One Shots ≫ JunjiexEli

X. Descaro

El adolescente caminaba con más prisa de lo normal, hace ya tres días que no hablaba con el pelinegro, que ni siquiera sabía nada de él.

Por dentro, la preocupación lo estaba matando, pero intentó disimularlo, no quería la atención de nadie, o qué se preocuparan por él.

Abrió la puerta de la tienda rápidamente, dirigiéndose a la sección de las bebidas.
"Sólo no pienses en ello." Dijo hacia sus adentros.

Intentó alcanzar la botella de la repisa más alta, sin lograrlo, intentó saltar, pero sólo logro irse hacia atrás empujando a una persona detrás suyo.

— L-lo siento. — dijo dándose la vuelta.
Para encontrarlo a él.

El adolescente sonrió cínicamente.

— Junjie. — dijo en un tono indiferente, en el fondo le dolía, le dolía que lo haya ignorado todo este tiempo, y seguir viviendo cómo si no estuviera pasando nada.

— E-Eli. — sonrió el asiático nerviosamente.
El adolescente se dio la vuelta, dejando la tienda sin siquiera pensar en comprar nada.

Escuchó pasos acercándose hacia él, era obvio que el pelinegro lo había seguido.

— ¿Qué quieres? — dijo el adolescente sabiendo que Junjie se encontraba detrás de él.
— Si no quieres hablar conmigo está bien, Eli.

El adolescente se dio la vuelta, mirando a su compañero a la cara.

— Eres increíble. — dijo. — Un simple lo siento sería suficiente.

El pelinegro guardó silencio, el adolescente supuso que no era su intención disculparse.

— El que me ignoró por tres días, fuiste tú. — el tono de voz del adolescente había cambiado.
— Escucha, Eli...
— No, ahora me vas a decir otra vez que "No era tu intención lastimarme."

El pelinegro bajó la cabeza.

— Es que yo no quería...— intentó decir.
— No, Junjie, lo hubieras pensado cuándo me miraste con esa estúpida sonrisa, o antes de decirme que te importaba, si es claro que nunca lo hice.

— No sabía que eso iba a dolerte. — dijo el pelinegro.
— Me mentiste, me dijiste que yo era especial para ti, ¿Y ahora tienes el descaro de venir a decirme que no sabías que iba a dolerme?. — el adolescente siguió su camino.

"Ve por él."  Se dijo a si mismo Junjie, pero no se movió ni un centímetro.

El corazón de Eli latía rápido, dolía, y ninguna máscara o personalidad falsa iba a ocultarlo.

— Yo jamás te mentí sobre lo que sentí. — dijo una voz a pocos centímetros de él.

El pelinegro lo atrajo a él, posando un beso en sus labios.

— Yo jamás te mentí sobre lo que siento.