Tengo un amante

Rueda de la fortuna

Los días habían pasado desde la ultima vez que Serena y Seiya se vieron, él se encontraba aun demasiado furioso por la actitud de ella. Siempre se prometieron que entre ellos no debía haber secretos y Serena no había cumplido con su parte del trato.

Serena había hecho de todo para tratar de hablar con él y explicarle las cosas pero simplemente Seiya no quería verla. Ella sabia que había cometido el error de ocultarle cosas a su esposo, pero fue demasiada información la que recibió aquel día.

Simplemente estaba en shock y teniendo el corazón mas puro del universo todo se le había juntado, la culpa por lastimar a Darien, la culpa por creer que le negaría la vida a Rini y que, ahora resultaba el padre era Seiya y no quien siempre le hicieron creer, el lastimar a Seiya, la separación de sus amigas.

¿Por que nadie la podía entender a ella? No supo reaccionar y ahora que lo hacia, tratando de arreglar las cosas, Seiya simplemente se negaba a verla y escucharla. Cada vez que lo buscaba en su departamento o no estaba o no quería salir y la misma historia por teléfono.

Para su buena suerte sus padres estaban tan ocupados con los preparativos de la boda y presumiendo a sus amistades que su hija se casaría con un famoso que no notaban los problemas que tenia con Seiya, de notarlo, empezarían a odiarlo al igual que lo hicieron cuando peleaba con Darien. Aunque ya no estaba segura de que los planes de boda siguieran en marcha.

Los hermanos de Seiya habían intentado hablar con él, hacerlo entrar en razón. Seiya se negaba por completo hacerles caso, incluso terminaban discutiendo, mas con Yaten que con Taiki.

— ¡Es un completo idiota! — gritaba Yaten furioso

— Yaten calmante, estoy seguro que con esa actitud no vas a lograr nada — respondió Taiki tranquilamente.

— ¡Es que es un inmaduro! — Yaten caminaba de un lado a otro — esta actuando como un adolescente, ni si quiera sabemos que paso cuando se quedaron solos, no acepta cuando ella viene a verlo y no le responde las llamadas, Mina dice que Serena esta destrozada pero que tampoco quiere hablar con ella.

— No puedes hacer nada, solo espero que Seiya no se arrepienta de lo que esta haciendo.

— Creo que Seiya va a entender el día que Serena lo mande al diablo, por imbecil — Yaten se detuvo — ademas pasa todo el tiempo metido en el estudio y si no de fiesta, tomando por ahí.

Justo cuando Yaten termino de hablar Seiya había entrado por la puerta con su actitud de siempre. Se siguió derecho sin si quiera saludar a sus hermanos. Yaten exploto.

— ¡¿Me quieres decir ya, que demonios pasa contigo?! — grito Yaten alcanzándolo por detrás

— Metete en tus asuntos enano — Seiya se giro para enfrentarlo.

— ¿Estuviste tomando? — pregunto Yaten una vez que el evidente olor del Bourbon llego a su nariz.

— No es algo que te importe

— Seiya reacciona, habla con nosotros ¿que paso aquella noche? ¿por que no respondes las llamadas de Serena?

— Te lo vuelvo a repetir como las ultimas veinte veces, no quiero hablar de eso.

— Eres un completo idiota primero te la pasas llorando por los rincones del palacio en nuestro planeta, proclamando el amor que dices sentir por la princesa de la luna y al primer problema actúas como si no importara, vaya amor que le tienes, es mas estas actuando igual que el imbecil de Darien, no me sorprendería que Serena te mande al demonio como lo…

Yaten iba a continuar hablando pero el golpe inesperado de Seiya hizo que se callara, llevándose una mano a la boca. Seiya esperaba que su hermano le regresara el golpe pero eso nunca paso.