Cambiaste mi vida (Ruggarol) [Editando]

Tratando de cambiar ☆

Karol

Ya estábamos en Argentina y como que se siente un aire nuevo, hasta buenas vibras, diferentes personas, todo diferente, y me gusta, al menos un poco.

Mónica se acerca y quiere decirme algo pero tarda unos segundos para hablar.

—Karol —hace una pausa, como si estubiera eligiendo las palabras adecuadas ¿desde cuando le importa como decirme las cosas? —Yo me voy a mi casa con mi esposo y mis hijos
—¿Ok? Eso si que no me lo esperaba.

Y tampoco supo elegir las palabras, fue directa, demasiado.

—¿Qué? ¿Cómo que con tu hijos?

Asiente —Eres adoptada, me parece raro que no te hayas dado cuenta, somos muy diferentes, en todo sentido —se acerca —En cuanto a tú padre, nunca se fue, solo me estaba esperando aquí.

—¿Por qué carajos me adoptaste entonces? —ella alza sus hombros con indiferencia —¿Y qué quieres que haga ahora? ¿Me van a seguir dando dinero o qué? —confundida no alcanzaba para describirme ahora.

No es que esto me haya tomado por absoluta sorpresa, tuve mis dudas con el pasar de los años, recuerdos en mi mente que no concuerdan con mi actual vida, primero pensé que eran simples pensamientos de lo que deseaba tener, pero hasta recuerdo rostros que jamás vi, y eso es raro.

—Toma —me entrega un sobre —Es lo que tenemos y podemos darte, tendrás que trabajar cuando te falte —se da media vuelta pero se vuelve a girar y me mira —Suerte con tu vida, chau.

Y así, sin decir nada más se va, dejándome totalmente sola y desconcertada. No es exactamente lo que me imaginaba que ocurriría.

No puedo creer que soy adoptada, o no puedo creer que al fin lo haya confirmado, eso es bueno por un lado porque me alegra no ser hija de esa mujer pero ¿por qué me dieron en adopción? O una mejor pregunta ¿Para qué me han adoptado si no me querían? Mi supuesta mamá siempre me decía que yo era un error, ella estaba borracha mi papá falso también lo estaba y solo pasó y de ese error vengo yo, así que ahora se que no es así... ¿Estarán vivos mis padres?

Me iba caminando por la ciudad buscando un lugar en donde quedarme, algo que se vea económico. En eso llega Carolina una chica que conocí aquí en Argentina cuando venía porque mi "mamá" tenía que "trabajar" ahora ya se que venía a visitar a su familia, porque siempre me dejaba en la plaza, seguramente estaba deseando que alguien me llevara pero nunca pasó así. En fin, ahí conocí a Carolina.

Yo no quiero a nadie, a nadie le regalo una sonrisa soy muy antisocial pero ella siempre trataba de hablar conmigo, de entablar una conversación, obviamente nunca le di mucha importancia, no me sale eso de abrirme a la gente.

—Ey ¿vos sos Karol? —una gran sonrisa aparece en su rostro.

—Sí —ya ven, no puedo, no me nace.

—Me alegra verte otra vez -se acerca —Adivino viniste por el trabajo de tu mamá —empieza a sacarme conversación como si de verdad pudiéramos hablar.

—No, es otra cosa.

—¿Qué cosa? —espera por mi respuesta pero hago caso omiso, no tengo por qué dar explicaciones
—Mira, perdón por ser tan curiosa pero nunca me hablas, yo no soy mala, y no te haré nada, o por lo menos decime si te caigo mal y me voy.

—No me caes mal, no es contigo, es con todos.

—Okey, lo siento —se va caminando lento como si esperara a que la llame o que le pida perdón.

Soy muy antisocial, creo que es por miedo a que se burlen de mi, de lo que digo, de lo que hago ¡todo! Mi niñez fue dura... No tenia padres que me dieran su amor y eso no justifica mis actos pero al menos lo explica. Tengo un nudo en la garganta, unas ganas de llorar, me siento tan perdida en este momento, tan mal sentimentalmente, nunca quise a Mónica pero ahora estoy completamente sola y pareciera que el mundo me queda grande, que no soy nada.