10.

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Me quedé allí.Parado.Siguiéndole el beso a el chico que intentó matarme con una navaja y la cual,me había dejado una herida bastante fea en el vientre.Ahí estaba yo.

Pobre de mí,que caí en las redes de aquel sucio bastardo.Pero no podía controlarlo,no podía.Por mucho que me pesara,tenía que parar aquel beso,que me estaba llenando de pensamientos impuros y que estaba recargando su fuerza en mis partes íntimas.Si me empalmaba,iba a ser un problema bastante gordo (literalmente).Le mordí con muchísima fiereza el labio superior,le hice sangre y se lo lamí,instintivamente.

-Huumm,moreno,con lo que te estaba gustando...¿Por qué me cortas?-preguntó con cierto tono de sarcasmo.

-¿Quién te ha dicho a tí que me estaba gustando?-de repente,me cojió los testículos,duros de excitación y me acarició la pequeña erección.

-Por Dios,muñeco,estás bastante duro.¿No me digas que la persona que te rajó la barriga te está causando excitación?-tenía una sonrisa burlona en el rostro.

Eché la cabeza hacia atrás e inmediatamente,por el contacto de su mano en mi entrepierna,me puse durísimo.Me olvidé de todo.Absolutamente todo.Me fijé en la entrepierna de Harry,y él,por su cara,supuse que estaba más duro que yo.Me cojió de la camiseta,me la quitó y me arrancó los pantalones.Realmente eso si que no.

-¡Nooooo!Ha...Harry...Dej...ame...-se bajó los pantalones hasta las rodillas y me quitó los pantalones.Sentí su miembro en mi entrada y luché,luché porque eso no entrara en mí.

-¡HARRY!¡NO!¡ASQUEROSO CACHONDO MENTAL!Suel..ta..me.-Le rogué,como no he rogado a nadie.Empecé a sudar cuando entró en mo sin ninguna delicadeza.La sangre manchó el suelo.Empezó a embestirme con muchísima brutalidad.Mis gritos se mezclaron con sus gemidos,y una lágrima descendió por mi mejilla.Sangraba muchísimo.Yo era virgen analmente,y eso me estaba doliendo demasiado.Estaba mareado de dolor y Harry,al ver que yo estaba flojo y que me estaba cerrando,me metió un puñetazo en la mejilla,y tardó poco en salir un moratón.Me empecé a mover de nuevo,luchando por que me dejara.

Narra Harry.

Este chico no se quedaba quieto.Me sentí lleno cuando ví la sensación que causaba en él.Cuando me siguió el beso...Fué tan excitante.Ahora.estaba penetrándolo salvajemente,y noté como se quejaba.Quería parar,pero este muñeco me tenía totalmente enganchado.Le embestía cada vez con más fuerza.Con mucha más.No me gustaba ver.esa cara en mi moreno.Ojalá algún día le haga lo mismo que ahora,pero él me pida más,en vez de luchar para que pare.¿Harry?Tu no eres Harry.Tu eres un completo idiota.Pero por mucho que quisiese seguir,por mucha excitación que me provocara ese chico,por muchas ganas que tuviese de reventarle la entrepierna...

Paré.

Surrender. | Larry Stylinson |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora