quarenta e um

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Narra Pedro:

Un día nuevo despertando al lado de Alejo pero sé que pronto me tendré que ir. Pronto es exactamente en cinco días y no quiero irme.

—Buenos días bebito.

—Buenos días príncipe.

Sonreí y besé su mejilla.

—¿Qué hora es?

—Creo que las ocho de la mañana.

Dije con un tono triste, tan solo faltaban ciento veinte horas para irme; sin embargo, tengo un mal presentimiento.

—¿Pasa algo?

—No, nada...

—Pasa algo, dime.

Hizo un puchero rogándome para que le contara, no es tan secreto que digamos.

—Tengo un mal presentimiento de que algo va a pasar y tengo miedo.

—No creo que algo salga mal. Te prometí qur te voy a proteger y no voy a romper esa promesa.

—Eres el mejor novio que alguien pueda tener, ¿Lo sabías?

—Obviamente chama.

Reí al escuchar su intento fallido del acento venezolano.

—Te sale raro.

—Seguro que a tí no te sale el argentino.

—¿Me estás retando?

—Veremos quien gana.

Agarré mi teléfono, entré a Twitter y empecé a grabar.

—Bueno hija, di algo con el acento venezolano. Veremos que dice la gente.

—Coño marica se me provocó una arepa.

Corté el vídeo y lo subí a la red social.

Lo vi a él con el teléfono apuntando hacía mí.

—Tu turno, veremos quien gana.

—¿Vos no tenés nada más que hacer o vas a seguir diciendo boludeces?

Cortó el video y lo subió mientras se reía.

—Admito que te salió bien el acento argentino.

—Te falta mejorar el venezolano pero con práctica, todo se puede.

Sonreímos y esperamos hasta que respondieran las personas.

Tres minutos después...

Admito que quedé empate con Alejo pero definitivamente esto no se iba a quedar así.

ibf; divalejoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora