Capitulo 31. - Gracias por estar aquí.

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Espero puedan leer la nota del final:

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Tres en punto de la mañana.

Un policía, investigador o lo que sea me había interrogado. Fue tan duro para mí que sus preguntas dolían, inclusive llegó a preguntar si era yo la que lo había apuñalado.
...
No me dejaron pasar a urgencias con Sebas, así que tuve que quedarme en uno de los sillones de la sala de espera. Todo era tan tranquilo, había un silencio sepulcral y casi no había nada de personal dentro del hospital. No podía lidiar con éste sentimiento, tomé mi celular y marqué a Mario.
Sonó casi cuatro veces para que él me contestara.
— ¿_____?
—Mario... Sebastián—Dije con la voz entrecortada.
—Amor ¿Qué sucede? estás asustándome. ¿Dónde estás? iré por ti ahora mismo—Dijo con la voz dulce y llena de preocupación.
—Te necesito—Comencé a sollozar. —Aquí en el hospital Downtown.
—Ahí estaré—Cortó la llamada.
No puedo explicar lo débil que me sentía, de todas las horrendas historias que pude haber imaginado que me sucedieran... nunca pensé en ésta. ¿Cómo reaccionar cuando estás perdiendo a un amigo? A un compañero que creías ibas a tener toda tu vida, lo más cercano a un hermano, ¿Cómo?
Los nervios me comían por dentro, veía enfermeras correr por los pasillos con sábanas limpias y luego volvían a pasar con sábanas llenas de sangre.
Estaba en lo más cercano a una película de terror.

Luego observé como Mario entraba por los pasillos, al mirarme corrió hacia mí y yo me puse de pie. Lo abracé como nunca antes lo había hecho, y el igual a mí. Lloré de nuevo, ésta vez con más fuerza.
—Llora todo lo que quieras, estoy aquí—Acarició mi cabello, no podía soltarlo.

Después de un momento nos sentamos, Mario aún seguía abrazándome y besando mi cabello, mientras que yo no podía ni hablar si quiera.
—Gracias por estar aquí.
— ¿Estás bromeando? merezco una buena tunda por no haber estado antes—Dijo por bajo, lo cual me hizo sonreír entre mis lágrimas.
—Apuñalaron a Sebas, él... estaba muriendo entre mis brazos.
—Shhh... no digas nada, ya lo sé todo. Me lo contaron antes de entrar al hospital.
— ¿Quién te lo dijo?
—El oficial el cual te entrevistó cuando llegaste al hospital. No entiendo por qué simplemente no pidió el dinero.
—Supongo que no quería ser una molestia.

Minutos de silencio que se convirtieron en horas, terminé quedándome dormida en los brazos de Mario, todavía en la sala de espera.
— _____... mi amor, despierta, ¡Hay noticias de Sebas!

Abrí los ojos de golpe, estaba el doctor frente a nosotros con su cara llena de seriedad, temía lo peor. Mis manos comenzaron a temblar pero Mario me tomaba con fuerza.
— ¿Señor Sebastián Villalobos?
—Si, si—Dije exasperada.
—El señor perdió mucha sangre, el cuchillo perforó lo más profundo de su cuerpo a tal grado de casi traspasarlo por completo.

Mario y yo nos miramos y el doctor prosiguió.
—Ha sido una larga batalla, el cuchillo no tocó ninguno de los órganos vitales, pero la herida es muy profunda, hemos hecho todo lo que pudimos.
— ¿A qué se refiere con eso, doctor? ¡Termine de una vez!
—Sebastián... él está... fuera de peligro.
Suspiré, estaba aliviada, es como si hubiese tomado una gran cantidad de cafeína, estaba más despierta que nunca. Mario me abrazó muy fuerte. Esto es un milagro.
— ¿Podemos entrar a verlo?
—Sí, hasta que lo trasladen a la nueva habitación. Les pido que sean pacientes, él no ha despertado. Quizá despierte alterado, él no está pasando por una situación fácil. Fue atacado cruelmente, quizá presente algunos traumas. No lo sabemos, hasta que despierte.
—Eso no importa, ¡Él está vivo! —Corrí y besé en la mejilla al médico. Estaba realmente emocionada. — ¡Ya quiero verlo!

—Bien—Rió el médico. —En unos minutos los llevarán a la nueva habitación del señor Villalobos. Que tengan buen día.
Se retiró.
—Está vivo, Mario. Está vivo—Lo agarré del cabello y le planté un beso, lo cual lo impresionó bastante.
— ¡Wooooow! ¿Qué fue eso?
—No sé, estoy contenta.
—Lo he notado—Rió. —Él es un chico muy fuerte, sé que estará al menos unos cien años más jodiéndome la vida.
— ¡Alberto!
— ¿Qué? —Rió. —Sólo bromeaba.

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Tendremos Sebas un rato mas en la novela, espero no haberlas asustado tanto jajaja:3

Como ya se pueden dar cuenta por la imagen del capitulo ya estamos mas cerca del final de esta historia en verdad voy a tratar de hacer lo mejor para que juntos disfrutemos de este, realmente aprecio todo el apoyo que me dan, sus comentarios son vida para mi, gracias por eso💕

Probablemente esta sea mi ultima novela y tratare de estar mas conectados con ustedes y explicarles todo de mejor forma, espero me acompañen en el proceso hasta el final 😭❤️

insta: _Fannymc

UN DULCE AMOR: "EL PRECIO DE LA FAMA" - MARIO BAUTISTA & TU.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora