Capítulo 53

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Agus ofreció a los chicos que se quedaran en la casa ya que hay bastante lugar para que se queden. A Fer no se lo vio entusiasmado con la idea pero lo aceptó en silencio. Esa noche me fui a dormir al departamento con Stefi porque preferí dejarlos tranquilos y, además, toda la expectativa, ansiedad y nervios que tuve hasta que Agus se encontró con los chicos, me dejaron agotada y hasta mareada.

Al día siguiente, teníamos que asistir a la sentencia y, seguramente Agus y yo, al duelo. Nos juntamos a ensayar unas horas antes del programa en la productora así que los chicos vinieron con Agus y ya nos quedabamos todos allí para el programa. Obviamente, Fer también nos acompañó. No sé por qué deja que la presencia de Lucas lo altere tanto, no logro que entienda que no hay motivo para que se sienta amenazado por él aunque creo que es en él en quien no confía.
Ensayamos junto a Fer Dente y después me dirigí a las duchas, me bañé y fui a mi camarin. Al entrar, me asusté al ver a alguien sentado en la silla frente al espejo pero luego sonreí al ver que era Fer.
- me asustaste -dije dejando mi bolso en el piso después de cerrar la puerta.
- perdón pero ya te extrañaba.
Me senté en sus piernas y lo besé
- yo también te extrañaba.
Él me acarició la mejilla mientras me observaba.
- todavía falta un rato para que tengamos que prepararnos para el programa -me dijo aún con su pulgar rozando mi mejilla
- si, qué tenes en mente? -le dije con una sonrisa
- que lo aprovechemos -dijo con picardía en su mirada y yo reí
- tenés razón -dije mientras me ponía de pie- podes ayudarme a repasar la coreo -dije para molestarlo. Él se puso de pie y rápidamente me estampó contra la pared y me besó desesperadamente. Se separó de mis labios para sacarse la remera y yo hice lo mismo. Antes de volver a unir nuestros labios, trabó la puerta y yo sonreí sintiendo como un deja vu. Nos deshicimos de nuestra ropa rápidamente pero, antes de quitarse el pantalón, sacó un preservativo de su bolsillo.
- veo que venías preparado -le dije con voz agitada
Él se lo colocó y después con una de mis piernas tocando el piso y la otra a la altura de su cadera, entró en mí embistiendome una y otra vez contra la pared. Fue complicado, en medio de tanto placer, tratar de no hacer mucho ruido. En ese lugar se enteran de todo, venimos ocultandolo bastante bien hasta ahora. Entre gemidos contenidos, jadeos y el sonido del choque de nuestros cuerpos llegamos al orgasmo. Tardamos unos cuantos segundos en separarnos mientras intentabamos recobrar el aliento.
-creo que esto me va a ayudar a ganar el duelo -dije aún cerca de su rostro
- por qué me gustas tanto? Te necesito todo el tiempo -me dijo y yo le sonreí y lo besé- tenemos más tiempo todavia no? -sonreí ante su pregunta
- no tanto... pero a la noche lo compensamos -le susurré al oido y el reaccionó apretandome las nalgas. El corazón se me aceleró y sentí el deseo nuevamente pero el sonido de la puerta nos interrumpió.
- quién es? -pregunté
- Mica! soy Rodrigo
Fer se separó a desgano de mí cuando intenté escaparme de sus brazos.
- espera! -le grité mientras me envolvia en un toallon. Abrí la puerta sólo un poco y me asomé- perdón! Me estaba cambiando -dije mientras miraba a ambos lados chequeando si había mucha gente en la zona
- perdón, es que estabamos en el bufet y a Agus se le ocurrió que tal vez querías tomar o comer algo ahora, así no bailas con el estómago vacío
- en realidad no tengo hambre -dije frunciendo los labios
- algo tenés que tener en el estómago, te podes desmayar
Suspiré rindiendome, aunque tenía el apetito cerrado y sentía nauseas y mareo probablemente por los nervios, acepté. Es verdad, no puedo bailar sin haber comido en todo el día.
- esta bien, tenes razón. Me termino de cambiar y voy
- dale, queres que te espere?
- no, esta bien. Andá tranquilo, yo ahora voy.
- bueno te esperamos -sonrió y luego se fue
Cerré la puerta y vi a Fer apoyado en la pared con el jean puesto pero aún sin remera, con el pelo revuelto y los cachetes colorados. No pude evitar morderme el labio al observarlo. Él me vio y se acercó a mi y me tomó de la cintura.
- por qué me lo haces más dificil?
- vos lo haces difícil, estas hermoso -dije acariciando su pecho y bajando hacia su abdomen mientras lo observaba con deseo. Él me tomó de las muñecas y luego con un movimiento brusco pero sexy, me puso de espaldas a él y me acercó aún más a su cuerpo. Mi respiración comenzó a entrecortarse.
- nada más unos minutos más -me susurró al oído mientras tomaba el borde del toallon que aún envolvía mi cuerpo y lo soltaba dejándolo caer a mis pies. Mientras me acercaba aún mas la pelvis a mi trasero, comenzó a acariciar mis pechos aún a mis espaldas. Me arqueé hacia atrás apoyandome en su cuerpo pero al hacerlo me mareé. Así que le pedí a Fer que frenara y me incorporé nuevamente.
- qué pasa? -me preguntó mirándome preocupado
- nada, me mareé un poco -le dije agarrandome la cabeza- Rodri tiene razón, tengo que comer algo
- no comiste nada hoy? -me preguntó mientras levantaba el toallon. Me envolvió con él y me acercó la silla para que me sentara.
- no, estoy nerviosa. También puede ser contractura muscular que me afecte las cervicales.
- querés que te traiga algo?
- no, no gracias. Ya se me esta pasando, me pasas mi ropa por favor -le pedí y él me la entregó aún con preocupación en su cara.
- estas bien? -me preguntó una vez que ya estuve vestida y me puse de pie
- si, me siento mejor. Vamos con los chicos -lo tomé de la mano y caminé hacia la puerta. Él me frenó antes de que abriera y me dio un tierno beso en los labios.

Me enamoré de quien no pensabaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora