Leire
La comida estaba deliciosa. Al salir del restaurante nos dirigimos a las oficinas, donde nos esperaban todos.
- Hola - Dijimos Taylor y yo a la vez cuando entramos. Obtuvimos como respuesta un hola de los demás. Estaban todos bastante ocupados, unos con los ordenadores, otro a una tablet, otro con un objeto cuyo nombre no se y Alex y Maika comiéndose la boca. ¿Qué estarían haciendo?
- ¿Por qué tan ocupados? - Preguntó Taylor mirando lo que hacían y resolviendo la duda que tenía.
- Es imposible descifrar ese código, demasiada seguridad. Edison creó un programa especial, con demasiada seguridad - Dijo Derek sin despegar su mirada de la pantalla.
- Cierto, el programa E.L.E.L es increíble, tiene tanta seguridad que no creo que podamos descifrarlo. Sin el código es imposible - Dijo Ben finalizando la oración con un suspiro.
- ¿Programa E.L.E.L? - Dijo Taylor confuso.
- Sí, no entendemos el por qué de ese nombre. La mente de Edison era diferente - Dijo Gabriel. Espera, ¿E.L.E.L? Eso me suena de algo, lo he visto en algún sitio, pero no se donde.
- ¿Qué crees que podrá ser? - Dijo Derek refiriéndose a mí.
- Me suena de algo, lo he visto en algún sitio, pero no se donde.
- Necesitamos que lo recuerdes, es muy urgente - Volvió a decir Derek. Asentí y salí de la habitación para airearme un poco. Taylor me siguió.
- Necesito pensar - Dije suspirando y sentándome en el suelo apoyada en la pared.
- Seguro que lo recuerdas - Dijo calmándome.
- ¿Tú crees?
- Seguro. Tú tranquila, ¿de acuerdo? - Dijo dándome un beso y dedicándome una sonrisa. Creo que tengo el mejor novio del mundo. Le sonreí y le besé.
A la noche fui directa a la cama para descansar. Tardé como 2 horas en dormirme por culpa de no poder recordar que significaban las letras.
Faltaban dos días para mi cumpleaños, pero él se iba en 3. El primer día, un anillo para mi madre, con unos números que no logro recordar. Al segundo, un brazalete para mi hermano, también con unos números borrosos en mi mente. Y para finalizar, un collar para mí el día de mi cumpleaños, con más números. El día que se iba, marcó en un pequeño mueble las siglas E.L.E.L. Cuyo significado era Edison, Linda, Eric y Leire. Ese día fue uno de los peores de mi vida. Lagrimas arroyaban por mis mejillas. Ese día mi padre se iba, y con él, mi alma, al igual que con la del resto de mi familia. Aún peor cuando nos comunicaron que había muerto.
Un grito hecho por mi despertó a Taylor. Lagrimas caían de mis ojos.
- Eh, cariño, tranquila, ha sido solo una pesadilla - Dijo mientras me abrazaba. Para mi no fue una pesadilla, fue un antiguo recuerdo que nos ayudaría a resolver todo.
- Taylor, ya se el código - Dije entre sollozos.
- De acuerdo. Mañana nos lo dices ¿vale? Ahora intenta dormir. Y no llores princesa - Dijo dándome un beso.
Joder, mi chico es un puto amor.
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¡Hola amores! Aquí os dejo mi último capitulo del 2013. Aprovecho para desearos un feliz año y deciros que disfrutéis todo lo que podáis del 2014.
También quería decir que la novela esta llegando a su fin. Pero volveré con más novelas. Como ya dije, la próxima será un fanfic de One Direction.
Besos y que disfrutéis el 2014 :)
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Solo mía
RomanceLeire, una joven que se muda a Londres por problemas familiares, conoce a Taylor, al principio decide ignorarle completamente, pero poco a poco Taylor se la va ganando. ¿Terminará surgiendo el amor entre ellos dos?