Tengo un amante

Viaje inesperado

Una sensación de hormigueo recorría su cuerpo, tenia los oídos tapados y se sentía completamente desorientado. Poco a poco iba recobrando la conciencia, no sabia donde estaba ni con quien, alcanzaba a escuchar unas voces parecía que murmuraban cerca de él. No lograba distinguir nada, su visión y lucidez estaban regresando.

Las imágenes del ultimo suceso que recuerda llegaron por completo a su mente y abrió abruptamente los ojos tratando de reconocer el lugar donde se encontraba. Parecía estar en una especie de habitación, pero era demasiado pequeña para estar en un hotel.

Puso mas atención al ruido a su alrededor y a las sensaciones de su cuerpo.

— ¡Es un avión! — pensó — ¡Estoy en un avión! esas voces son de...

— Mina ¿no crees que se nos paso la mano? — preguntaba un preocupado Yaten.

— Por supuesto que no — respondía una nerviosa Mina — no había otra forma y lo sabes, llevo semanas tratando de hablar con Serena y no responde mis llamadas

— Pero aun no despiertan y ya casi llegamos a — Yaten iba a continuar cuando el cuerpo de un molesto Seiya salió a su encuentro.

— ¿Se puede saber que diablos estoy haciendo aquí, en un avión y con ustedes y donde esta Bombón?

— Seiya tranquilizante ¿si? — respondió Mina — te prometo que todo tiene una explicación, Serena esta durmiendo.

— ¿Ustedes eran los que nos atacaron? ¿Pero en que rayos estaban pensando? nos pegaron un sus...

— Basta Seiya — grito Yaten — Mina ya te dijo que todo tienen una explicación, no tienes porque hablarle así

— Lo siento, tienes razón — dijo un apenado Seiya — disculpame Mina pero nos pegaron un susto terrible, me sentí morir cuando vi que se llevaron a Bombón

— No te preocupes Romeo, tu Julieta esta sana y salva — respondió una sonriente Mina — en cuanto despierte te prometo que les explicamos.

Seiya dio un largo suspiro.

— ¿Se puede saber a donde vamos? — pregunto él.

Mina y Yaten se miraron con una sonrisa.

— No comas ansias es una sorpresa — respondió Mina.

—En ese caso, iré a ver a Serena.

Seiya cruzo la sala pequeña sala donde estaban ellos para entrar en otra parte del avión donde había una especie camas para una sola persona en literas, dos en cada lado. Serena se encontraba profusamente dormida.

Se veía tan hermosa, relajada y con una paz infinita, sin el peso de un destino sobre ella, sin discusiones ni problemas. Le dolía todo lo que estaba pasando su novia pues sabia lo importante que era la amistad y bienestar de todos para ella.

Se sentía frustrado, impotente y enojado, por que el destino era así con ella. La persona mas buena y pura del universo que había sacrificado su vida tantas veces tenia que pasar por tanto dolor. Continuo contemplándola por unos pocos minutos mas hasta que decidió despertarla.

— Bombón — susurro a su oído — despierta

Serena comen abrir despacio los ojos, al igual que Seiya se sentía desubicada y comenzaba a ponerse nerviosa cuando la voz de Seiya atrajo su atención

— Bombón, tranquila, todo esta bien — la abrazo.

— ¡Seiya! — grito arrojándose a sus brazos — que bueno que estas bien, me asuste muchísimo.