Desperté porque había dejado la cortina abierta la noche anterior al esperar que llegara la policía, porque la maldita fiesta de Tyler se había salido de control y había gente hasta en mi jardín, pero nunca llegaron y terminé poniéndome tapones y el antifaz nunca lo pude encontrar, así que solo el sol me pudo despertar.
Me di media vuelta y estaba durmiendo solo, lo que me extraño, ya que Louis había dicho que no lo esperara, pero no creí que no llegara a casa. Ya eran más de las nueve de la mañana, no podía desaparecer tanto tiempo sin dejar un mensaje.
Bajé al primer piso para buscar mi celular y poder llamarlo, pero noté que estaba durmiendo en el sillón. Quizás había llegado demasiado tarde y no me quiso despertar, pero mientras más me acercaba a él, más entendía la razón de por qué no subió la habitación. Estaba muy ebrio y no me quiso despertar.
-Louis...-le susurré.
-¿Hmm?
-¿Quieres algo?
No me respondió y volví a susurrar su nombre.
-¿Por qué no subes a dormir?
Abrió los ojos de apoco y me vio inclinado hacia él, mientras le hacía cariño en el cabello.
-¿Quieres algo de sopa?
El negó con los ojos cerrados.
-¿Solo dormir?
Asintió como un niño pequeño y lo dejé solo, para escuchar sus pasos en la escalera, así que dormiría su resaca en nuestra habitación.
Me preparé el desayuno y dejé el suyo en espera, hasta cuando se sintiera lo suficientemente bien para bajar a buscar comida.
Mientras tomaba una taza de café, miraba como el chico del internet hacia la conexión en nuestra casa y podía notar su incomodidad, pero literalmente no tenía nada mejor que hacer.
Louis estaba durmiendo su resaca y ya había pasado hasta la hora del almuerzo, así que la compañía no podía haber llegado en mejor momento, porque ya no sabía qué hacer.
-Listo, señor Tomlinson. La clave del wifi está aquí-me pasó una tarjeta-ya sabe cómo ocupar la televisión por cable-asentí-y...en dos horas, quizás más, lo van a llamar de la compañía para que evalúe mi desempeño. Es algo de rutina.
Me dediqué a asentir y el chico de unos diecinueve años se fue en su camioneta blanca y al salir para ver si todo estaba bien, unos ya familiares ojos azules me estaban viendo desde el otro lado de la calle.
Levantó su taza de café y yo solo negué lento, él me miró con cara de confundido y dudé si hacer esto, pero cuando ya estaba de camino a su casa no podía simplemente detenerme y volver a la mia. Hasta para mí eso sería raro.
-Ayer no me dejaste dormir-le reclamé.
-Es primera vez que alguien se queja de eso.
Lo miré sorprendido por su comentario y después de soltar un bufido furioso me di media vuelta para volver a mi casa. ¿Cómo se me podía ocurrir que esto estaba bien? ¿Cómo esto podía llegar a ser correcto?
-Harry-escuché su voz-¡Harry!
Me tomó por el hombro y me dio vuelta para poder verlo.
-Lo siento...fue una broma. A veces la gente adulta bromea.
Lo miré serio, sin siquiera pestañear y el me miraba con ojos de gatito, pero esa mirada no me iba a quebrar. Lo conocía hace dos malditos días ¿Cómo creía que eso iba a funcionar conmigo?
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Infracciones Cambiadas {Larry Stylinson} [Terminada]
Hayran Kurgu"Las personas no cambian". Eso me repetían todos cuando se los preguntaba, pero...¿como podía ser tan diferente él? Seguía siendo el mismo. Los mismos ojos, la misma boca, el mismo corazón, pero era totalmente diferente para mi. No me miraba de la...