Amor encarcelado (Sirius y tú)

Celos

Habían pasado 2 meses desde tú llegada a Hogwarts. Sirius aún no se daba cuenta de que tenía sentimientos por ti. Pero se dió cuenta de que caíste a sus pies, como todas y te molestaba con eso. Aunque sabías lo que sentías por él, eras orgullosa. No le demostrarías nada a un mujeriego. La verdad es que eras casi como él, pero no andabas haciendo caer chicos a tus pies. Ese día estaban en la sala común tratando de hacer la tarea de pociones.

S: esto es pesadísimo.

Tn: oh Black, cállate, trato de ser positiva y tú me hechas mierda.

El se hecha a reír cómo un loco a propósito para desconcentrarte. Y lo logró, te hechaste a reír.

  Tn:  me las pagarás

Se empiezan  a hechar manotazos jugando cómo 2 inmaduros de 15 años que eran. Hasta que uno vuelca el frasco de tinta en la redacción del otro.

  Sy Tn: ¡MI TAREA!

  Agarran sus materiales y las guardan en la mochila. A sus redacciones las tiran al fuego.

  Sy Tn:  ¡me voy, ya me indignas!

Dramatizan dolor e indignación. Se van a su cuarto y dejan sus cosas allí. Sirius  y tú se van a pasear separados. Mientras vas paseando sola, te encuentras con tu primer ex. Él quería volver contigo, pero lo habías dejado por 2 razones: 1- por violento y 2- ahora tu corazón era de Sirius. Hay tensión en parte de ambos. Él era un rubio de ojo azules, pero por sus músculos parecía Hulk humano. De repente te agarra de la cintura y te besa justo cuando Sirius llegaba al sitio. A este último le hirvió la sangre. Te separó de él a la fuerza y sin decirte nada te arrastró con él. Cuando estaban solos, te acorraló contra la pared.

 Tn:  ¿se pue....?

S: pensé que ese tipo era pasado ¿qué haces besandote con él?

  Tn:  me lo encontré y él me agarro de sorpresa y me besó.

  S:  ¿ah, sí? Después de ese beso suculento ahora quieres volver con él ¿verdad? Aunque él te haya tomado por sorpresa. Parece que no lo olvidaste.

  Tn:  ¿y a tí qué te importa?

  S:  ignoras lo mucho que me importa, si te besas con él u otro estúpido.

Se acerca bastante a ti, hasta que sus narices chocan. Esa mirada intensa te hacía poner nerviosa.

  S:  no te quiero ver con él, o con otro (susurra)

Te deja libre y se va por otro camino. Vos, más roja que un tomate, volvés a la sala y le contás a tus otros amigos la extraña actitud de Sirius. Ellos ya adivinaron lo que le sucedió al muchacho, pero no te lo contaron.

J: oh, qué raro.

R: ya hablaremos con él, no te preocupes.

Te vas a tu cuarto tranquila.