Lunes, de nuevo lunes y definitivamente iba tarde, me habia quedado dormida y llegaria tarde a mi clase de trigonometria, la semana apenas empezaba y el suelo frio contra mi rostro despues de caerme de la cama me estaba gritando que esa definitivamente no iba a ser mi semana.
lo que mas añoraba ese que se acabara ese año para mudarme a un tranquilo campus universitario lejos de mi disfuncional familia y lejos del riesgo de ser primera plana en alguna pagina de chismes... especialmente, lejos de mi profesor de trigonometria.
-Demonios- susurre aun con la cara contra el suelo y me levante rapidamente, me duche y vesti a la velocidad de la luz y antes de salir de casa corriendo a coger el auto bus tome una barrita de cereal de la alacena.
Llegue justo a tiempo a la parada pero el autobús, estaba lleno y ya iba tarde así que tendría que resignarme a ir parada, me acomode en frente de una señora con un bebe de unos dos años en brazos y tras de mi había una chica hablando por celular pero no sabíamos si la chica escuchaba porque nos estaba contando a todos de su conversacion gracias a los gritos que emitia al responderle a su interlocutor. De repente cuando el autobús arranco un dedo intermitente toco mi mano y voltee mi cabeza a ver al chico sentado tras la señora del bebe,era obvio que habia sido el porque su dedo seguia sobre mi mano y yo lo mire interrogante.
-¿te quieres sentar?-me pregunto cortésmente quitándose un audífono, tenía un gorro negro tapando todo su cabello y una sudadera gris, el chico era relativamente atractivo de ojos cafés y labios levemente carnosos, el rostro delgado y mirada penetrante.
-claropero obviamente no hay sitio-le conteste con una sonrisa para no parecer grosera. ser hija de mi padre me habia enseñado a ser educada en todo momento, sin importar que pasara.
-muy buena deducción señorita perspicaz pero resulta que te estoy ofreciendo mi sitio teniendo en cuenta que esa maleta parece algo pesada.
-oh pues en verdad te lo agradezco porque siesta pesada-le sonreí y él lo hizo de vuelta, en el reducido espacio de unoscinco centímetros o menos entre persona y persona él se levanto y yo me sentépero él se quedo parado frente a mi sostento del tubo encima de cabeza, ahoraque lo detallaba era realmente alto, por lo menos unos 10 o 15 centimetros mas alto que yo.
ya no dije nada mas y unicamente se escuchaba el murmullo de las personas que hablaban por telefono y el sonido de la musica de algunos que aspiraban a quedarse sordos jovenes, el chico lindo que me habia dado el asiento estaba expectante, viendome como si esperara que le dijera algo mas pero no lo conocia y no tenia intencion de entablar una conversacion, no me gustaba mucho hablar.
-y¿a dónde va la chica perspicaz? - pregunto ya dandose cuenta de que no iba a hablar yo primero.
- a firmar mi sentencia de muerte- fue lo unico que conteste y el rio un poco.
- vas al instituto-dijo y yo asenti con una sonrisa frustrada-no te preocupes, todos llegamos tarde a clase alguna vez en la vida.
- el problema es que suelo quedarme dormida cuando tengo trigonometria a primera hora y mi maestro es un asesino.
me rei y escuche como mi telefono empezaba a sonar en mi bolsillo asi que lo saque y en el identificador vi una foto de mi mejor amigo y yo cuando teniamos trece.
-Nicolás si me vas a decir que voy a llegar tarde a clase de trigonometría no te preocupes que me di cuenta desde que me caí de la cama esta mañana.
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¡Hey Eli! ¿Que Tal Todo?
Teen FictionElizabeth Bowman es una chica callada, divertida y la hija del presidente. Cuando Connor, principe de Suecia irrumpe en su vida y tiene que irse a vivir con su padre su ultimo año que esperaba fuera tranquilo se vuelve un desastre ¿sera que Eli es c...