Capítulo 18. |Especial|

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*Este capítulo es especial (al menos para mí). ¡Disfrutad!

Emily.

Aaron había llegado a mi casa en el momento más oportuno. Tenía listo el pijama y el bote de helado para una maratón de películas, y así olvidar un poco lo ocurrido. Pero bueno, quizá conocer a su hija sea un mejor plan.

— Hola —saludó Aaron sin ganas. ¿Qué se suponía que le pasaba?

—¡Hola! —la voz chillona y con energía de la niña me hizo sonreir.

—Pasad —les invité.

Todos nos sentamos en el sofá. Había un silencio incómodo, pero a la niña pareció no importarle. Ella jugaba con su peluche y lo abrazaba fuertemente.

—Ella es Crystal.

—Crys, qué bonito nombre —sonreí. —. Yo soy Emily.

—Emily, me caes bien —dejó el peluche para mirarme y sonrió dulcemente.

Sabía que la niña iba a ser encantadora, ¿pero tanto?

—¿Es ella mi nueva mami? —se dirigió hacia su padre.

Me quedé en shock. Ni siquiera sabía qué decir ni cómo actuar. Aaron se percató de mi incomodidad respecto a la pregunta de la niña, y decidió hablar.

—No, cariño. Ella sólo es una amiga, nada más.

Por alguna razón su comentario me dolió. Estuvimos a punto de besarnos en la cafetería, y yo pensé que desde ese momento podría nacer algo entre nosotros; algo así como una relación. Sentía que Aaron estaba jugando conmigo, y eso no me gustaba ni un pelo.

—¿Entonces Alysson lo sigue siendo?

—No, Crystal. La dejé —comentó, con una pizca de tristeza en su voz.

Mi subconsciente ahora mismo debería de dar saltitos, pero no. Por una parte me sentía feliz, feliz porque entonces ya tendría vía libre con Aaron. Pero... Por otra parte algo dentro de mí decía que esto estaba mal, que era como “engañar” a Alysson, aunque ya no fuésemos amigas.

—¡Bien! —exclamó Crys. — Alysson no me gustaba. —continuó hablando, mientras hacía tonterías con el peluche. —Ella —me señaló. —sí vale para mami. Tiene mi aprobación.

Reí ante su comentario.

—Gracias, bonita. Pero... Creo que eso no pasará. —respondí, sintiendo una punzada en el pecho.

No sabía porqué yo actuaba así; pues aunque Aaron en una ocasión tuvo la oportunidad de besarme, y no podía negar cómo las mariposas revoloteaban en mi tripa, sentía que quizá él no tuviese ningún interés en mí.

Y entonces recordé: el primer día en el que le conocí el me llamó guapa entre otras cosas, y alomejor eso significaba algo.

— ¡Joo! Papi, ¿por qué ella no puede ser tu novia?

— Bueno... ¿quién ha dicho que no?

Y entonces sentía que el mundo se acababa y que sólo existíamos él y yo. Nuestra “relación” era complicada, por así decirlo. Aaron conseguía confundirme de la peor manera, y a la vez hacerme sentir muy bien a su lado. Bien, retiro lo dicho. Tendría total vía libre con él.

—Vale, hija, vete arriba. Los mayores tienen que hablar de cosas importantes.

La niña no se quejó, y ni siquiera hizo algún puchero. Sólo se levantó y se fue, dejándonos a los dos sólos.

— ¿Por qué le dijiste que se fuese? —pregunté, mientras me acercaba más a él. — Se ponían las cosas interesantes.

—Emily, debo ser sincero. Tengo unas ganas inmesas de besarte.

Mi corazón latía más rápido y mi pulso se disparaba. No sabía si esto era un sueño, o si era verdad. Lo único que pensé fue: adelante.

—Se las cosas que he dicho, y sé que quizá haya parecido que estaba jugando contigo... Lo siento. ¿Me permites besarte?

En estos momentos no podía decidir una respuesta que no quedase ridícula, por lo que me limité a asentir, un poco aturdida y asombrada por sus palabras.

En cuestión de segundos nuestros labios estaban juntos, la sensación era muy exquisita. Rodeé mia brazos en su cuello, y él en mi cintura; atrayéndome más a su cuerpo. El beso se iba haciendo cada vez más intenso, nos devorábamos con delicadeza. Aaron mordió mi labio inferior con fuerza, y sentía cómo éste comenzaba a sangrar. Gemí —no sé si por el dolor de su mordida o por el placer—, y Aaron se rió. Las mariposas bailaban otra vez en mi interior.

Los dos nos separamos en busca de oxígeno. Rechupeteé mis labios, quitando así la sangre. Juntamos nuestras frentes, y observándonos, se me escapó una sonrisa tonta.

A la mierda Alysson, yo a este me lo tiro.

—Emily Watson, ¿quieres salir conmigo?

•••

¡AAAAH! Dios, amé este capítulo. Me pareció muy cute cuando se besaron, y cuando Aaron le preguntó eso... ¡JESÚS MARÍA Y JOSÉ! 💕

Me costó escribir este capítulo, más que nada porque tampoco sabía cómo detallar la parte del beso... ¡me encantó, en serio! Espero que a vosotras también... Ya era hora de que tuviesen un beso como Dios manda, y aquí lo tenéis.

He decidido (no sé porqué) que en esta historia habrá dos capítulos especiales. ¡Este es el primero! El segundo será (lo adelanto ya para que lo sepáis y no esperéis como tontas) el último. Un poco absurdo, porque los últimos capítulos siempre son loa especiales, pero bueh.

Adelanto: ¡sorpresas y disgustos vienen! 😏

Comentad lo que os haya parecido💕.

Hannah is out.

Aaron #TeenAwards2017 ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora