Capítulo 58 : El Vestido

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Se despidieron de sus amigos y se encaminaron a su habitación.
No hubo una palabra en todo el camino hasta que cerraron la.puerta detrás de ellos.

-Piensas explicarme que hacías jugando a la heroe otra vez?!

-No jugaba a la héroe. Alya quiso que la acompañe, no podía decirle que no...Además tu también saliste a patrullar.

-Pero yo no soy el embarazado. Si algo me pasará...

-Exacto! Si algo te pasara que tendría que hacer yo? Llorar? Ser miserable por el hecho de que no me tenías ahí para cuidarte la espalda? -Se acercó y tocó su mejilla- Si algo te sucede no lo podría superar.

Él apoyo una mano sobre la de ella, que se posaba en su mejilla, y la apretó.

-No puedo dejar que te pongas en riesgo nuevamente.

-Entonces espera conmigo- la miro confundido- Esperemos a que el bebé nazca y luego volvemos a ser ChatNoir y Ladybug.

-Y quien se supone que proteja la ciudad?

-Acabamos de darles miraculous a nuestros amigos! Acaso no confías en ellos?

-Si, pero...

-Adrien, si tu no dejas de ser ChatNoir yo no puedo dejar de ser Ladybug.

El suspiro resignado y deshizo su transformación.

-Esta bien, no seré Chat hasta después del nacimiento. -La chica sonrió orgullosa- Pero prometeme por todo lo que ames en tu vida que no vas a ser Ladybug.

-Eso dalo por seguro.

(...)

La mañana era cálida y perfectamente soleada, faltaba sólo un día para la boda.
Marinette se encontraba en el sofá, con un cuaderno, dibujando algunos modelos para la próxima temporada cuando la voz firme del Agreste mayor la sobresalto. Aún no podía mirarlo si recordar la charla de las flores y las abejas...

-Me alegra saber que después de todo sigues trabajando- no había notado que estaba detrás de ella con los brazos cruzados tras la espalda- Pero ahora te necesito para otra cosa.

-A mi?

-Si, ya se que dije que no podrías ver el vestido hasta la boda pero considerando el embarazo y que tome tus medidas hace casi un mes necesito ver si calcule bien cuánto iba a crecer tu vientre.

-Puedo verlo?! -pregunto emocionada.

-Serán unos segundos, pero si.

Ella se levantó casi de un salto y siguió a Gabriel hasta la oficina improvisada que había armado allí. Dentro se encontraba se esposa sentada en un gran sillón sonriendo.
Al entrar, el padre de su novio cerró la puerta dejándolos a solas a los tres.

-No se porque siento que es ese tipo de momentos en el que me están por moler a palos por casarme con su hijo...

Por primera vez vio reír, o algo así, a Gabriel. Fue más una semi sonrisa mientras negaba con la cabeza.

-No podría pedir mejor mujer para Adrien. -Dijo el rubio sonriendo.

-Se que eres una buena chica y entre nos...me agrada tu actitud -Agregó por lo bajo su esposa.

-Bien, no divagemos más- llamó la atención- Entra en el vestidor, el vestido se encuentra allí.

Ella no espero ni un minuto más y se metió como un rayo.

Decir que casi se desmaya era poco decir, se le comenzaron a escapar unas lágrimas y se llevó las manos a la boca.

Se suponía que iba a ser un vestido sencillo pero lo que tenía delante era justamente lo opuesto. Era un vestido corte sirena que se ensanchaba bastante al final dándole una gran cola , con espalda descubierta, y unas mangas de encaje que tenía hermosas mariposas blancas al igual que todo el vestido.

Se lo puso y por un momento le dio miedo salir del vestidor y verse al espejo. Tal vez le quedaba demasiado ajustado y la hacia ver gorda, tal vez la gente se riera al verla como una ballena vestida de blanco. Se quedó ahí, con la mano en la perilla pensando si salir o no hasta que unos golpes en la puerta la distrajeron.

-Marinette? Necesitas ayuda? -la suave voz de la Sra. Agreste le dio un poco de confianza.

Abrió la puerta encontrándose con los padres del futuro novio junto a los de ella.

-Les dije que te ibas a probar el vestido, tal vez querías que ellos estuvieran aquí- Dijo sonriendo. -Si yo hubiera tenido una hija no me habría gustado perderme esto. -la rubia le acomodó un mechón mientras miraba el vestido con una gran sonrisa.

-Ay Marinette! -Exclamó su madre abrazandola- Estas hermosa.

Su padre trató de decir algo pero había comenzado a llorar y lo único que pudo hacer sólo fue abrazarla también.

-Gracias Sr. Agreste- Dijo en cuanto sus padres la soltaron- El vestido es muy hermoso.

-Por favor, dime Gabriel...creo que si vamos a ser familia dejemos las formalidades para otros. -la inspeccionaba con la mirada buscando algo que retocar, arreglar o ajustar mientras hablaba.

-Es realmente hermoso pero no se si debiste hacerlo tan ajustado, siento que voy a ser una albóndiga. -Se removió incómoda frente a las cuatro miradas.

-A que te refieres? -pregunto incrédulo.

-Al embarazo...

-Ay hija, apenas se nota tu vientre- Respondió su madre riendo- Es común en primerizas. Cuando estaba embarazada de ti apenas se notaba.

-Esperemos que no salga igualito a Adrien- Agregó la Sra. Agreste riendo -Era demasiado cabezón, el parto duro horas.

Marinette comenzó a sentir pánico. Y si su bebé era cabezón y la hacía sufrir durante tanto? El dolor del parto es algo que la aterraba.

Gabriel sonrió nuevamente y se acercó a la peliazul.

-Mejor mirate tú misma.

La llevó hasta el gran espejo donde por fin vio unos ojos azules de gran tamaño mirándola con sorpresa, estaba viendo su propio reflejo.
Le quedaba perfecto, aunque se pusiera de costado el vientre no se veía tan grande como lo sentía. Suspiro aliviada al ver que parecía una novia apta para un modelo, aunque a él joven no le importará como se viera, la amaba de todas formas.

-Wow...es...esta...es muy hermoso.

-Me alegro que te guste. Quédate quieta unos minutos- Sintió como pasaba unos alfileres en la espalda y en la falda. -Quitatelo y no le digas ni una palabra a nadie del diseño. Sería como que revelaran tu colección antes del desfile.

Ella asintió y se lo saco con tristeza, quería llevarlo puesto durante horas. Se lo alcanzó al rubio y fue expulsada de la habitación donde los padre hablaban.

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Hoolus, hace rato que no les hablo y queria desearles un buen año nuevo. Como ya estamos llegando al final no me queda más que decirles gracias por todos los votos, comentarios o simplemente leer. Me ayudaron muchísimo y me alentó a seguir escribiendo aunque fuera para tres gatos locos.

Ahora paso a explicar como se vamos a desarrollar lodo próximos capítulos; no van a ser continuos, osea voy a tratar de centrarme en lo más importante como la boda, el nacimiento y a lo mejor la boda de Alya y Nino. Ya después veré, hasta el rato.

Como los viejos tiempos - Adrinette [TERMINADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora