- Amor, entiende, esto es por el bien de Kyuhyun – dijo su madre. La miré, sabiendo que aunque lo que más quisiera era volver a ver a Kyu cantar, preferible era aunque sea verlo. Incluso aunque fuera sólo una vez.
- Exacto, nuestro hijo va a vivir. Te lo prometo – contestó. Yo no había pronunciado palabra alguna en vario rato.
- Pero... -
- Mira, Kyuhyun hubiera estado de mi lado – la señora Cho asintió. Pero hay algo que no me cuadra, Kyuhyun una vez me dijo que su padre se oponía a su carrera de cantante... Entonces... eso significa que.... Wow. Yo quiero un papi así.
- Entiendo lo que quiere decir – dijo por fin el doctor. Apuesto a que nadie recordaba su presencia en la discusión. – Señor Cho, yo le prometo, hacer todo lo posible por salvar a su hijo del todo. Buscaré la operación perfecta para él. Le prometo que la primera canción que cante su hijo, será para usted – una lágrima resbaló por mi mejilla, al tiempo que sentía unos cálidos brazos en mi cuerpo, la Señora Cho, quien me apretó con fuerza, tratando de trasmitir paz, y quizá un poco de seguridad.
Pero eso para mí no era suficiente. No del todo. Yo sólo quería "ese" par de brazos.Todo estaba siendo demasiado difícil en estos momentos, no podía hacer tantas cosas por mí misma al tiempo.
Mi celular comenzó a sonar. Miré la pantalla: Hanna.- Hola – dije al contestar. Hubo un silencio. Uno de esos que son realmente incomodo. Realmente incomodo. – Hanna, di algo. No puedes quedarte muda por siempre - .
De pronto sentí unas manos en mis hombros. La llamada había terminado.
- La verdad es que ni siquiera tengo ánimos para una broma – me dijo Hanna. Bueno, al menos ella sólo no tienes ánimos para bromas. Yo no tengo ánimos para nada. Es más, ni siquiera me molesté en contestar. Ella asintió. Caminó para rodear la banca, y se sentó a mi lado. Luego me rodeó con sus brazos. No hacía falta decir nada.
Las lágrimas llegaron solas. Ella sólo se limitó a decir "Lo sé Min, sácalo todo". Esas palabras me daban tanto aliento como para morirme en sus brazos. Sin ofender.
El sentir el dolor no era suficiente.El teléfono de Hanna comenzó a sonar. Ella habló unos minutos, y cuando terminó ni siquiera me molesté en preguntar, ya sabía lo que esto significaba. Ella tenía que irse. Incluso me imaginaba la forma en ella me lo diría... "Min, sabes que cuentas conmigo para lo que sea, dime que estarás bien... ¿lo estarás verdad?.... enserio lo siento.... Te quiero, llámame si necesitas algo". Y yo, simplemente asentiría.
Sin embargo, eso nunca pasó.- Min, debemos ir al juzgado – abrí los ojos como platos.
- ¿Qué? – ella suspiró, nerviosa.
- Hankyung necesita tu declaración – me paré rápidamente y me dirigí a la señora Cho. No tenía ni la menor idea de lo que iba a decir cuando ya estaba caminando en su dirección, al lugar donde ella se encontraba sentada, conversando con su marido. Su mirada estaba realmente atemorizada.
- Señora Cho – ella me miró – Yo... bueno... Hannie... -
- Ve hija, está bien – asentí, hice reverencia y me di la media vuelta. Tenía que apurarme si quería regresar a tiempo esta noche al hospital para escuchar el veredicto del doctor. Esto era cuestión de todo o nada.
Caminé rápidamente hacia Hanna, dejaríamos mi coche aquí y nos iríamos en el de ella hacia el juzgado. Luego haría mi declaración y regresaría aquí, a tiempo para escuchar al doctor y ver a Kyu por última vez antes de la operación.
El trayecto fue silencioso. Muy silencioso. Todo lo que pasaba en estos momentos era una completa cadena de desgracias.
Llegamos. Cuando bajé del auto sentía mis nervios de punta y la piel de gallina, sólo constaba de unos cuantos pasos antes de cruzar esa gran puerta negra que me conduciría al interrogatorio. El ambiente se volvía denso. La pesadez de la situación me provocaba nauseas. De pronto, me costaba respirar......................................_______________.................................................
Hannie se encontraba sentado en la parte trasera del jardín del juzgado, en completo silencio. Verlo así me provocaba unas intensas ganas de llorar. Y no solo lágrimas, sino un mar completo. Me acerqué a él y me senté a su lado. Con un brazo rodeé su cuello, y él acostó su cabeza en mi hombro.
- Te llevaré al hospital, ¿vale? – pronunció casi inaudible. Sonreí, sin duda una demanda no iba a cambiarlo ¿cierto? Incluso parecía ser más madura de lo que ya era.
- ¿Eso es todo Hannie? – él levantó la cabeza y me miró.
- Lo siento – asentí. – Y no –
Ya sabía que eso no era todo, en estos momentos ambos temblábamos. Me tomó de las manos. Una lágrima resbaló por su mejilla.
- Empieza – me miró.
- No has aceptado mi disculpa – asentí.
- Te perdono Hannie, y lo sabes – el beso mis nudillos. Me sonrojé.
- Gracias – lo miré – Bueno, verás.... Abandonaré Super Junior - .
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VOLVER A MI - Cho Kyuhyun
Fanfiction¿Qué pensarías si pareciese que el destino planea una cosa y hace todo lo posible por que pase otra? ¿Que dirías tu si yo te dijera que el amor de tu vida primero lucha con su pasado, y de un momento a otro lucha por sobrevivir tirado en una cama de...