Infracciones Cambiadas {Larry Stylinson} [Terminada]

Capitulo 15

-¡Harry!

Escuché mi nombre por tercera vez desde el primer piso y ya le había respondido las tres veces.

-¡En un minuto!

Le grité de vuelta y después de tomar mis cosas al fin bajé y vi a Louis con los regalos envueltos, listos para ir al cumpleaños número siete de nuestra princesa favorita.

-¿Por qué te demoras tanto?

-Estaba en el baño.

Le respondí de mala manera y dándole más explicaciones de las que él mismo quería.

-Estoy muerto.

Me dijo al solo entrar a la casa después de casi siete horas de la fiesta de cumpleaños.

-Tú no tuviste que tener a Glen toda la tarde en brazos.

-Estuve jugando con las niñas-me miró cansado.

Habíamos llegado solo a sentarnos en el sillón para descansar un poco de los gritos, juegos, bebidas y torta.

Cuando llegamos al cumpleaños, Elena se estaba volviendo loca con tantas cosas que hacer, así que la ayuda le cayó del cielo. Me pasó a Glen, que extrañamente me extendió sus brazos cuando lo saludé y Dara tomó la mano de Louis, para alejarlo de nosotros.

Los seguí con la mirada y ella lo sentó en la mesa del té, que había preparado para sus amigas, para luego ponerle una corona, pero antes de hacerlo me miraron expectantes y yo no entendía nada, pero Louis se rió y solo asintió a su pregunta, para verlo con esa corona toda la tarde.

Estuvo todo el día con ella. Cuando llegaron sus invitados, cuando le cantaron el cumpleaños y hasta cuando tenía que abrir los regalos, mientras yo paseaba de acá para allá con Glen, conversando con otros padres de los niños. Ayudando a Elena y Frank y cuando Dara finalmente libero a Louis, nos pudimos ir a casa.

Cuando regresamos, Louis pasó las dos horas contándome todo lo que pasó y cuando ambos me miraron, había sido una situación muy particular.

Dara estaba vestida de princesa y en su mente inocente, ella necesitaba tener un príncipe, así que pensó en el hombre que más se pareciera a uno, pero además fuera el más guapo y con los ojos más lindos, así que lo eligió a él.

No pude contener la risa cuando Louis me lo dijo, pero la historia no terminaba ahí. Dara se lo pidió, pero antes le preguntó si yo me molestaría si ella lo tomaba prestado para ser su príncipe por su cumpleaños y ahí fue donde todo calzo en mi cabeza, pero como lo vi de lejos, Louis le dijo que yo no me enojaría, así que él fue su príncipe, pero cada vez que llegaba una amiga a su cumpleaños, él se presentaba como tal, Dara aclaraba que él estaba casado, pero que su tío Harry se lo había prestado por ser su cumpleaños.

-Amó nuestro regalo-lo miré feliz.

-Creo que acertamos con todo-asintió.

Ambos estábamos con nuestro corazón lleno después de ese día intenso y no podía dejar de imaginar cómo iba a ser cuando fuera nuestro turno de organizar un cumpleaños para nuestro hijo.

-¿Quieres cenar?

-Creo que comí demasiado-me miró cansado-comí unos cien pasteles.

-¿Esos violeta?

Él asintió y no me sentí culpable porque estaban deliciosos.

-Podría ser una cerveza.

Le dije mientras me levantaba del sillón, pero él me siguió hasta la cocina y después de buscar en nuestro refrigerador, la decepción vino a mí, pero recordé otro lugar donde podría haber guardado algunas cervezas, pero encontré algo mejor.