02
La mañana siguiente desperté con una maldita resaca, el dolor de cabeza me estaba matando y prácticamente me arrastre a la cocina para buscar una pastilla. Mientras esperaba que esa maravilla hecha píldora hiciera efecto me metí a bañar.
Me sentía de lo peor y no todo era culpa del alcohol, aunque bueno, en parte sí porque de no haber estado ebria, jamás me hubiera acercado a él de esa forma. Juro que maldecía no ser de esas personas que no recuerdan nada de lo que hicieron estando alcoholizados, porque yo me acordaba de todo, hasta de cómo me acompañó en taxi a mi casa para según él, "quedarse tranquilo de que llegara sana y salva".
Lo bueno de esto era que no sabía ni su nombre y que no lo volvería a ver jamás, porque gracias a dios, en unas horas regresaba a Los Ángeles y no volvería a pisar Nueva York, al menos hasta las vacaciones de navidad.
***
Mamá me recogió en el aeropuerto y de camino a casa comenzó el interrogatorio -¿Cómo te fue cariño?-
-muy bien, siempre es bueno ver a papá- respondí sin ánimos, de verdad detestaba esto.
-¿y qué hicieron por tu cumpleaños?-
Rodé mis ojos, aquí vamos de nuevo – comimos juntos y en la noche me llevo a ver el Rey León y a cenar con mis abuelos en ese pequeño restaurante italiano que tanto me gusta-
La oí reír -no sé porque sigo creyendo que tu padre cambiará algún día-
-mamá...- me molestaban mucho esos comentarios.
-Lo sé Selena- dijo - sabes que, mejor no hablemos de tu padre y déjame contarte los planes que tengo para celebrar tu cumpleaños- suspire con pesadez -primero almorzaremos con tus abuelos, tu tía y su esposo-
¿Esposo?
Acaso oí bien -espera- ella me miro -hubo una boda y no fui invitada- dije indignada.
-en teoría sí, pero yo tampoco fui invitada la primera vez- ella rió.
-podrías explicarme, porque no te estoy entendiendo-
-Halle se casó en las Vegas hace unos meses y cuando me dio la noticia no podía creerlo, me enoje mucho con ella por no habérmelo dicho y tuvimos que planear una segunda ceremonia para tus abuelos-
-es un poco extraño pero me alegro por ella-
-Fue muy afortunada de encontrar un hombre como él, es una muy buena persona, ya lo conocerás- calló -ahora volviendo a mis planes, almorzaremos todos juntos y tengo una sorpresa para esta noche-
Me alegro por ella, sinceramente pienso que ese hombre debe amarla demasiado porque mi tía Halle no es una mujer fácil de tratar. Tiene 35 años, es hermosa y muy sofisticada, pero tiene un enorme defecto, que es poner a su trabajo antes que cualquier otra cosa.
No discuto que es una gran profesional, apasionada por lo que hace, una mujer independiente que ha conseguido logros enormes, pero es tan obsesiva que de lo único que habla es de trabajo, trabajo y más trabajo. Es por eso que tengo curiosidad por conocer a su maravilloso esposo, de enormes virtudes y fabulosas cualidades de las que tanto me habló mi madre, prácticamente se la pasó hablando de mi nuevo tío y de los planes por mi cumpleaños.
Cuando por fin llegamos me fui a bañar y busque "algo bonito" en palabras de mamá, que usar. Escogí un vestido, no tengo nada en contra de los vestidos, me parecen muy lindos y femeninos pero no los uso casi nunca a pesar de que mi madre gasta mucho dinero en ellos. Supongo que está bien darle el gusto de vez en cuando.
Caminaba hacia la cocina cuando oí el timbre sonar -cariño, puedes abrir-
Pensé que seguramente sería mi tía, pero al abrir la puerta me encontré con él, con mi mejor amigo.
-te extrañe tanto- grité, arrojándome a sus brazos.
-yo también pequeña-
-te ves tan bien- miré sus bonitos ojos color avellana -no puedo creer que te cortaste el cabello, me gusta tanto-
-a todas las chicas les gusta- él y ese tono egocéntrico, creyéndose el centro del universo.
Gruñí -idiota- le di un golpe en el brazo.
-pero la opinión que más me importa es la tuya-
-odio que me digas lo que quiero escuchar- lo regañe -eres un manipulador-
-tal vez- agregó -pero linda- tocó la punta de mi nariz -tu amas a este manipulador-
-puede ser, pero soy la única que no se deja engañar por tus palabras- dije en tono burlón.
-golpe bajo- fingió estar dolido, haciéndome reír -eso dolió mucho- se hacía el ofendido -de todas formas, sabes que jamás te lastimaría-
-lo sé Joe- tomé su mano y lo guíe para sentarnos en el cordón de la vereda, como lo hacíamos siempre.
-Y cuéntame, qué tal las vacaciones-
-sabes que disfruto mucho pasar tiempo con papá-
-me alegra, se te veía muy feliz en las fotos que me enviaste-
-es que todo es tan distinto con él- dije con tristeza -mi vida sería mucho mejor si ellos estuvieran juntos- simplemente me costaba asimilar el divorcio a pesar de que hubieran pasado varios años.
Sentí sus brazos rodear mi cuerpo -yo se que es difícil aceptarlo y que todavía te duele- beso rápidamente mi cabeza -pero ellos creyeron que era lo mejor para ti, además no es sano vivir discutiendo todo el tiempo- aunque me costara aceptarlo Joe tenía razón, ellos nunca se llevaron bien y de lo poco que recuerdo la situación era insostenible, fue lo mejor.
-además ve el lado positivo... viniste aquí y nos conocimos y sabes que no puedes vivir sin mí- su comentario me hizo reír, lo amaba porque siempre sabía cómo sacarme una sonrisa.
-que voy a hacer contigo Joe centro del universo Jonas- lo oí reír.
-no me dejes nunca... sólo eso-
-eso nunca, voy a estar en tu vida siempre- lo abracé con fuerza.
-eso espero pequeña- volví a sentir sus labios en mi coronilla.
-gracias por todo-
El sonido de un automóvil nos hizo separarnos, nunca antes lo había visto, pero al ver bajar a mi tía supe que había llegado el momento de conocer al maravilloso y virtuoso de mi nuevo tío.
Joe y yo nos pusimos de pie y luego de recibir un abrazo y una felicitación de cumpleaños, alce mi vista.
¡Mierda!
ESTÁS LEYENDO
No puedo amar a mi tío [Jelena]
FanfictionMe enamore del dios griego que tiene mi tía por esposo.