Hermosa Pesadilla (Suga y Tn___)

CAPITULO 38

El avión aterrizo, bajamos por las largas escaleras y entramos al aeropuerto, buscamos nuestras maletas y una vez que las teníamos pedimos un taxi y fuimos al hotel. Estaba cansada, necesitaba dormir, y comer también.

Cuando llegamos al hotel Suga fue por la tarjeta para poder abrir la puerta de la suite, por lo que escuche, entramos al ascensor, mis ojos se estaban cerrando de poco a poco, sentía que en cualquier momento caería dormida, por lo que recargue la cabeza en el hombro de Suga, el me miro y sonrió, parecía cansado también, a pesar de que el sí durmió durante el vuelo, yo no pude.

-¿Tienes sueño?-

Beso mi frente cariñosamente.

Asentí con los ojos cerrados.

-Sí, no pude dormir absolutamente nada-

-Ya casi llegamos-

-Siento que caeré en cualquier momento-

Reí al igual que él.

-¿Quieres que te cargue?-

Me separe de él y con un ojo aun cerrado lo mire.

-Si-

Estire mis brazos hacia el como una bebe que quiere que la carguen.

Sonrió, su sonrisa me hacía sonreír a mí. Se puso de cuclillas frente a mí dándome la espalda, sin dudarlo me aferre a su cuello y enrede mis piernas alrededor de su cintura.

-Hay un pequeño problema-

Dijo.

-¿Cuál?-

Ni siquiera abrí los ojos, estaba plácidamente acostada en la ancha espalda de mi queridito esposo, su aroma era lo más delicioso del mundo.

-¿Cómo rayos voy a llevar solo tantas maletas?-

Me encogí de hombros.

-Es tu culpa, no tenías por que hacer tantas-

Soltó una pequeña risa.

-Perdón por querer darte lo necesario-

Reí.

-Ok, ok, si quieres te ayudo-

Levante la cabeza, el negó.

-No, no, está bien, veré como lo hago-

Me acerque a su oído.

-¿Estás seguro?-

Sentí como se tensó, la piel de su cuello se había hecho de gallina, me separe de su oído y me volví a acostar en su espalda.

-Si...seguro-

Las puertas del ascensor se abrieron, como pudo, Suga llevo todas las maletas, se veía chistoso desde este ángulo, trataba de arrastrarlas todas pero estas se volteaban, intente ayudarlo pero se volvió a negar varias veces.

-Amor ¿puedes abrir la puerta por favor?-

Dijo una vez que llegamos a la habitación.

-Claro-

Agarre la tarjeta del bolsillo de su chaqueta y la introduje en el aparato de la puerta, esta sonó con un "bip" indicando que estaba abierta. Suga dejo las maletas fuera de la habitación y entro para dejarme en la deliciosa cama primero, me estire a todas anchas, era una cama matrimonial y estaba deliciosa.

-¿Enserio ____?-

Cerró la puerta detrás de él.

-¿Qué?-