Color de Piel

Capítulo Uno

Mia en multimedia.

― ¡Mia!.― El grito de la Señora Carpenter se escuchó hasta los matorrales atrayendo consigo la atención de todos los trabajadores de la hacienda .― ¡Ven ahora mismo aquí ,Mia Carpenter!.

Alguno de ellos reían y otros rodaban los ojos cabizbajos, todos conocían exactamente la rutina de Mia para no escuchar a su madre ,la señora Carpenter golpeó su taco sobre el césped y suspiro frustrada mientras escuchaba a su esposo reír detrás de ella.

― ¿Te parece gracioso?.― Interroga elevando una ceja.

― Sí ,me parece.― Se atrevió a responder a la vez que se alejaba hacia los establos ,sabía perfectamente a dónde se dirigía Mia.― Nuestra hija está creciendo ,Amelia ,deja que se divierta..

―¡Pero lleva un vestido!.― Le gritó.― Está haciendo precisamente eso por esa razón,le gusta fastidiarme.

Él se limitó a reír y avanzo hacia las caballerizas mientras el relincho de la yegua resonaba cerca a los prados , Mia sostuvo las riendas y grito antes de empezar a avanzar acompañada de los ánimos de los obreros ,Leo llego justo a tiempo sosteniendo las riendas de dos vacas que había llevado cerca al charco , logro ver a Mia alejarse sobre la yegua y sus miradas se conectaron durante varios segundos ,ella le guiño un ojo y continuó su camino y el no pudo evitar deslizar una sonrisa ,continuó su camino hacia los establos ,no antes de dejar las vacas bien amarradas en la estaca ,cuando el señor Carpenter había llegado ella ya se había marchado hacia más allá de las colinas.

― Leo .― Llamó el señor Carpenter .

― ¿Mia otra vez?

―Ya sabes cómo es,le gusta contradecir a su madre.―Dejó escapar un suspiro.―Estoy viejo para esto ,hijo ¿puedes?

Pero el muchacho ya se encontraba sacando uno de los caballo más rápidos del establo ,se subió en él y dio un par de pasos girandose al Señor Carpenter ,avanzó en su caballo hasta lo más lejos de la colina y no demoró mucho en encontrar a Mia cerca a uno de los charcos , la muchacha seguía sentada sobre la yegua permitiendo que esta bebiera del agua.

―¡Mia!.― Grito y ambas ,tanto Mía como el animal se enderezaron.

Leo se acercó hasta ella y mantuvo su distancia jalando hacia atrás de las riendas del caballo.

― Debemos volver ,tu madre se enojara más.

Ella se encogió de hombros.―Me gusta verla enojada.

― Vamonos ,Mia.

Mia negó.―Primero tienes que atraparme ,Leo.― Le guiño un ojo y avanzó en la yegua.

Leo sonrió y negó divertido ,no tenia idea de porque ella seguía con esta misma rutina si sabia perfectamente que de los dos él era mejor cabalgando y así fue , en un movimiento rápido logro que su caballo se adelantara y le cerrara el paso , Mia retrocedió la yegua y dejó escapar un suspiro de derrota , Leo bajó del caballo y sostuvo la rienda de la yegua .

― Tienes que enseñarme a hacer eso.

Él negó divertido.― No lo creo.

― ¿Tienes miedo que rompa tu racha? Puedo ser mejor que tu cabalgando.

― Dejaré que lo pienses ,solo por hoy.―Contestó y se agacho a amarrar ambas cuerdas de los dos animales.― Tenemos que volver.

―Eres aburrido.

Leo rio con el gesto de su amiga y inicio el camino con ella hasta donde esperaban el señor y la señora Carpenter, durante el camino ambos no dejaban de sonreírse y de charlar sobre de cómo había iniciado su día, aunque tanto Mia como Leo sabían la rutina del otro , les gustaba hablar y escucharse el uno al otro, sin embargo esa pequeña paz y esas sonrisas se acabaron cuando Amelia Carpenter visualizo a su hija.