ROOMIES (PAUSADA)

Capítulo 70

El ambiente entre ellos se ha relajado al jugar videojuegos. Remontan a la época de secundaria, el momento favorito en la vida de ambos. Taehyung se promete formar muchos recuerdos nuevos a partir de este instante, y mejores.

Hablan en susurros mientras Yoongi abre la puerta del departamento. Ya es medianoche y todavía no cenaron. El mayor invita al menor a sentarse en la sala mientras él cocina, pero éste quiere hacerle compañía. La conversación no cesa mientras Taehyung lo observa concentrarse en su labor. Yoongi todavía tiene la costumbre de fruncir levemente el ceño cuando está demasiado atento a algo. Taehyung se ríe internamente, satisfecho de lo que ve.

Yoongi le hace probar un par de veces la comida hasta que finalmente apaga el fuego y sirve todo para llevarlo a la sala.

—¿Qué quieres tomar? —pregunta antes de sentarse.

—Cerveza.

Taehyung tiene expectativas sobre esta noche, y si hay algo que quiere sentir es el viejo sabor amargo de Yoongi. Cuando el mayor vuelve atacan la comida con ganas. La cocina de Yoongi mejoró muchísimo los últimos años, es un mar de sabores deliciosos en la boca. Taehyun finge un llanto de emoción mientras se llena la boca como un niño de cinco años, acción que hace flotar a Yoongi. Ese es su alien.

Una vez terminada la comida, se dedican a beber sus cervezas en silencio, relajados en el sillón. Tae se levanta para ir al baño y Yoongi supone que luego de eso se irá, por la hora. No piensa impedírselo, él mismo ha dicho que vayan lento, tranquilos. Se levanta y camina hasta la cama, lanzándose de espaldas y cubriéndose los ojos de la luz con el brazo. En realidad se muere de ganas de tomar a Taehyung esta misma noche. Su sonrisa solo le ha dificultado controlarse, así que lo mejor es que se vaya.

Lo sorprende un peso sobre los muslos y quita el brazo de su cara para observar al menor sentado encima.

—¿Qué haces? —pregunta curioso Taehyung.

—Sólo... Estoy cansado. —La cabeza ya no le funciona, tarda en darse cuenta que el que debería estar haciendo esa pregunta es él—. ¿Tú qué haces?

—En vez de preguntar y ponerme nervioso podrías hacer algo al respecto.

Yoongi frunce el ceño y de un tirón gira sobre la cama y apresa al menor debajo suyo.

—¿Y qué debería hacer?

—¡Deja de preg... —Taehyung comienza a quejarse un poco molesto, pero los labios del mayor le impiden continuar.

Yoongi atrapa las muñecas del menor a los laterales de su cabeza. Una vez que el beso inicia, no puede detenerse. Ultraja sus labios hasta dejarlo sin aliento. Y aún ahí no se detiene. Las respiraciones agitadas se mezclan y vuelven irregular el ritmo del beso, pero ninguno de los dos quiere alejarse. Taehyung levanta un poco la cadera para frotarse contra la entrepierna del mayor. Yoongi gruñe y le muerde el labio.

—¿Estás seguro de hacer esto? —pregunta, deteniendo todo pero sin soltarle las muñecas.

—Más que seguro.

—¿Vas a estar bien? —El peligris desvía la vista y se muerde el labio.

Taehyung sabe por qué lo pregunta. No hay manera de que Yoongi sepa que ya no es virgen, y menos si ha dicho que lo esperó todo este tiempo.

—Claro, tonto. Pasaron cinco años, ¿en serio creías que seguiría siendo virgen?

Los ojos del mayor se oscurecen y el agarre en las muñecas se debilita. Se deja caer otra vez con el rostro tapado al lado del menor, que lo mira desconcertado y preocupado. Se pregunta si dijo algo malo o si Suga se arrepintió.