Noche Tentadora {Larry Stylinson}

FINAL

-Tú sólo tienes miedo a la oscuridad –dijo él.

-Eso no es verdad. Me asusta muchísimo no ser capaz de convencerte. Tengo tanto miedo de perderte que estoy temblando por dentro.

-¿Y crees que eso sería tan malo?

-Mucho peor que estar solo en la oscuridad. ¿Dónde voy a encontrar a otro hombre que adore este trasero? -sonrió, pero enseguida se puso serio -.Te estoy desnudando mi alma, Louis. Sal al alféizar conmigo.

Poco a poco lo convencía, lo hacía creer. Había algo de mágico en él porque Louis empezaba a pensar que quizá podía amarlo después de todo. Harry se había aventurado en la oscuridad con él y sólo le había pedido que le apretara la mano. Y ahora le pedía lo mismo. Louis sintió que el vacío oscuro que siempre llevaba dentro empezaba a cerrarse.

Tomó la mano de Harry y se la llevó a los labios.

-Me quieres de verdad, ¿no? -preguntó, maravillado.

Harry le sonrió como si acabara de darle la luna.

-Ya te lo he dicho.

Louis lo sentó en su regazo y él se abrazó a su cuello.

-Te quiero -dijo él-. Lo besó con ternura-. Te quiero -repitió.

Le sentaba bien decirlo y sonaba tan terrorífico como había pensado. Lo besó de nuevo, esa vez con pasión.

Cuando se apartaron para respirar, él frotó su erección en el delicioso trasero de Harry. Sólo un beso y ya estaba excitado. Y antes de entregarse al placer, quería saber una respuesta.

-Tengo una pregunta -dijo-. ¿De dónde has sacado esa foto?

-Me la ha dado Zayn - le mordisqueó el cuello-. Deberías mirar mi ropa interior, creo que te gustará.

Louis deslizó una mano dentro del pantalón de Harry.

-¿Zayn hizo esa foto? -esperaba encontrarse un tanga o encaje, pero sus dedos tocaron piel caliente y húmeda rodeada de encaje-. ¡Oh, qué interesante! -recorrió con un dedo el húmedo trasero de Harry, que el encaje dejaba al descubierto.

-Con agujero. He venido armado para la batalla -sonrió. Le lamió el labio inferior con la punta de la lengua-. La foto es de Liam.

Louis le bajo los pantalones y descubrió unas bragas negras con un agujero en el trasero.

-O sea que Zayn se ha chivado.

Harry se echó a reír y separó las piernas.

-Sí. Ha sido él.

Louis deslizó un dedo en su ano y Harry lanzó un gemido que lo excitó todavía más.

-Me encanta que hagas esos ruidos. Me pones el pene muy duro.

-Y a mí me encanta que hables así y me toques así. Haces que me moje. Pero eso ya lo sabes.

Sí. Eso lo sabía.

-Recuérdame que le dé las gracias a Zayn más tarde. Mucho más tarde. La semana que viene, por ejemplo. En este momento tengo que cumplir una promesa.