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Holi,gracias por leer,aquí un nuevo capítulo de Surrender.Empecé la novela ayer y ya tengo 26 lectores,graaaacias.

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Domingo por la mañana.¿Que se podía hacer un domingo a las 10:46 de la mañana?

Narra Louis.

Que aburrimiento,macho.Tengo miedo a salir,prácticamente terror.Además,Matt no me deja salir,porque dice que la próxima vez no tendré tanta suerte.¿Suerte?Si a rajarme la barriga hasta el punto de desangrarme y morir se le considera suerte,entonces lleva razón.No voy a dejar que ese asesino y maltratador con fachada de tio sexy e irresistible con ojos verdes y rizos incontrolablemente alocados me asuste.Voy a salir y aprovecharé que Matt está haciendo la comida.

Cojo lo primero que se me presenta,un pantalón negro rajado,una camiseta negra macabra y unas botas de cuero.Bajo esa ropa no me siento tan maricón.Parezco un tipo duro.Bueno...si fuera un poco más al gimnasio.Pero va,me las piro.Cojí las llaves y el móvil y me dirijí a salir.

-¿Dónde te crees que va,Boo?-me dijo con tono sarcástico.

-Cállate y no me llames así,realmente lo odio.Voy a por medicinas,en una hora vuelvo.Y si novuelvo,empieza a preocuparte por mi.-le guiñé el ojo y le di un corto beso en la mejilla.

Él ya está aconstumbrado a que haga todas esas mariconadas con él.Dejó de poner caras raras cuando hacía eso,hace unos 6 meses.Abrí la puerta y salí escopeteado de allí.

Narra Harry.

Joder macho,mi puto padre me despierta a estas horas para que vaya a comprar medicinas para mi hermana Gemma,que tiene fiebre,y me cago en la puta.Si no fuera,porque mi hermana es uno de los seres a los que más quiero (o el único) pasaría de ir.Cojí las llaves y me fuí de casa,con un leve portazo.Me monté en mi coche y fuí hacia la primera farmacia que me encontré.“Farmacia Sant Vicent“.

Narra Louis.

Quise darme un paseo y fuí andando hacia la farmacia más alejada que encontrara,ya que no quería volver a encontrarme a ese tal Harry de nuevo.¡Me mataría!Un simple encuentro sería fatal.Pasé por el metro de la otra vez,y todavía había rastros de mi sangre.Y...UHH,ahí seguía el perro.¡Que ascooooo!¿Es que este lugar no lo limpian?Había hormigas a su alrededor,y empezaba a oler mal.Muy mal.FATAL.Me vinieron arcadas y salí de ese lugar tan asqueroso.Después de media hora caminando,divisé una farmacia.Estaba en los barrios bajos,llenos de basura y bichos por todas partes.El letrero de la farmacia estaba demasiado sucio,pero pude leer ”Farmacia Sant Vicent“ o algo de eso.Entré y pedí una caja de aspirinas.El lugar no parecía tan sucio como el exterior de este.El señor me atendió con mucha amabilidad y se lo agradecí con una sonrisa.

Salí de ese lugar tan apestoso y bajé al “metro“ (si a eso se le podía llamar metro) para tardar cuando más en volver a casa.Estar postrado en esa cama todo el día no es plato de buen gusto para nadie.Estaba solo y eso me provocó miedo.Pero el pánico que sentí se acentuó en ese momento al oir una voz ronca detrás mía,y una respiración profunda clavada en mi espalda.

Surrender. | Larry Stylinson |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora