Capítulo 5

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- holaaa -dijo Agus entrando con su perrita Mara en brazos

- holaaa!!! -dije con ternura acercándome para darle un beso a la perrita.

- ah y a mi nada no?

Le di un beso en el cachete y seguí acariciando a Mara

- que linda es! -dije

Agustín la dejó en el piso y saludó a la coach. Mara en seguida se acercó a mí mirándome y moviéndome la cola como pidiéndome que la levantara. Obviamente la tomé en mis brazos y deje que me diera besos en la cara.

- bueno parece que le caes bien.

- obvio por qué no le caería bien?

- perdón que no pregunté si podía traerla pero ella es re tranquila, no va a molestar -le dijo a la coach.

- no hay problema.Un dia yo voy a traer a mi hija también - respondió la coach

Seguí con Mara a upa mientras Agus se preparaba para ensayar y después se la di y el la acostó encima de su campera en un rincón. Desde ahí nos miraba por momentos pero no se movió. Cuando hicimos nuestro recreito habitual me puse a jugar con Mara, me acosté en el piso y ella me saltaba encima, me mordisqueaba las manos y hasta me tiraba del pelo.

- Mara! La vas adejar pelada -decía Agus riendo

- me hace acordar a mi perrito, me hacía lo mismo cuando era más cachorrito -dije como podía mientras Mara me saltaba por encima.

- no suele jugar así con nadie, sólo conmigo.

- sabe reconocer a las buenas personas -dije mientras trataba de sentarme.

- Marita!!! -la llamó la coach
Mara la miró y siguió corriendo alrededor mío

- a mi ni bola me da.

- a mi tampoco, Mara dale bola a tu padre también.

- no, ya esta. Ahora es mía -dije agarrándola mientras ella seguía jugando con mi pelo.

- Mara de quien sos?-le dijo acercándole la cara y ella le dio un beso- muy bien, esa es mi nena.

- si yo no fuera igual con mi perrito diría que estas loco -reí mientras la soltaba para que fuera con él- la próxima vez que la traigas avisame y traigo a Simón también

- van a hacer una guardería de perros acá -dijo Roxana

- sino traelo a casa algún día así Mara tiene amiguitos para jugar -reimos por como lo dijo, sonó como si hablara de una nena de verdad

- no se quedan en un hotel Agus? -preguntó la coach

- no, la producción nos pagaba el hotel pero preferimos cambiarlo por una casa para estar más tranquilos y además cuando vienen los chicos de la banda se quedan con nosotros. Pasamos mucho tiempo aca y vivir en hoteles todo el tiempo es estresante y sumado a todo el estrés que de por sí conlleva esto.

- si, entiendo. Mientras las fans no lo averiguen

- claro, en el hotel tarde o temprano iban a averiguarlo y por más que me encanta todo el cariño y el esfuerzo de venir a vernos, necesitamos descansar y me pone mal también verlas ahí toda la noche esperando y a veces no nos dejan salir. Pero la casa que alquilamos esta como en un barrio cerrado osea no como los countries y eso, sino que son un par de manzanas que no tienen acceso al público y hay seguridad en la puerta... si, es como un mini barrio privado.

- ok ahora decí la verdad, querían llevar todas las chicas que quisieran sin que nadie se enterara, ese es el verdadero motivo -dije

- que? -dijo riéndose- no no... no lo había pensado.

- seguro fue idea de Fernando -dije revoleando los ojos

- por qué?! Esa idea que tenés de él -dijo negando con la cabeza divertido.

- bueno chicos vamos a seguir que ya se nos viene el estreno!!

Pasar el día con Mara me hizo extrañar a mi perrito mucho más de lo que ya lo extrañaba, lo necesitaba, ¿cómo lo tratarán mis papás? Yo era la que le daba amor, ellos sólo pagaban los gastos.
Decidí ir a buscarlo, voy a ir en un horario en el que estoy segura que mis padres no van a estar y lo voy a traer conmigo. Stefi ya lo aceptó, la verdad es demasiado pedirle con lo que ya esta haciendo por mí pero no puedo estar más sin Simón y en cuanto pueda voy a buscar un lugar donde quedarme y dejar a Stefi tranquila. Ella me llevó hasta mi antigua casa, entramos sin hacer ruido. Efectivamente, no habia nadie. Llamé a Simón y enseguida apareció corriendo alocado y emocionado a recibirme. Lo agarré a upa y lo llené de besos, lo tuve así un minuto ya que quería salir de allí lo antes posible. Tomé sus cosas y más cosas mías, quería llevarme lo más que pudiera para no tener que volver pero ya tenía lo más importante conmigo que era Simón. Les dejé una nota a mis padres avisando que me lo había llevado, no sé si les importaría pero no quería que se asustaran al no verlo. Stefi me ayudó a llevar todo al auto y nos dirigimos nuevamente a su departamento.

Me enamoré de quien no pensabaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora