●Capítulo 5●

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Narra Astrid:

Ya ha pasado un mes desde que llegue a Berk y la verdad es que me he adaptado bastante bien, estoy muy feliz de estar en este lugar y para ser sinceros no extraño para nada Bella Vista y mucho menos a los que se hacían llamar mis amigos.

Pero bueno, eso ya quedó en el pasado, dejemos las penas para después.

Me desperté mucho más temprano de lo normal, los nervio por los exámenes no me dejaban dormir a si que me levanté y me di una ducha rapida me coloque el uniforme y bajar a desayunar, ahora tendría mucho más tiempo de sobra ya que ingresaba al colegio a las 7:45 y recién eran las 6:00, platique un poco con mis padres hasta que se fueron a trabajar, quede sola, bueno, no tan sola ya que estaba en compañía de mi perrita Tormenta, la adopté hace una semana.

FLASH BACK:

Nos encontrábamos caminando por el centro con Hipo y Heather cuando pasamos por una tienda de mascotas, y sin dudarlo entramos con Heather arrastrando a Hipo con nosotras, parecíamos niñas de 5 años que se asombraban de todo, comencé a mirar todo pero quede completamente enamorada de una perrita un poco peculiar, era única con aspecto de lobo tenia ojos azules y pelaje platinado.

Era lo más bello que había visto, obviamente no dude ni un segundo y la adopte,no me importaba lo que me dijeran mis padres, Hipo también adoptó a un cachorrito de la misma edad de Tormenta (el nombre que decidí darle) y la misma raza con la diferencia de que este cachorrito era completamente negro y de ojos verdes intensos, no tenía dientes aún por lo que Hipo lo llamó Chimuelo, aunque nos parecía tonto ese nombre para el perrito, a Hipo no le importó nuestras críticas y le dejo ese nombre,era adorable cuando lo llamaba así.

FIN DEL FLASH BACK.

Vi que ya era hora de de irme así que le deje un poco de alimento y agua para tormenta, tome mi mochila y salí de casa, al salir note que estaban metiendo muebles en la casa de al lado, bueno, más que casa parecía mansión, era un poco más grande que la mía y más linda. No le di importancia y me dirigí a la parada del bus, al llegar sólo vi a Brutacio y Brutilda, me parecia raro no ver a Hipo ni a Heather allí.

Astrid: Hola chicos, ¿no vieron a Heather o Hipo? (Dije mientras me sentaba al lado de ellos en la pequeña banca).

Brutacio: La verdad no, me parece raro por que siempre son ellos los primeros en llegar a este lugar.

Brutilda: Eso es cierto, además le envíe un mensaje a Heather hoy y no me contestó.

Astrid: ¿No creen que les haya pasado algo cierto? (Pregunté algo preocupada).

Brutacio: No creo, además Hipo había mandado un mensaje al grupo que hoy los llevaria su padre (lo dijo con total tranquilidad).

Brutilda: Bueno, problema resuelto... vamos ahí viene el bus.

Narradora:

Subieron al bus, luego de un corto trayecto llegaron a la escuela, bajaron y se encontraron en la entrada a Anna, Elsa, Kristoff y Jack.

Después de un breve saludo todos ingresaron rumbo a los casilleros, Astrid abrió el suyo acomodo unos libros y al cerrarlo se sobresalto al ver a Hipo, ya hace como dos semanas que el aparece de la nada cuando esta sola o simplemente hablan, claro las intenciones de él no son sólo de amigos él quiere ser mucho más que amigo de Astrid, aunque ella no este preparada para enamorarse otra vez... o por lo menos eso creé.

Astrid: ¡¿HIPO?! (Se sobresalto al ver al castaño detrás de la puerta de su casillero) me asustaste (soltó un suspiro de alivio posicionando una mano en su corazón).

• Confío en ti • [CANCELADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora