Me enamoré de quien no pensaba

Capítulo 52

Organicé el encuentro de Agus con sus amigos. Yo los voy a buscar y llevarlos en un taxi a la casa de Fer y Agus. Aunque Fer insistió en acompañarme  (porque quería estar presente cuando me volviese a ver con Lucas), le pedí que por favor se quedara en la casa para ayudarme con Agus, que lo entretuviese y no dejara por ningún motivo que se fuera a ningún lugar.

Al encontrarme con los chicos, Rodrigo fue el primero que me saludó con una sonrisa y un abrazo. Luego Mateo me dijo- como estas Mica! -con su imborrable sonrisa y un beso en la mejilla acompañado de un abrazo más breve. Por último, Lucas se acercó. Hasta ese momento no recordaba su sonrisa seductora y esa mirada que derrite. Me tomó de la nuca con una mano y me acercó a él dándome un lento beso en la mejilla. Me hizo sentir incómoda y un poco nerviosa pero lo dejé pasar porque quise concentrarme en Agus. En el camino nos la pasamos hablando de nuestro amigo en común.
Cuando llegamos a la casa, Fer nos estaba esperando en el living, saludó a todos con un choque de manos y un beso aunque el intercambio con Lucas estuvo cargado de miradas desafiantes de ambas partes. Agus estaba en su habitación así que fue más facil entrar. Subimos al piso de arriba y ellos se quedaron en la escalera mientras yo me dirigí a la puerta de Agus. Golpeé y él abrió rápido.
- Mica -dijo sorprendido- pasó algo?
- necesito que vengas un minuto -le dije y lo tomé de la mano para que diera un paso fuera de su habitación y enseguida, los chicos salieron de su escondite gritando y dirigiendose directo a Agus.
La cara que puso fue impagable, estaba sorprendido, confundido y alegre. Sentí que hice la mejor elección, me sentí llena y feliz solo de ver su expresión.
- qué hacen acá?! -preguntó Agus con una enorme sonrisa
- todos sabemos que nos necesitas y no podes vivir sin nosotros -bromeó Mateo- y a tu amiga se le ocurrió llamarnos para darte algo de ánimo y traerte un poco de Uruguay a Argentina
Agus rápidamente me miró con sorpresa y cariño en su mirada.
- en serio Mica? Gracias
- es muy poco comparado con todo lo que haces por mi... me hace bien verte feliz -reafirmé lo que una vez le dije. Sus ojos achinados, por la gran sonrisa en su cara, mostraban el cariño, el agradecimiento y la felicidad que sentía en ese momento.
- vamos al living -propuso volviendo a enfocar la atención en sus recién llegados amigos.
Ellos se pusieron a hablar sentados en los sillones y yo me dirigí a la cocina para preparar el mate. Fer me siguió y se apoyó en la mesada mientras yo agarraba las cosas y calentaba el agua.
- se lo ve contento a Agus -comentó
- sí, me alegro de que haya salido todo bien
- y qué dijeron cuando llegaron? -preguntó luego de unos minutos de silencio y lo miré con el ceño fruncido, claramente no le interesaba eso y no sabía qué preguntar para averiguar sobre mi reencuentro con Lucas. Me dio un poco de ternura su actitud. Sonreí y me acerqué apoyando mi cuerpo en el suyo, él posó sus manos en mi cadera.
Lo besé tiernamente mientras acariciaba su nuca y él apretó mi cadera acercandome más a su cuerpo.
- no tenes que preocuparte por él, siempre me gustaste vos -le dije aún sobre sus labios. Él atrapó mi labio inferior y me besó unos segundos más hasta que el sonido de la pava nos interrumpió. Estampe mis labios contra los suyos una vez más y le sonreí antes de separarme de él. Puse el agua caliente en el termo y después de taparlo, Fer me abrazó por la espalda y comenzó a besar mi cuello. Yo incliné la cabeza para dejarle el camino abierto. Mientras su boca seguia recorriendo mi cuello, sus manos que se hallaban en mi abdomen comenzaron a bajar y a acariciar mi zona erógena. Me moví contra su mano y largué un sonido de placer apenas audible. Me volteé para besarlo y el me subió a la mesada y se colocó entre mis piernas mientras nuestras bocas danzaban desenfrenadamente al unísono. Comenzó a acariciar mis muslos y de repente, un sonido y una voz nos interrumpieron. Separamos nuestros labios manteniendo la posición y ahí estaba Lucas parado en la puerta de la cocina.
- apa! Perdón, no quería interrumpir -dijo con su típica sonrisita y picardía en sus ojos
- no pasa nada -dije dando un saltito para bajar de la mesada- ya ibamos a llevar el termo y el mate
Asintió aún con la misma expresión, Fer lo miraba serio aún con las mejillas rosadas por el calor del momento.
- esta vez estas sobria al menos -comentó como un chiste pero con cierta ironía en su tono
- qué? -pregunté un poco perdida
- la última vez que los vi en una situación parecida estabas totalmente borracha
- si, la fiesta en la casa de Agus -recordé- diría que "como olvidarla" pero de hecho recuerdo muy poco -dije y Lucas rió
- parece que Fer te esta ayudando a recordar
- no hace falta, somos novios. Lo recordamos todos los días -respondió mi novio
- te felicito, lo conseguiste al fin - dijo pero no sonó nada sincero- en algún momento Mica iba a tener que ceder
- necesitabas algo? Algo para tomar? - cambié el tema para evitar malos ratos
- a vos te necesitaba -dijo y me quedé sin saber qué decir- es un chiste -cambió su expresión de aparente seriedad- venía a buscar el mate justamente
- bueno vamos entonces
Empezamos a caminar pero Lucas me agarró del brazo y me frenó
- si queres recordar algo más de ese fin de semana, estoy disponible -me dijo cerca del oido pero en un tono suficientemente alto para que Fer lo escuche.
- gracias pero prefiero vivir el presente -contesté con una sonrisa y tomé a Fer de la mano arrastrandolo conmigo al living. Parece que con estos dos voy a tener que poner un poco de calma porque se miran como si en cualquier momento fueran a empezar una pelea salvaje y los comentarios provocaticos de Lucas no ayudan.
Me quedé en el sillón con la mano de Fer tomando la mía y escuchando la conversación de los chicos mientras reía junto a ellos.