
- Nathaniel... - me sonrió débilmente - gracias... si esto lo hiciste tú, seguro que con esto me curo - se metió la pastilla y se ayudo a tragarla con el agua, era la primera vez que lo hacía y le tomó un par de intentos, era normal, de hecho, tuvo que terminar por morderla, el sabor amargo le incomodó un poco pero nunca pude asegurar que la magia sabía bien.
Lo dejamos dormir un rato más y en cuestión de un par de horas su fiebre había disminuido. En ningún momento me alejé de la cama de Félix, y tampoco pude dormir, era la primera vez que me había quedado un día entero, vi el anochecer y el amanecer, habían pasado 24 horas y yo no sentía que volvería a mi horrible realidad en ningún momento.
<<Narra Vinx>>
No podía dejar de llorar... estaba ahí, justo frente a mi... el cuerpo de Nathaniel, parecía dormido, se veía tan tranquilo y apacible como cada noche, pero yo sabía que debía hacer algo, sus padres nunca lo despiertan, entonces volé lo más rápido que pude a la casa más cercana que era la de Adrien, en cuanto entré a su habitación, Plagg estaba comiendo queso y Adrien estaba alistándose para ir a la escuela, no podía ir en este momento, si iba, Nathaniel iba a morir por la sobredosis de pastillas que se había tomado.- ¡Adrien, tienes que llamar a una ambulancia ya! Nathaniel... Natha... - no podía terminar la oración
- ¡Vinx! ¡Cálmate! Dime por favor, ¿Que le sucedió a Nathaniel? - Adrien me miró y me tomó preocupado
- Nathaniel... ¡Nathaniel intentó suicidarse! Está en su cama, t-tomó muchas pastillas de un frasco y se quedó dormido... s-sálvalo por favor... - no podía dejar de llorar
Adrien me soltó rápidamente y corrió fuera de su habitación, llamó a su asistente para que lo llevaran al la casa de Nathaniel, regresé volando con mi amigo pelirrojo con la ayuda de Plagg, estaba muy débil para volar solo, solo esperaba que no fuera muy tarde...
Chat Noir... sálvalo por favor.
ESTÁS LEYENDO
Magic and Cats
FanfictionNathaniel es un chico tímido y reservado, es excelente dibujando. Es un chico de corazón puro y noble, estuvo enamorado de una chica llamada Marinette, pero ahora ha estado teniendo sueños raros sobre una época medieval de fantasía, pero sus sueños...