La examinación de la escoba

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Pasaron una grandes vacaciones navideñas. Organizaban un juego de Quidditch en algún lugar apartado de muggles y se turnaban para volar la saeta de fuego. Hermione no iba,le seguía teniendo malos ojos a la escoba.

M: ¿Y si te le enviaron por error?

H: Tu envidia alimenta mi ego.

  M:  Ti envidi aliminti mi egi

Ron: No te pondrás en acuerdo con Hermione ¿verdad?

   M:  Ni loca. Yo la quiero pero somos agua y fuego.

Todos se entristecieron cuando acabaron las vacaciones. Se despidieron de todos y marcharon rumbo al castillo. Tampoco se alegraron mucho a comenzar las clases. Esa noche, Harry le sacaba brillo a su Saeta Y Ron y Marlene lo contemplaban embobados.

T: ¡Ni que fuera gran cosa esa escoba!

R: ¡Cómo te atreves!

   M:  Déjalo, Ron, el le tiene fobia a las alturas y si le tiene fobia a ellas le tendrá fobia a la escoba.

De repente se abrió el cuadro y entró Mcgonagall con la compañía de Hermione. Esta se sentó en un sillón y, con la frente colorada, comenzó a "leer" un libro al revés.

Mc: Me han dicho, Potter, que te regalaron una Saeta de fuego para navidad ¿no?

H: Sí

Ron y Marlene miraban recelosos a Hermione.

 Mc:  ¿Me dejas examinarla?

Harry le entrega la escoba. La profesora la examina de una punta a la otra.

   Mc:  ¿Y no venía con una nota o nada escrito?

 H:  No

La examina un poco más.

  Mc:  Me temo que tendré que llevármela. La desarmaremos y cuando veamos que no tenga nada se la devolveremos.

M, H y R: ¿Desarmar la escoba?

  Mc:  Exacto. Sólo verificaremos que no tenga nada.

Dicho esto salió de la sala con la escoba. Harry, Marlene y Ron se acercaron a Hermione como 3 fieras hambrientas.

  R:  ¿Por qué le contaste a Mcgonagall, Hermione?

Her: Porque pienso (y la profesora está de acuerdo) que la podría haber enviado Sirius Black. 

Amor encarcelado (Sirius y tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora