Una noche, se encontraba celebrando juntos con sus amigos su cumpleaños numero 26, como era habitual, se encontraba con sus plásticos amigos en una estruendosa fiesta, cualquier excusa era suficiente como para armar escándalo como aquel, para Diego, no era nada nuevo. Pero esa noche, lejos de su cotidiana jovialidad y despreocupación por la vida, se le notaba pensativo, casi ido, parecía no disfrutar la noche como siempre lo hacia. Sus amigos ni siquiera lo notaron, y mientras se encontraba cavilando con la mirada perdida en el espacio, una chica se le acerco y le susurró al oído: “sopla las velas y pide un deseo”; Diego, sin ver atrás, se levanto de la silla donde se encontraba, soplo las velas y en su mente, pidió su deseo: juventud eterna. Hecho esto, sus amigos comenzaron en un frenesí fiestero, cada uno ocupándose de lo propio. El licor fluía por montones, el humo de los cigarrillos enturbiaba el aire que se encontraba ya denso por la bulliciosa noche. Todos habían dejado de lado al festejado, cada uno ocupado en buscar la conquista de la noche.
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Juventud
HorrorEs solo una historia de terror. _____________________________ #324 Terror Todos los derechos reservados