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-gracias por la cena- íbamos saliendo del bonito restaurante italiano.

-gracias por dejarme pagar- rió -te juro que creí que me ganarías y sacarías el dinero antes que yo-

Le di un leve golpe en el brazo -no soy así-

-si lo eres- agregó mirándome tiernamente.

Al salir, buscamos al chico del valet parking que había estacionado su auto y fue cuando oí que decían su nombre -¡Justin!-

-Hailey, hola- yo estaba parada frente a él y la bonita mujer a su lado. Cuando mencionó su nombre se dibujó una amplia sonrisa en su rostro.

Se dieron un corto abrazo -¿cómo estas?-

-muy bien ¿y tú?- respondió él.

-feliz- ella es bonita, delgada un poco más baja que él, de cabello rubio y recogido en una perfecta cola de caballo. De facciones finas, enormes ojos color caramelo, nariz respingada y labios anchos.

Yo seguía al margen de esa conversación, él no me había presentado y sinceramente desde que Hailey llegó, desaparecí.

-Hails- lo miró fijo -ella es Selena- extendió su brazo, apoyando su mano delicadamente en mi espalda baja.

-¿es tu esposa?- preguntó -supe que te casaste, muchas felicidades- se abalanzó sobre nosotros abrazándonos -ya era hora que sentarás cabeza- bromeó -soy Hailey Dallas- extendió su mano para estrecharla con la mía -aunque supongo que ya lo sabes porque escuchaste a Justin llamarme hace un momento- sonrió -eres muy hermosa- agregó -estoy muy feliz por ti Justin, y Selena tienes a un gran hombre a tu lado-

Era una situación extraña porque aparentemente ellos eran amigos por la familiaridad y el cariño con el que se miraban, pero ¿por qué ella no sabía que él estaba casado con otra mujer que no era yo? No es que me molestara, porque tengo que admitir que la idea de que semejante hombre fuera mi esposo no me desagradaba en lo absoluto, al contrario, yo sería inmensamente feliz.

-¿con qué Hailey Dallas?- preguntó mi falso esposo, en tono juguetón.

Me había quedado sorprendida, él ni siquiera le explicó que yo no era su esposa.

-si, desde hace un año mi apellido es Dallas- sonrió ampliamente.

-creo que Hailey Bieber suena mejor- bromeó.

¿Qué? ¿Cómo que Hailey Bieber? ¿Ellos fueron novios?

Frunció el ceño y negó con su cabeza -no, Dallas se escucha mejor- bromeó.

-dejemoslo como Hailey Baldwin-

-me parece justo- afirmó la rubia.

-así que te casaste- lo oí suspirar -me alegro, te deseo que seas muy feliz-

-lo soy- respondió -mira quién viene aquí- el hombre de cabello castaño claro, tez blanca y hermosos ojos caramelo se paró a su lado, ella lo abrazó de lado -cariño él es Justin y su esposa Selena-

-hola, soy Cameron Dallas- me sonrió, mostrándome una perfecta y armoniosa sonrisa -hola Justin-

-hola- saludamos al unísono.

-¿nos vamos cariño?- preguntó ella y su esposo asintió -fue bueno verte- dijo mirando a Justin, sus ojos se conectaron por un segundo y sonrieron -y un placer conocerte Selena-

-adiós Hails- beso su mejilla y luego estrechó su mano con la de su esposo -nos vemos Cameron-

-nos vemos, que estén muy bien- habló él y luego tomó la mano de la rubia.

-adiós y gusto en conocerlos- finalice el incómodo momento.

Caminamos un poco en silencio -ellos parecen agradables-

-Hailey lo es y supongo que su esposo también- se encogió de hombros.

-fue un momento un poco incómodo, ellos creen que tu y yo… estamos casados- lo dije con un poco de tristeza.

-si, sobre eso- rasco su nuca -espero que no te moleste, ella es un poco impulsiva y cuando tenga la oportunidad le diré la verdad-

-oh, si esta bien- musité -¿ustedes fueron novios?- pregunté de una vez, para qué iba a estar dando vueltas ¿éramos amigos o no? Y los amigos se cuentan cosas ¿o no?

Él me observó -si, salimos hace unos años-

-¿y aún la amas?- la forma en la que la miraba y como se iluminaron sus ojos cuando oyó su voz, me llamaron la atención, era la primera vez que lo veía reaccionar así, ni siquiera con mi tía lo hacía.

-la ame mucho y la voy a amar siempre por lo que significó en mi vida, pero hoy es un amor distinto... siempre deseé que fuera feliz y me alegra que lo sea-

-¿y por qué se separaron?- al parecer no le molestaba hablar sobre ella y yo sentía mucha curiosidad, era una forma de conocerlo de saber sobre su pasado.

-fueron muchas cosas, empezamos a salir desde muy jóvenes y tuvimos una relación larga pero al final íbamos y volvíamos. La relación se había desgastado, habíamos crecido y cometimos algunas tonterías, nos hacíamos mucho daño y decidimos que fue lo mejor- hablo -luego salí con varias mujeres en estos años, pero nada serio hasta que conocí a tu tía, y bueno ya sabes… nos casamos- eso me dolió, fue mi tía la mujer con la que él logró tener algo serio después de Hailey.

Ambos nos quedamos en silencio, hasta que él decidió romperlo-ya hablamos mucho de mí, porqué no me cuentas algo de ti-

-¿qué quieres saber?-

-¿tienes novio?- sonó interesado o me pareció a mi.

-no, yo no tengo novio-

-¿y qué hay de ti y Joe?-

Reí de solo imaginarlo -no, nosotros sólo somos amigos… en realidad tuvimos una relación cuando aún íbamos a la escuela, fue mi cita en la graduación- sonreí -pero meses después terminamos, creo que no funcionamos como novios.

No puedo amar a mi tío [Jelena]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora