24. First Love

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WARNING/ADVERTENCIA: este capítulo contiene situaciones sexuales leves.


























"Dicen que a lo largo de nuestra vida tenemos dos grandes amores: uno con el que te casas o vives para siempre, puede ser el padre o la madre de tus hijos...Esa persona con la que consigues la compenetración máxima para estar el resto de tu vida junto a ella...

Y dicen que hay siempre un segundo amor, una persona que perderás siempre. Alguien con quién nacíste conectado, tan conectado que las fuerzas de la química escapan de la razón y te impedirán siempre, alcanzar un final feliz..."

El Zahir-Paulo Coelho. (Fragmento)












"Hola extraño..." lo llamé al volver y notar que seguía despierto. Recargada en el marco blanco de madera.

"Hola..." respondió débil, con una leve sonrisa que apenas y curvó sus labios.

Yoongi palmeó el espacio vacía en mi cama y yo no pude evitar enternecerme. Se veía frágil, pequeño. Y pensé en cuántas veces me había visto él a mí así antes.

Y sin dudarlo ni un segundo me dirigí a él a paso lento, rozando la punta de mis dedos sobre las sábanas blancas.

Él hizo a un lado la sábana y yo me recosté a su lado lentamente, sin perder de vista sus lentos movimientos.

Me acomodé frente a él recostándome sobre mi lado derecho, y me sonrió con su rostro limpio y su hermoso cabello negro revuelto. Se veía tranquilo, ya más sereno que hacía rato.

Había jalado las sábanas y se cubría hasta su delgada cintura, y yo como era mi costumbre, las jalé hasta mi cuello, enrollándome entre las sábanas haciéndolo reír.

"Tengo demasiado frío" le confesé buscando sus pies con los míos bajo la sábana. Los encontré. Se había puesto calcetines y yo reí sintiéndome descubierta. Yoongi me conocía como nadie.

"Siempre tienes los pies fríos." Musitó.

"Y las manos calientes" dijimos los dos.

Él me sonrió sin hacer ruido, y sus bellos ojos se cerraron un momento para después abrirse robándome una sonrisa que por siempre sería sólo suya.

¿Por qué le dábamos el poder de destruirnos a quiénes amábamos?

Nos quedamos en silencio, realmente no supe por cuánto tiempo, sólo él y yo, viéndonos el uno al otro en aquél momento de calma, sabiéndonos seguros ahí. Juntos. Como tanto tiempo habíamos corrido uno a los brazos del otro cuando las cosas no salían bien, cuando estábamos asustados o... cuando todo iba bien, y queríamos compartirlo con el otro.

"Me gustan tus ojos marrones..." murmuró rompiendo el silencio. "Son del color de mi primer piano..."

Yo sonreí acostada frente a él, poniendo mis manos tibias sobre sus mejillas pálidas.

"De verdad lamento lo que dije ..." murmuró de nuevo y mi corazón se volvió a quebrar. "Lo siento tanto..."

Yo negué en silencio intentando formular su nombre que se atoraba en mi garganta, completamente enganchada en sus ojos almendrados.

Me acerqué más a él, cerrando la distancia entre ambos encontrando mi propia voz de nuevo.

"Perdí a mi abuela a los 13 años, y no lloré ni una gota aunque me mataba por dentro la simple idea de no volver a verla. A los 19 años, me fui de mi casa a un país al cual jamás había visitado. Lejos de mi familia y de todo lo que conocía. Me alejé de mi hermana y le rompí el corazón a mi mamá. Cargué con ese dolor y... soy tan terca que no me detuve. Hubo días en los que no tenía ni para comer. Pasé noches sin dormir del terror que sentía y bien sabes cuantas veces me han rechazado en mi trabajo. Y aun así no me rendí, Yoongi. La vida me tiraba al suelo de sentón y... yo seguía parándome, empujón tras empujón. Y gracias a eso te conocí... una tarde Julio..." Yoongi me sonrió en silencio. "Después me mudé a otro continente y me llevé a mi hermana conmigo. Y todo parecía mejorar pero..." mi voz se quebró y lo vi apuñar sus ojos como si le doliera algo en su interior. "Tú te fuiste..." musité sin poder detener las lágrimas que se resbalaban de mi rostro.

STAY (BTS)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora