Infracciones Cambiadas {Larry Stylinson} [Terminada]

Capitulo 9

Era domingo.

Eran las diez y treinta de la noche.

Era mi última oportunidad.

Era el último día que quizás vería a Louis.

Era el último día que quizás vería a Louis después de dos años.

Ya estaba decidido. Su mamá me había llamado hace unas cinco horas para decir que Louis estaba haciendo su maleta porque se iba a Francia, que ni ella entendía muy bien lo que pasaba y le tuve que contar todo, para que supiera que también lo perdería por dos largos años.

Él no había tenido el valor de decírselo, lo cual me hacía dudar mucho sobre esta decisión. ¿Era la correcta? ¿Louis sentía que era lo adecuado?

Estuve hasta las cuatro de la mañana sin poder dormir, mirando mi celular, mirando el número de Louis, dudando si decir algo, dudando si llamarlo o mándale un mensaje. Si detenerlo o solo desearle suerte, hasta que solo cerré los ojos por lo que pensé eran unos segundos y cuando los abrí ya había amanecido.

Ya había amanecido y ya sentía que lo había perdido.

Frank me llamó para preguntar cómo estaba todo, sin querer mencionar a Louis, pero yo sabía hacia donde quería llegar esa conversación y me dijo que Elena me llamaría, que no debía ser duro con ella, que todo lo que decía era con amor y la defendió por casi quince minutos. Yo también la amaba, era mi mejor amiga, era lo más cercano a una hermana, ya que Gemma no la veía y con Elena prácticamente vivimos juntos en Nueva York por muchos años, así que solo despedí a mi amigo, sabiendo que él estaba retrasando horas de trabajo por hablar conmigo y puse el celular sobre la encimera para preparar el desayuno, pero cuando estiré la mano para tomar el café, me miré la mano izquierda y noté el dorado anillo que tenía, el cual Louis me había regalado el día que me pidió matrimonio.

Me senté en la mesa y me lo saque después de mucho tiempo, para ponerlo en la superficie y comenzar a verlo, casi pudiendo leer el grabado que tenía dentro.

-¿Qué voy a hacer sin ti?

Pensé en voz alta mientras me volvía a poner el anillo y tomaba mi celular ya que estaba sonando, así que contesté sin mirar el número. Tenía que ser Elena, ya que los niños estaban desayunando y ella tenía la hora del día para poder hablar conmigo tranquilamente.

-Hola, cari...

-¿Señor Tomlinson?

La voz de una mujer que no conocía me estaba llamando por mi apellido y revise la pantalla del celular para notar que era un número desconocido.

-Ahm... ¿sí?

-Hola, habla Elsa Greenwood, de la agencia de adopción en Manchester.

Me quedé callado al solo escuchar su nombre y de donde llamaba. ¿Cómo me pasaba esto ahora? ¿Cómo el universo conspiraba de esta manera? ¿Qué se supone que le tenía que decir?

-¿hola? ¿Está ahí?

-Sí, si-hablé rápido-la escucho.

-Bueno, su marido nos trajo su carpeta hace algunos días, pero hemos estado trabajando a capacidad máxima, ya sabe cómo son las cosas aquí-rió-pero hace unos minutos comencé a revisar y leer sus evaluaciones, las fichas y es realmente impresionante.

-¿Qué cosa?-sonreí nervioso.

-Que no hayan tenido la oportunidad de ser padres aun-me respondió-es increíble. Así que lo llamé de inmediato para que nos reunamos lo antes posible, creo que ya tienen mucho camino recorrido con su marido y nos gustaría conocerlos a ambos lo antes posible.