No lo saben

Terapia Intensiva

Bursakoff POV

Me está costando mucho respirar gracias a un dolor atroz. Por lo que me han dicho llevo acá sólo un día y ya tengo ganas de volar este edificio a la mierda aunque tenga que ser con migo en su interior.

Si hay algo de lo que estoy seguro es que me encuentro retenido en el VI regimiento, cuyas instalaciones conozco como la palma de mi mano. Al parecer, la custodia es fuertísima y no hubo intentos de rescate de ninguna clase. O al menos esto me ha dicho Praga, que ocupa gran parte de su tiempo aquí torturándome. Espero sinceramente tenga la intención de amedrentarme y sean puras mentiras pero lamentablemente siempre habla enserio y no se arriesga a apostar palabras que podría perder. Igual debí suponerlo. Luego de los combates deben estar reordenando aquel caos que perturbó el frágil equilibrio del Paraejército, y mi rescate debe ser la última en la lista de prioridades. Pero debo admitir quisiera no fuese así.

Sigo colgando del techo, sintiendo como mis muñecas sangran debido a la forma en que las esposas rasgaron la piel, y en mis tobillos se narra la misma historia. Adornan mi cuerpo ahora semidesnudo múltiples quemaduras de cigarrillo, moretones, tajos, laseraciones y sangre a medio coagular deslizándose. Las heridas que poseen una gran extensión de carne al descubierto son las preferidas para causarme a través de ellas dolor, echándoles alcohol, limón y sal. Tengo puñaladas relativamente superficiales en la espalda, brazos y piernas, Y seguro alguna que otra costilla rota. He llegado a perder el sentido por el dolor y la pérdida de sangre, cuyo olor se está tornando nauciabundo.

-¿Cómo estamos?- la completa oscuridad de mi reclusorio se ve completamente alterada al entrar Don "Yo Tomaré Posesión De Usted" apuntando directo a mis ojos con una potentísima linterna

-Con ánimos de arrancarle los dos brazos- Le escupo por enésima vez sin saber si le atiné o no debido a la cantidad de sombras y estrellitas que me nublan la vista producto del encandilamiento reciente.

Elal POV

Deducimos que el paradero de Bursakoff es el regimiento VI. El gran problema es que no damos abasto. Entre reparar los daños que sufrió nuestra estructura, la cantidad de efectivos heridos y en total baja, los numerosos trabajos de espionaje y monitoreo que deben desempeñar los departamentos de inteligencia y comunicaciones, nuestra urgencia de dejar todo listo para el inicio de los combates y el hecho de que los nexos que unen el Paraejército con el VI regimiento se encuentran en enemistad con el mismo hacen imposible la realización de un plan eficiente que levante las menores sospechas, guarde discreción y ponga en menor riesgo posible los efectivos y la organización.

Nunca fuí de esos que dejaron camaradas abandonados a su suerte en situaciones críticas. Pero es que no tengo opción. Está a punto de romperse el delicado equilibrio político-militar existente aquí, y necesitamos estar listos para cuando eso suceda. Nos hace falta tiempo. Tiempo que si atacamos el regimiento en rescate de Karolek, no tendremos.

Aguantá otro poco, Ruso. Te prometo que tu deceso, en caso de suceder, y el de Versaglieri serán vengados.

Bursakoff POV

Usted es un atrevido, señor. Yo le enseñaré de respeto a los superiores- Dejó la linterna a un lado y trajo desde el humbral un pequeño balde con trapos encima y una cinta de embalar. Ya sé lo que esto significa, y frunzo el rostro esperándolo. Separa un trozo de cinta y se acerca más de lo prudente extendiéndolo frente a mis labios-No. Hoy voy a escucharle cantar... En primera por reusarse a contestar mis preguntas. En segunda, por mentir sobre la pertenencia de Stella Sayd, Cuya casa será asediada en breve, y mi hijo a su fábrica loca de tagarnas- Pegó el objeto con que me amordazaría en la única prenda que llevo puesta, seguro para dejársela a mano. Saca de uno de sus bolsillos una navaja para trazar con ella nuevos tajos y heridas, abriendo también algunas que ya están a medio cerrar.