-Amor, ¿y si damos una vuelta?–decía un chico acariciando el cabello castaño del que aparenta ser su novio, quien, recostado en el sofá, apoyaba su cabeza en el regazo del otro chico.
-¿Te parece si vamos al parque?–preguntó el muchacho.
Ambos chicos se levantaron del sofá y fueron a la calle, con sus manos entrelazadas. Caminaban alegremente por el parque comiendo un helado.
-En serio no puedo creer que me dejaras por esta basura maricona–dijo una mujer de cabello rubio blanquecino que ocupada un gorro de lana color blanco con franjas rosas.
-Aceptalo, se acabo. Lo amo a él–dijo el chico de cabello castaño. La muchacha, enfurecida, se abalanzó sobre el otro chico quien miraba todo con temor y lástima. El muchacho corrió lejos de la mujer quien sacó de su bolsillo una navaja, para herirlo.
El pelicastaño la detuvo, pero el chico siguió corriendo. Cruzando la calle, un claxon hizo que se detuviera, pero al hacerlo, un camión lo arrolló.
-No...¡NO!
Todo oscuro.
-¡NO!–gritaron Onnie y Bonnie al mismo tiempo con lágrimas en sus ojos y mocos colgando de su nariz.
-¡No griten! Es solo una serie de ficción–dijo molesto Oxy, quien recibió por ambos lados los gritos de los dos chicos.
-¡Pero Mike no se merecía un camionaso!–dijo Bonnie.
-¡Si! Todo es culpa de la perra de Inés que no dejó de psicopatear a John–Lo apoyó Onnie.
-Calmate conejito, seguro estará bien, ya sabes, es el principal. Mira, ya comienza el siguiente capitulo.
Los cuatro chicos estaban en el sofá mirando una serie que a todos les gustaba, pero a Onnie y Bonnie les fascinaba en específico. Dos chicos, amigos, se enamoran. Uno de ellos tiene novia, con la cual termina para irse con su amor, pero esta hace de todo para meter al chico que le quitó a su novio en problemas legales.
-Lo sentimos...–dijo un doctor–el paciente a quedado en coma...
El muchacho castaño llamado John, estupefacto, soltaba silenciosas lágrimas.
-Tranquilo, pronto despertará. Aprendimos a Inés. De esta no se salva, tenemos cinco testigos de que ella trató de hacerle algo a Mike. Se pudrirá en prisión con los otros cargos, tranquilo John–decía Matt. Un policía rubio y ojiverde amigo de la pareja afectada.
-¡NO!–volvió a gritar el par de chicos al oír aquello.
-¿¡Por qué gritan!? Si Mike está en coma, no muerto, y la perra esa se irá a prisión.
-¡Porque Mike despertará con amnesia! Es seguro. Siempre que alguien termina en coma por un accidente así le ponen salseo a la mierda con perdidas de memorias–dijo molesto Onnie con su tono gracioso de voz cruzado de brazos junto a Oxy.
-Oye, ¿Qué te parece si vamos a dar una vuelta?–dijo Deuz al oído de Bonnie?
-¿Y terminar como Mike? N–calló al ver el rostro de "¿en serio?"–si, vamos.
Ambos chicos se levantaron, de la percha tomaron sus abrigos y abrieron la puerta.
-No corras en dirección a las calles. Ya viste a Mike–dijo divertido Oxy. Todos soltaron una carcajada. Bonnie y Deuz salieron de casa camino a ningún lado.
Las calles estaban oscuras a excepción de las farolas en estas.
Ambos chicos iban tomados de la mano, hablando de trivialidades.
-¿Te quedarías hoy conmigo?–preguntó Bonnie.
-Claro, ¿estarás sólo?
-Si. Kiwi vive con sus amigas. Esa mujer...Andrea...se volvió una madre para ella así que creo que no está mal que se quede allí. Además yo la ayudo monetariamente.
-Ya veo...¿qué harás mañana?
-Bueno, se suponía que hoy vería a Foxy y mañana pasaríamos el día juntos como amigos, pero lo platea hoy se podría decir por el concierto, así que mañana pasaré el día con él.
-Okay.
Los chicos llegaron a la casa del pelimorado, que era de dos pisos, paredes blancas y dos ventanales de vidrio a ambos costados de la puerta, que dejaban ver obscuridad pues la casa estaba desierta.
-Pasa. Ponte cómodo–dijo el pelimorado.–¿te ofrezco algo de beber?–preguntó entrando a la cocina.
-No, gracias–respondió Deuz.
-Está bien. Mira, en aquella puerta hay un baño, en él te puedes bañar, te traeré algo de ropa para dormir–dijo Bonnie apuntando a una puerta junto a la escalera que era el baño para invitados.
-Gracias peque-dijo Deuz para finalmente entrar a bañarse.
Al salir de la regadera encontró una playera de color azul que le pertenecía a él, pues la olvidó aquí hace algún tiempo.
Subió al cuarto de Bonnie, donde el pelimorado se encontraba tendido sobre la cama. Llevaba puesta una playera de mangas largas y un short holgado. Miraba el techo pensando.
-Hey–dijo Deuz para llamar su atención.
-Ven, acuestate conmigo–dijo metiéndose bajo las mantas dándole espacio a Deuz.
Este se acostó junto al chico y lo abrazó.
-Te quiero...–susurró Bonnie.
-Y yo a ti–dijo el pelicastaño antes de besarlo en los labios.
Bonnie colocó sus manos en el pecho de Deuz, y este, sus manos en la cintura el pequeño pelimorado, atrayéndolo hacia si.
Deuz, como acción de querer avanzar metió su lengua en la cavidad bucal del pequeño, comenzando así una batalla por el poder, que, para la sorpresa de Deuz, estaba igualada.
Se montó sobre Bonnie para comenzar a lamer su suave cuello blanco y libre de marcas, dejando también a su paso una pequeña marca rojiza de dientes.
Cuando el oelicastaño se dispuso a desvestir a Bonnie de su playera este lo detuvo algo tembloroso.
-No...Aún no...–susurró bajo.
-No te lastimaré, tranquilo...–Deuz de disponía a continuar pero fue detenido otra vez.
-Por favor...
Bonnie no dejó que Deuz hablara pues se levantó de la cama y se metió al baño, cerrando la puerta tras de si.
Bueno, lo dejo hasta aquí, más tarde subo la continuación que yo presiento me va a hacer llorar :'V
Les gustó mi trolleada del principio? 7u7 En comentarios diganme si pensaron que fue Bonnie quien recibió un camionaso xD
Y antes de que se vallan :3
Qué otro Shipp yaoi o Yuri quieren en la historia? :3
Ahora si Bye~♥